'Sense ficció' aborda en TV-3 el problema del despoblamiento

Mientras ciudades como Barcelona corren el peligro de morir de éxito por la abundante afluencia de turistas, otros lugares de Catalunya, como algunas poblaciones del Pirineo, padecen una sequía preocupante de habitantes. El informativo de TV-3 'Sense ficció' aborda el martes (22.00) esta problemática a partir del ejemplo de Prat de Comte, el municipio más pequeño de la Terra Alta, en el reportaje 'Benvinguts al poble', una coproducción de TV-3 y Gestmusic.

Dirigido por Núria Fonollà, el programa plantea, además, una reflexión sobre el envejecimiento de la población, la falta de perspectivas de los jóvenes, la idealización de la vida rural y la adaptación de los recién llegados o los problemas de convivencia en una comunidad muy pequeña, entre otros temas.

MEDIDA DEL AYUNTAMIENTO 

Con menos de 200 habitantes, Prat de Comte vive un peligro real de despoblamiento. Por este motivo, el Ayuntamiento ha hecho una llamada para buscar a familias con hijos que se quieran establecer en la localidad y evitar, así, el cierre de la escuela rural. El programa da respuesta a interrogantes como cuál es la situación actual de la localidad, cuáles son los motivos de su despoblamiento, qué soluciones se han puesto en marcha para detener esta situación crítica o cuál ha sido la respuesta a la acción de las autoridades.

En este sentido, algunas familias que escolarizaban a sus hijos fuera han vuelto a matricularlos en la escuela rural, mientras otros vecinos no ven con buenos ojos las facilidades que el consistorio da a los recién llegados.

'Benvinguts al poble' también aborda las historias de algunas de las personas que se han instalado en el municipio para hacerse cargo de negocios, como una agrotienda o una destilería de aguardiente.

REVISTA CONTRACULTURAL

A continuación, 'Sense ficció' emite 'Ajoblanco, crònica en roig i negre', una coproducción de Televisió de Catalunya, Lastor Media y TVE, dirigida por David Fernández de Castro. Fundada en 1974, los creadores de la revista querían huir de cualquier tipo de autoritarismo. Identificados con ideas libertarias, lograron poner de acuerdo a franquistas y comunistas.

La publicación marcó una década de periodismo contracultural, hasta su cierre, en 1980. Posteriormente, entre 1987 y 1999, vivió una segunda existencia, pero con un planteamiento diferente. A través de la historia de la revista, 'Sense ficció' elabora un retrato de la Transición y de la convulsión que vivieron numerosas disciplinas en ese periodo.