NUEVO PROYECTO TELEVISIVO

Albert Espinosa estudia trasladar su 'Lucas' a Italia o EEUU

El autor de 'Polseres vermelles' y Antena 3 discrepan en cómo realizar la ficción

Albert Espinosa,

Albert Espinosa,

OLGA LERÍN / BARCELONA

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El último hijo televisivo de Albert Espinosa, Lucas, traspasará probablemente fronteras, a imagen y semejanza de sus exitosos predecesores, los Polseres vermelles. Sin embargo, y a diferencia de estos, no será profeta en su tierra, ya que las negociaciones para su producción entre A-3 (cadena a la que inicialmente iba destinado el proyecto) y el guionista, autor teatral y escritor no han llegado a buen puerto. Pero la ficción no termina aquí su recorrido. Espinosa ha recibido ofertas de la RAI -la tele estatal italiana hizo la primera adaptación de Polseres…-, Fox (emite también su propia versión, Red band society, en EEUU) y de una tercera cadena. «Estamos muy cerca de encontrar el camino», confiesa.

«A-3 siempre me ha tratado muy bien -comenta-, pero después de 15 meses hablando del tema y de mil reuniones, no hemos  encontrado el punto para reflejar en el contrato la libertad creativa que yo necesito».

«PASIÓN Y LIBERTAD» // Espinosa desmiente que la cadena le llegara a imponer a los actores -«Eso no es cierto»-, pero afirma que, como guionista y productor de Lucas, no ha querido renunciar  a escoger el equipo técnico y artístico. Y detalla que habían llegado a un «60%» de acuerdo. «Alguna de las partes tenía que ceder, y yo no he querido hacerlo por una cuestión de pasión y libertad».

El proyecto se encontraba en una fase embrionaria y las discrepancias con A-3 llegaron antes del inicio del rodaje de la serie. Según la cadena privada, Espinosa insistió en decidir, de forma unilateral, el director y el reparto principal. A-3 le envió una carta que reflejaba su voluntad de trabajar con el autor de manera colaborativa -como hace habitualmente-,  respetando su libertad creativa, a la que Espinosa no respondió.

El guionista trabaja ya en el noveno capítulo de Lucas, de los 10 de los que consta la historia. «Los ocho primeros no los ha leído nadie, ni A-3, porque no los he llegado a entregar». También asegura que no ha cobrado «ni un duro», porque como método de trabajo Espinosa opta por escribir el proyecto entero antes de mostrarlo. «Me funciona muy bien, aunque reconozco que no soy un autor normal. Lo que yo pido probablemente no lo exige nadie», reconoce.