tú y yo somos tres

Pintan a Rajoy de atracador

FERRAN MONEGAL

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Es interesante el giro que poco a poco va imprimiendoPablo Motos enEl hormiguero (A-3 TV). La mayor parte del programa se basa en la espuma, elshowmitad espectáculo, mitad espot publicitario, sobre criaturas famosas que van pasando. DesdeCarlinhos Brown, que el otro día se dedicó a mover los brazos y a menearse como si estuviera en plena rúa de carnaval, hasta lavampAlessandra Ambrosio, que fue entrevistada con la única finalidad de anunciar una maquinilla depiladora, un artilugio por lo visto muy práctico que mantuvieron encima de la mesa todo el rato. No obstante, además de esta mezcla de gaseosa y propaganda, se reservaMotosmuchas noches el primer cuarto de hora del programa para practicar la sátira política, los monólogos sarcásticos, o la creación desketchesde gran mordiente sobre la actualidad. Hace apenas 24 horas, por ejemplo, y tras anunciar el Gobierno la intervención de Bankia, salióMotosy advirtió:«Rajoy va a meter en ese banco el dinero que ha recortado en educación y sanidad». y acto seguido nos pasó un tremendosketch, tan divertido como bárbaro, tituladoAtraco al revés, en el que vimos a un doble deMariano Rajoyentrando en una entidad bancaria pistola en mano. O sea,Rajoypintado como atracador. Y lo más curioso, lo más acollonante, es que una vez dentro de la entidad vimos que atracaba a los clientes, robaba al humilde personal que hacía cola delante de los mostradores, y una vez conseguido el botín, lo entregaba al director de aquel banco, diciéndole:«Aquí Mariano Rajoy, un amigo, un siervo, un esclavo». ¡Ahhh! La humorística parábola fue de una corrosión admirable, digna del sarcasmo dePolòniao deEl intermedio. O sea, quePablo Motosensaya la dentellada -cada vez de manera más habitual- y nos proporciona arranques de programa demoledores y cáusticos.

BUENAS NOCHES Y POCA FUENTE .-Y mientrasMotostrabaja la sátira,Buenafuente, en la misma cadena, duerme una siesta extraña. Su programa semanal no solo no consigue audiencia significativa -que a mi modo de ver sería lo de menos-, sino que parece funcionar a medio gas. O sea, acaba de llegar como quien dice, pero parece que ya tiene las pilas gastadas. La ironía, la dentellada, el ingenio, el sarcasmo lúcido, que son sus mejores armas, todavía no aparecen por ninguna parte. ¡Ahh! A ver si ahora va a resultar queMotos, día a día, le va a ir comiendo el terreno de la mordacidad.