Pablo y Ana Rosa se acoplan

Es muy natural lo que está ocurriendo con las estrellitas de Cuatro, después de que esta cadena haya sido engullida por Tele 5. Los pajaritos de Cuatro que no han sido desechados, que no han sido despedidos y mantienen la ilusión de seguir con sus programas, se esfuerzan por acercarse, por invitar, a los grandes pájaros de la cadena que les ha comido. ¡Ah! Es una atracción muy comprensible: instinto de supervivencia evidentísimo.Pablo Motos(El hormiguero, Cuatro), por ejemplo, acaba de protagonizar una sesión de acoplamiento conAna Rosa Quintanamuy ilustrativa. Comenzó acariciándole la manita, elogiándole la hermosa textura de su piel, y le decía:«¡Tu eres mi mito sexual, Ana Rosa!». Y acabaron dándose un delicado piquito, morrito contra morrito, mientras jugaban alefectoBernouillicon unas pelotitas de pimpón, o sea, aplicando las apasionantes leyes de la termodinámica sobre sí mismos. ¡Ah!Ana Rosa, muy complacida, se dejaba mecer en ese clima de sugestiva y tórrida fisica recreativa, y mientrasPablola iba masajeando, ella contaba, para irse entreteniendo, que se ha comprado un terrenito en Extremadura y que de pronto, contemplandolo, se dijo a sí misma:«¡Aquí faltan unas vaquitas!». Y ¡patapam!, los Reyes Magos ya le han traído vaquitas, muy delicadas por cierto, porque según nos informó:«Las ves caminar y son muy finas»; y no solo eso, sino que«No se tiran pedos nunca». ¡Ahhh! Qué sesión,Pablo Motos, ¡qué yacusi! Es curioso, no pareceEl hormigueroun programa que esté en la cuerda floja, ni pendiente de ser retirado de la parrilla. Su éxito es sobresaliente. Quizá incluso podría ser traspasado al área de programas infantiles de Tele 5. De modo que esta jabonosa sesión, esa inmersión en planEl tarro de Esenciales Ana Rosa, le ha salido aPablosin necesidad personal alguna, o sea que lo suyo tiene un mérito que nos deja admirados, maravillados, pasmados, sí.

JON SIGUE OTRO CAMINO .-Distinto es el caso del periodistaJon Sistiaga: el otro día emitió Cuatro su últimoREC, un trabajo impecable, como en él es habitual, tituladoRicos gracias al porno. ¡Ah! Es la primera vez que vemos que la tele se acerca al porno no como excusa para emitir pornografía sino para retratar lo cutre que puede llegar a ser ese mundo. Y claro, esa manera de mirar no es la que gusta a T-5.Jonse ha despedido. Ha preferido no acoplarse. Por fortuna, le podremos ver en C+.