tú y yo somos tres

Superagente en alta mar

Ferran Monegal

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VuelveXavier Sardàa sacar la cabecita por la tele. Esta vez le han puesto un programa que se llamaInfiltrado(T-5). Por lo visto, serán aventuras variadas que él irá protagonizando. La primera ha sido a bordo de la fragataNavarra, buque destinado en la zona de Yibuti, en aguas del Índico, y con la misión de proteger a la flota pesquera española. O sea, nos vino a la mente enseguida el caso del secuestro delAlakrana. Pero la aventurita del superagente (y digo superagente porque la careta de entrada del programa está inspirada en la serie de aquel divertido cataplasma llamadoMaxwell Smart, elSuperagente 86), la aventura deSardàen la fragata, les decía, no ha sido un retrato de una zona peligrosísima, de conflicto con piratas, sino el suvenir, la postal, la foto familiar de los tripulantes de la fragata. Cómo viven, cómo pasan su tiempo en alta mar, sus ratos de ocio, incluso con sorpresa al estilo de aquellas que dabaIsabel Gemio (Sorpresa, sorpresa), pasándoles vídeos de la familia, de la novia, de los hijos que están en tierra y hace meses que no los ven. O sea, que no hacía falta ir al Índico: con embarcarse en alguna golondrina del puerto de Barcelona, o alguna tranquila patrullera de la bahía de Cádiz, se habrían conseguido idénticos resultados. No quiero decir con eso que haya sido una mal aventurita la deSardà. Ha sido insignificante, eso sí. Pero a veces divertida, como ese momento en que habían de arreglar la antena del buque porque no sintonizaba bien Tele 5 –también es mala pata, ¡precisamente Tele 5!– y no hubo manera de queSardàsubiese al mástil. Ni por la escalera. Le decía el sargentoCándido, un ferrolano con mucha retranca y cachondeo:«Venga hombre, suba, suba. Esta escalera está especialmente diseñada para gente mayor». ¡Ahhh! En casa nos partíamos de risa. Hombre, bien mirado, los programadores de Tele 5 ya debían suponer que la aventura era honesta, pero flojita: pusieron el estreno delsuperagenteSardàa la 1.45 de la madrugada. Un horario de tocado y hundido.

CAROD Y LA ESPAÑA ROTA.–De pasta de boniato se quedóCristina Puig(59 segons, La 2) cuandoCarod-Rovira, hablando de la sentencia del TC, aseguró:«España aceptaría con más naturalidad una Catalunya independiente que una España plural»; y viendo queCristinaflipaba,Carodrecalcó:«España antes aceptaría romperse que modificarse». ¡Ahhh! Antes muerta que sencilla.