Google despedirá a 12.000 empleados

La empresa matriz de Google, Alphabet, ha anunciado este viernes que despedirá a unos 12.000 empleados, lo que supone un recorte del 6% de su plantilla global, según ha avanzado 'Bloomberg'.

El consejero delegado del gigante estadounidense, Sundar Pichai, ha mandado un correo electrónico a sus trabajadores asegurando que asume "toda la responsabilidad por las decisiones que nos han llevado hasta aquí". Alphabet llevaba desde el año 2017 ampliando su plantilla a un ritmo del 20% anual.

El potente negocio de Google en el mercado de las búsquedas, que domina con una cuota cercana al 90% mundial, ha permitido que la compañía haya podido evitar durante algunos meses los despidos. Sin embargo, los medios estadounidenses apuntan a que ahora ha optado por el recorte de su plantilla a causa de la ralentización de la publicidad digital, un mercado mermado por la inflación y las malas previsiones económicas para este 2023.

"Estos son momentos importantes para afinar nuestro enfoque, rediseñar nuestra base de costes y dirigir nuestro talento y capital a nuestras más altas prioridades", ha explicado Pichai. Google busca así priorizar negocios como la computación en la nube, donde sus servicios están por detrás de Amazon o Microsoft, o la Inteligencia Artificial, mercado en el que rivales como Microsoft están ganando peso.

Crisis del sector

Google es la última compañía en sumarse a una ola de despidos que está golpeando a toda la industria tecnológica. Sin ir más lejos, este miércoles fue Microsoft quien anunció el cese de 10.000 empleados en todo el mundo. Amazon ha retomado esta semana el despido de 18.000 trabajadores, mientras que Meta –propietaria de Facebook, Instagram y WhatsApp– anunció a mediados del año pasado el despido de 11.000 empleados y el Twitter de Elon Musk ha hecho lo mismo con otras 6.000 personas.

En octubre, Google presentó unos resultados que no cumplieron con las previsiones de los analistas. La compañía registró beneficios por valor de 13.900 millones de dólares, lo que suponía un 27% menos en comparación con el año anterior. Entonces optaron por congelar las contrataciones. Tres meses después, la creciente presión de los inversores para recortar el gasto, limitar las pérdidas de divisiones específicas y aumentar los márgenes de beneficio han llevado a Google a optar por una vía más drástica.