Ataque a la privacidad

Casi 50.000 usuarios de Facebook habrían sido espiados por firmas privadas

El gigante social informa que ha bloqueado hasta 1.500 cuentas falsas que estaban operando en más de 100 países

La compañía ha denunciado a media docena de empresas privadas de vigilancia por piratería informática u otros abusos

Una persona interactuando con la aplicación de Facebook

Una persona interactuando con la aplicación de Facebook / Shutterstock

Carles Planas Bou

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Meta, la empresa propietaria de Facebook, Instagram y Whatsapp, ha denunciado a media docena de empresas privadas de vigilancia que habrían espiado a casi 50.000 usuarios de sus plataformas. En un informe publicado el jueves, el gigante de las redes sociales ha acusado a esas firmas de haber orquestado campañas de piratería informática y extracción ilegal de datos.

Es por ello que Meta ha bloqueados unas 1.500 cuentas, la gran mayoría de ellas falsas, que estas firmas de vigilancia habrían usado para rastrear a usuarios de más de 100 países. Entre las víctimas había políticos, periodistas, celebridades, ciudadanos normales y también amigos y familiares de esos objetivos.

Aunque la compañía no ha dado detalles específicos sobre cómo ha llegado a detectar la actividad de esas empresas, es habitual que presente informes en los que explica la actividad ilícita que se da en sus plataformas, también campañas coordinadas de desinformación y manipulación política, y cómo responde a ello.

Cerco a NSO, usada contra independentistas

Entre las firmas denunciadas por el imperio social que lidera el controvertido Mark Zuckerberg figuran NSO Group, empresa israelí que está detrás del famoso programa de espionaje Pegasus. Esta herramienta es usada en países de todo el mundo para vigilar y perseguir a políticos rivales, a activistas disidentes y a periodistas críticos, como pasó con el reportero saudí Jamal Khashoggi, ejecutado presuntamente por órdenes de Riad. Diversas investigaciones internacionales han destapado que esa tecnología se ha usado en países como Arabia Saudí, México, Ruanda y también en España, donde sirvió para pinchar los teléfonos de líderes independentistas catalanes como el entonces 'president' del Parlament, Roger Torrent, o la exdiputada de la CUP, Anna Gabriel, entre otros.

Meta ya ha demandado a NSO Group ante los tribunales estadounidenses, donde crece la presión política contra la firma israelí después que se revelase que su software también había sido usado para espiar a diplomáticos de Estados Unidos en Uganda. La administración de Joe Biden ya incluyó a esa empresa en su lista negra tras conocerse su impacto en la sociedad civil.

La industria del ciberespionaje

Sin embargo, y como explicó el responsable de la política de seguridad de Meta a Reuters, Nathaniel Gleicher, "la industria de la vigilancia por encargo es mucho más amplia que una sola empresa". Así, la empresa matriz de Facebook también ha denunciado a otras firmas. Entre ellas, la también israelí Black Cube, famosa porque sus espías trabajaron a favor del infame Harvey Weinstein, productor de Hollywood acusado de hasta 11 delitos sexuales, incluida la violación. El objetivo de las cuentas desplegadas por Black Cube era recolectar datos, como correos electrónicos, para después lanzar ciberataques como 'phishing'. La empresa ha negado llevar a capo "ningún tipo de suplantación de identidad ni de piratería informática".

Otras empresas señaladas por Meta son la israelí Bluehawk CI, la europea Cytrox y la firma india de cibermercenarios BellTroX, todas por presunta piratería informática. Otras dos, Cognyte, y Cobwebs Technologies han sido acusadas de crear perfiles falsos para engañar a los usuarios para que expongan datos privados.

Aunque la red social ha rechazado identificar las víctimas de esos ataques, una investigación del centro de vigilancia en la red Citizen Lab ha señalado que uno de los objetivos habría sido el opositor egipcio Ayman Nour, que explicó a Reuters que ya sospechaba que estaba siendo vigilado y que culpó al gobierno egipcio de ello.