El apagón provoca una parada automática en las tres centrales nucleares de Catalunya

Con el apagón generalizado que ha vivido este lunes gran parte de la península Ibérica se han registrado paradas automáticas de seguridad en las tres centrales nucleares, todas situadas en la demarcación de Tarragona: las dos de Ascó (Ribera d’Ebre) y la de Vandellòs II (Baix Camp). Según han informado desde la Asociación Nuclear Ascó - Vandellós II (ANAV), las plantas han producido lo que se conoce como una parada segura. Aunque se trata de una situación “excepcional”, aseguran que “no es técnicamente compleja” y mandan un mensaje de tranquilidad a la población por el buen funcionamiento de los sistemas de seguridad.

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Por ahora, y tras varias horas sin suministro eléctrico, los tres reactores nucleares de Catalunya permanecen parados por la reacción automática de seguridad, pero esto no significa un apagón completo, ya que las centrales continúan funcionando debido a los generadores de gasolina, que se han activado cuando ha faltado la alimentación eléctrica externa. De este modo se garantiza, apuntan desde ANAV a EL PERIÓDICO, la correcta refrigeración de los reactores y minimiza el riesgo de accidente nuclear.

¿Qué es una parada segura?

Cuando la planta nuclear detecta que, por falta de suministro eléctrico, no puede echar la energía producida a la red eléctrica, se activa un proceso automático, la parada segura. Esta consiste en la detención de la producción de energía y el uso de la electricidad producida por los generadores externos para refrigerar el reactor. El reactor se encuentra a altas temperaturas que se deben disipar continuamente, o de lo contrario se podría producir una explosión.

En las tres centrales nucleares de Catalunya, en las dos de Ascó y la de Vandellòs II, esta situación de parada segura se ha producido de manera inmediata con la interrupción del suministro eléctrico. Esto ha sido así gracias a los dos generadores diésel con los que cuenta cada estación, que alimentan los equipos de seguridad mientras no vuelva la normalidad.

“Los reactores pueden aguantar así lo que haga falta”

Desde ANAV afirman que se han activado todos los protocolos humanos de seguridad necesarios para garantizar la fiabilidad de las centrales. Todos los trabajadores de las tres plantas, en especial de los sectores de operaciones y de mantenimiento, están realizando labores extraordinarias por el apagón eléctrico. Los despachos de las instalaciones de Vandellòs se han quedado temporalmente sin luz, que ha podido ser recuperada gracias a la propia alimentación.

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Precisamente las centrales cuentan con equipos externos para generar electricidad y mantener activos, así, los sistemas de seguridad. Otra fuente de energía es el cable especial que conecta las plantas con el pantano de Riba-roja d’Ebre, y del que se podría producir electricidad en caso de ser necesario. Estas alternativas, reforzadas con más equipos móviles tras el accidente de Fukushima en 2011, tienen garantizada la continuidad: “Mientras tengamos gasolina diésel y agua en Riba-roja, la parada segura puede durar lo que haga falta”, aseguran fuentes de ANAV.

Estas mismas fuentes apuntan que las centrales se mantienen “a la expectativa” para recuperar la normalidad cuando Red Eléctrica, responsable del suministro en todo el estado, devuelva el servicio. En ese momento se desactivará la parada segura y se recobrará la producción de energía habitual, aunque desde ANAV no se atreven a decir cuándo podrá producirse. La recuperación será instantánea, aunque la normalidad en todos los complejos puede tardar más en llegar.

No sería la primera vez que una central nuclear se ve obligada a realizar una parada segura, ya que hace una década, un episodio de viento y mala meteorología afectó la subestación de Red Eléctrica en Vandellòs, lo que produjo dicha detención. A pesar de esto, ANAV asegura que se trata de una situación “excepcional” pero mandan un mensaje de tranquilidad: “Las plantas están diseñadas para afrontar circunstancias como estas, no es técnicamente compleja”.