Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

Timo con 'Hal Cash'

Vuelve la estafa con la reventa de entradas: esto es lo que te puede ocurrir

Los delincuentes pueden incluso enviar un DNI falso para que la víctima se confíe

Barcelona luchará contra la reventa ilegal de entradas de conciertos y pide combatirla en Europa

Estafas con la reventa de entradas de Bad Bunny: cuidado con estas páginas web

Entradas para un concierto.

Entradas para un concierto. / Shutterstock

Mariona Carol Roc

Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La reventa de entradas vuelve a ser un plato suculento para los estafadores. Si antes el principal riesgo era adquirir una entrada falsa o duplicada, ahora los delincuentes han encontrado una nueva forma de engañar a sus víctimas: pedir el pago mediante un código que permite retirar dinero en efectivo desde un cajero automático, sin necesidad de tarjeta.

El método se basa en el uso del servicio 'Hal Cash', una herramienta legítima que permite enviar dinero a otra persona para que lo retire en efectivo desde un cajero. Sin embargo, los timadores la utilizan como vía para obtener el dinero directamente y desaparecer sin dejar rastro.

Así funciona el timo del “código para sacar dinero”

Los casos detectados comparten un mismo patrón: el supuesto vendedor contacta con la víctima a través de redes sociales o responde a publicaciones donde los usuarios buscan entradas agotadas para conciertos o eventos.

Una vez establecido el contacto, el estafador envía una foto de su supuesto DNI para generar confianza y solicita el pago mediante un código Hal Cash. A su vez, rechaza métodos más seguros como PayPal o Bizum, alegando motivos personales o técnicos.

Tras recibir el dinero, el timador bloquea a la víctima y desaparece, dejando a los compradores sin entradas y sin posibilidad de recuperar el importe.

Testimonios de las víctimas

Algunos usuarios han relatado experiencias de este tipo al intentar comprar entradas para conciertos a través de anuncios o mensajes en redes sociales.

En varios casos, las personas interesadas acordaron un pago, a menudo mediante sistemas de envío de dinero por cajero pero, tras realizarlo, el supuesto vendedor dejó de responder y eliminó su perfil.

En otras ocasiones, los estafadores contactaron por mensaje directo y, tras aparentar una venta legítima, se hicieron con el dinero sin llegar a entregar las entradas prometidas.

Conciertos de Bad Bunny

Algo parecido ha sucedido con las entradas de Bad Bunny, el cantante puertorriqueño que ha desatado la locura con sus conciertos en España y ya ha vendido más de 600.000 entradas para su gira 'Debí tirar más fotos'.

Cuando salieron a la venta las entradas, algunos fans se lanzaron a comprar muchas más de las que necesitaba, pensando ya en la reventa y las ganancias que esta les podía generar.

Instantáneamente, Ticketmaster se convirtió en el centro de la polémica, al alzarse como uno de los pocos canales oficiales para revender las entradas.

Conceptos ficticios

El problema es que los usuarios que revendían sus entradas en esta plataforma añadían conceptos ficticios o extraños para poder inflar el precio de los tickets muy por encima de su valor, con conceptos tan ambiguos y absurdos como "donación" o unos "gastos de gestión" de más de 30 euros o un cargo “VIP” de 150 euros, lo que hace que, entradas que inicialmente costaban 79,50 euros, alcanzaran finalmente hasta 269,30 euros.

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha denunciado a la plataforma por el cobro “irregular y abusivo” de estas entradas.

Según la OCU, durante la preventa muchos usuarios se encontraron con estos cargos adicionales no reembolsables.

Por todo ello, la OCU advierte acerca de los riesgos de comprar entradas en páginas de reventa como Stubhub o Viagogo, que acumulan numerosas quejas por prácticas abusivas, como cobros excesivos, venta de entradas falsas o duplicadas y dificultades para reclamar devoluciones.

Gastos ocultos hasta el final

La organización critica que, en ocasiones, estos gastos se oculten hasta el último momento y que no puedan recuperarse en caso de cancelación o cambio, algo que vulnera los derechos del consumidor.

Estas irregularidades, sumadas al fenómeno de la reventa masiva, han generado un gran malestar entre los seguidores del artista y reavivado el debate sobre la transparencia en la venta de entradas online.

Debido a esta situación, se ha informado a la gente que se ha quedado sin entradas que vaya con mucho cuidado antes de comprar una entrada de reventa, ya que los estafadores aprovechan para crear páginas web fraudulentas, así como perfiles falsos en las redes sociales

El uso del DNI como herramienta de engaño

Una práctica habitual en este tipo de fraudes es el envío de fotografías de un supuesto documento de identidad. Según expertos, esta técnica busca reforzar la confianza del comprador o incluso suplantar identidades reales de terceros.

Los especialistas advierten de que nunca se debe compartir ni aceptar fotografías de DNI en transacciones online, ya que podrían ser utilizadas para cometer nuevos delitos o estafas a otras personas.

Consejos para evitar caer en la trampa

El Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe) recomienda seguir una serie de precauciones para evitar ser víctima de este tipo de fraudes:

  • Comprar siempre en puntos de venta oficiales o plataformas reconocidas.
  • Desconfiar de vendedores que solo se comuniquen por mensajería instantánea y rechacen llamadas o videollamadas.
  • Evitar métodos de pago que no permitan reclamaciones, como Hal Cash, transferencias directas o códigos de cajero.
  • Utilizar servicios con protección al comprador, como PayPal.
  • Verificar la identidad del vendedor y buscar opiniones o valoraciones previas.

Denunciar y alertar a otros usuarios

Aunque la legislación española no regula de forma específica la reventa digital, las víctimas pueden y deben denunciar la estafa ante las autoridades. Si algún usuario se ve afectado de dichas estafas, puede recurrir a la web del INCIBE y reportar su fraude.