Los Mossos detienen a cuatro grafiteros del metro por las firmas que dejaron en las pintadas

Para un artista firmar siempre es esencial. Da reconocimiento y prestigio pero también puede ser una forma de que te identifiquen cuando cometes un delito, por mucho que lo camufles de arte urbano. Gracias a la firma de varios grafitis los Mossos d'Esquadra consiguieron localizar y detener el pasado 17 de junio a cuatro grafiteros, de entre 21 y 24 años, que están acusados de 44 delitos de daños en trenes de Renfe, Ferrocarrils de la Generalitat y Metro de Barcelona.

Los Mossos remarcan que estas firmas en las pintadas, conocidas como ‘tags’, es un elemento muy usado entre los grafiteros por el prestigio para los autores, ya que es una forma de identificarlos. Los detenidos eran reincidentes, ya que entre los cuatro suman una veintena de antecedentes. El valor económico de los daños ocasionados en infraestructuras ferroviarias con estos actos vandálicos asciende a unos 200.000 euros. 

Los sospechosos presuntamente cometieron los delitos entre febrero de 2024 y mayo de 2025 en Sabadell, Terrassa, el Vendrell, Castelldefels, Rubí, Martorell, Castellbisbal, Granollers, Sant Adrià de Besòs, el Prat de Llobregat, Ripoll, l’Hospitalet de Llobregat, Vilanova i la Geltrú y Barcelona.

Además de los delitos de daños, están acusados de amenazar con una navaja a un vigilante de seguridad de la estación Parc del Nord de Sabadell cuando los sorprendió. También se les considera sospechosos de cometer desórdenes públicos al accionar el freno de emergencia en algún tren para hacer una pintada. 

Ocurrió cerca de Martorell, donde los investigados, con esta acción calculada detuvieron el convoy en una zona entre estaciones, donde no hay personal de seguridad ni cámaras de videovigilancia, para organizarse rápidamente de forma que mientras uno hacía el grafito, otro se encargaba de grabar la acción y controlar el entorno. A consecuencia de estas acciones se alteró el servicio de Rodalies, ya que circularon menos trenes de los previstos.

Los Mossos señalan que en los últimos meses han reforzado la presencia uniformada en las estaciones, además de incrementar el grupo de análisis de incidentes ferroviarios de interés policial, que permite dar una mejor respuesta a la investigación. En este sentido, dos operaciones conjuntas el año pasado de Mossos con Policía Nacional y Guardia Urbana permitieron detener a más de una treintena de grafiteros acusados de más de 350 actos vandálicos con daños valorados, aproximadamente, en dos millones de euros.

Está claro que la vanidad del artista puede hacer que te hagan pagar grandes cantidades de dinero por dañar infraestructuras cuando tu obra seguramente jamás tendrá tanto valor económico.