Mossos y Guardia Civil

Operación contra una red de narcotraficantes que introducían hachís en Catalunya con lanchas

Hay registros en poblaciones como Rubí, Cerdanyola, Canovelles, Terrassa, Cabrils, Sant Adrià de Besòs, Sant Boi, Sant Feliu de Llobregat y Barcelona y se han practicado cinco detenciones

Operación contra una red de narcotraficantes que introducían hachís en Catalunya con lanchas

Operación contra una red de narcotraficantes que introducían hachís en Catalunya con lanchas. / VÍDEO: MOSSOS D'ESQUADRA

Guillem Sánchez

Guillem Sánchez

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Los Mossos d'Esquadra y la Guardia Civil han activado en la madrugada de este martes un operativo contra una organización criminal que introduce hachís procedente Marruecos en territorio catalán. Los investigadores están registrando domicilios de diversas poblaciones de la corona metropolitana. Constan entradas policiales en Rubí, Cerdanyola, Canovelles, Terrassa, Cabrils, Sant Adrià, Sant Boi, Sant Feliu de Llobregat y Barcelona. La intervención se ha dado por finalizada al mediodía, con la detención de cinco personas.

Entre los puntos en los que han entrado los agentes por orden judicial se encuentran lugares en los que la organización guardaba las lanchas semirrígidas que usaban para transportar el hachís desde las aguas internacionales frente a la costa catalana. La banda no vendía el hachís a consumidores españoles, lo que hacía era introducirlo en suelo europeo a través de la costa catalana y, desde aquí, lo transportaba por la vía terrestre al resto del continente, donde lo comercializaba.

Esta organización, según las fuentes policiales consultadas por EL PERIÓDICO, traía el hachís directamente desde Marruecos hasta la costa catalana en lanchas como las que se han intervenido.

El litoral catalán, tal como advierten los cuerpos policiales, se ha convertido en una puerta de entrada que usan redes delincuenciales como la desarticulada este martes para vender hachís marroquí a países europeos. Las mafias aprovechan la cercanía de Catalunya con Francia. El aviso más claro de este nuevo fenómeno, además del constatado nuevamente con la presente operación, se tuvo el pasado 5 de febrero, cuando los Mossos sorprendieron –gracias al aviso de testigos– a una banda extranjera descargando más de 5 toneladas de hachís en el puerto de Mataró. Más de quince personas fueron arrestadas en una operación que dio pie a una investigación, bautizada como 'Pekín', que sigue abierta y que no guarda relación con la de este martes, a pesar de que uno de los registros también se ha llevado a cabo en la sede de una empresa del puerto marítimo de la capital del Maresme.

En 2022, los cuerpos policiales ya arrestaron a tres pescadores de Tarragona que habían comenzado a trabajar para la mafia del hachís y desmantelaron una red de armadores náuticos de Girona que fabricaban narcolanchas por encargo. El 'boom' de la marihuana sigue siendo la principal amenaza, para Catalunya y para todo el arco mediterráneo de la península Ibérica, pero cada vez preocupa más el crecimiento de grupos que trafican con hachís.

A diferencia de lo que sucede con la marihuana –que las mafias cultivan en suelo catalán para después exportarla al resto de Europa donde multiplica exponencialmente su valor–, el hachís no se produce en Catalunya. Las organizaciones usan solo las playas las provincias de Girona, Barcelona y, sobre todo, Tarragona, para introducir la mercancía africana en suelo europeo. El Delta del Ebro y sus alrededores, por ejemplo, ofrecen una extensión de muchos kilómetros de playa despoblada ideal para los traficantes de hachís, como históricamente ha sucedido en el Campo de Gibraltar, al sur de la península.

Fase predatoria

Las autoridades advierten de que las organizaciones criminales de tráfico de hachís, como hacen desde 2015 otras mafias dedicadas al cultivo y exportación de la marihuana, ya han comenzado a activar también su fase "parasitaria". Esta fase, según los analistas de la policía catalana, consiste en corromper a ciudadanos normales para que trabajen para ellos.

Tal como como ocurrió con los pescadores de Tarragona. O con los armadores de Empuriabrava (Girona) detenidos en otoño de 2022, que habían comenzado a trabajar para narcos construyendo las narcolanchas por encargo. En esa operación conjunta de Mossos y Guardia Civil en colaboración con la Agencia Tributaria, se detuvo a 19 personas y había por lo menos dos propietarios de negocios de alquiler o reparación de embarcaciones implicados y también un mecánico, que era quien armaba las semirrígidas.

Acuerdo con Ports de la Generalitat

La semana pasada, la Generalitat firmó un protocolo operativo de los Mossos con Ports de la Generalitat --el organismo encargado de gestionar los puertos deportivos y pesqueros catalanes-- encaminado a mejorar la comunicación entre el cuerpo policial y los guardamuelles sitos en las infraestructuras marítimas. Es decir, la Conselleria de Interior y Ports se comprometen a trabajar conjuntamente para garantizar la seguridad y la protección de unas instalaciones, los puertos, cuya seguridad es clave para prevenir, entre otras actividades ilegales, el tráfico de drogas.