Tribunales

24 meses de prisión para un internauta de Barcelona que filtró datos de la víctima de La Manada

Las acusaciones y la fiscalía, tras un pacto con la defensa, han rebajado la petición inicial de pena de cárcel

La jueza suspende el ingreso en prisión del imputado, al que se le aplica la atenuante de drogadicción

Juicio en el Juzgado Penal 1 de Barcelona a un hombre que ha reconocido que difundió datos e imágenes de la víctima de 'La Manada' en un foro. El 16 de noviembre de 2022.

Juicio en el Juzgado Penal 1 de Barcelona a un hombre que ha reconocido que difundió datos e imágenes de la víctima de 'La Manada' en un foro. El 16 de noviembre de 2022. / EUROPA PRESS

J. G. Albalat

J. G. Albalat

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Tras un acuerdo entre la fiscalía, las acusaciones y las defensas, Éric C. T. G. admitió este lunes en un juicio celebrado en Barcelona que había difundido en un foro de internet datos personales y fotografías de la víctima de La Manada de Pamplona con el fin de "burlarse" de ella y crearle "inquietud moral". El reconocimiento de las imputaciones ha comportado que la fiscalía y las acusaciones modificaran sus calificaciones provisionales y rebajaran la pena de dos años y medio de cárcel a 24 meses (tres por el delito contra la integridad moral y 21 por revelación de secretos), más el pago de una multa de 1.320 euros y una indemnización de 20.000 euros. La jueza dictó sentencia condenatoria 'in voce' (oralmente) y suspendió, a petición de la defensa y el aval de las acusaciones, el ingreso en prisión, siempre que no delinca durante los tres próximos años y abone la indemnización.

El debate jurídico en la vista -que quedará pendiente para resolver en sentencia- se centró en la posible responsabilidad subsidiaria del foro donde se publicaron los mensajes. Dos acusaciones sostienen que los datos estuvieron a la vista varios días y que el gestor de la plataforma de internet donde se difundieron, con 111.000 seguidores, debería haber controlado su contenido. La defensa de esta web ha argumentado que los contenidos están borrados.

En la rebaja de su petición de pena, la fiscalía incluyó la agravante de género, pero solicitó la aplicación de dilaciones indebidas durante la tramitación de la causa y drogadicción. El acusado, residente en el barrio barcelonés de Horta-Guinardó, publicó las imágenes y los datos de la víctima de la violación en grupo ocurrida en los Sanfermines del 2016 en una página web. En tres "posts" de internet, Éric C. T. G. colgó reseñas de la joven agredida y fotos que habían sido ya publicadas por terceras personas en otros foros de la red, procedentes de distintas redes sociales, de la propia víctima o de sus amistades.

Entre los datos difundidos figuraba una copia del DNI, el nombre y apellidos de la mujer, su formación académica y la zona donde residía, así como varias fotografías, algunas de esta joven y otras de uno de los momentos de la violación que sufrió en el interior de un edificio de la capital navarra. Según las acusaciones, las imágenes difundidas sobre la agresión de los Sanfermines han sido obtenidas "por una persona desconocida" de la grabación que los miembros de La Manada hicieron con sus móviles mientras abusaban la agredían sexualmente y, por lo tanto, "sin conocimiento ni autorización" de la víctima.

"Yo no fui el primero"

Éric C. T. G., que fue identificado por la Policía Nacional, alegó en su declaración ante el juez instructor que se había limitado a tomar pantallazos de datos e imágenes de la víctima que circulaban por internet y que los utilizó en mayo del 2017 para replicar, en un chat de dimensiones menores, a un internauta. El imputado, exmilitar, de profesión mecánico y que entonces vivía con sus padres, explicó en su día a este diario: "En las imágenes se puede ver, incluso, la página de internet de la que hice la captura. Yo no fui el primero. Solo copié y pegué". El acusado admitió, eso sí, que no dispone de wifi en su casa, por lo que utilizó el de una vecina. Un informe policial en poder del juzgado detalla que las imágenes colgadas por esta persona provienen de "fuentes abiertas".

La difusión de información de la violación de los Sanfermines derivó de un fallo de seguridad en la divulgación de la sentencia de La Manada a los medios de comunicación en abril del 2018, dado que, aunque tenía los datos de la víctima borrados, incluía en los márgenes un código de seguridad que permitía acceder al original completo en la página web del Gobierno Foral. Aunque dicho código fue posteriormente desactivado, datos personales de la joven madrileña acabaron circulando por las redes sociales. Esta información llegó a ser publicada en la versión en castellano de una página web neonazi y supremacista de Estados Unidos.

Suscríbete para seguir leyendo