Investigación de los Mossos

Huéspedes del hotel Acta Atrium de Barcelona: "Los gritos del secuestrado eran de dolor"

VIDEO | Así han registrado los Mossos el hotel en busca de los secuestradores

Los Mossos d'Esquadra registran una habitación de hotel contigua a la del secuestrado en Barcelona

Los Mossos d'Esquadra registran una habitación de hotel contigua a la del secuestrado en Barcelona. /

Guillem Sánchez

Guillem Sánchez

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Cuando faltaban pocos minutos para las nueve de la noche, Genesis Barragan y su marido Emanuel, una pareja de Texas que se alojaban en el Acta Atrium del Eixample de Barcelona para disfrutar del Primavera Sound, charlaban con sus amigos, hospedados en el mismo hotel, porque había llegado la hora de ir al festival. Pero comenzaron a oír gritos "de dolor" de un hombre que aseguraba a viva voz que estaba secuestrado y que necesitaba una ambulancia. Genesis entiende español pero no daba crédito a lo que oía.

A los pocos minutos, aquellos gritos de desesperación del hombre que decía que había sido secuestrado, dieron paso a portazos y pisadas estresadas de los Mossos d'Esquadra que acababan de llegar al Acta Atrium, alertados por el propio hotel.

Cuatro patrullas de los Mossos, dos de proximidad y dos de seguridad ciudadana, fueron las primeros en responder al auxilio lanzado por el hotel. Los ocho agentes entraron en el edificio, ubicado en la céntrica Gran Via de Les Corts Catalanes, y se toparon en uno de los pasillos con uno de los secuestradores armados. Pudieron reducirlo. Y poco después, hallaron al hombre que habían secuestrado amordazado en una de las habitaciones. Según les constaba a los agentes, faltaban otros dos secuestradores, que podían seguir en el hotel, escondidos en alguna de las habitaciones, quizá.

Llegaron el resto de refuerzos y los antidisturbios de la Brigada Mòbil (Brimo) para tomar el control del hotel. Comenzar un registro exhaustivo, habitación por habitación. Las órdenes que dieron a voces los policías es que todo el mundo debía quedarse en sus cámaras. El problema era que para Génesis y su marido aquellas órdenes llegaban muy lejanas y se confundían con los gritos de socorro del secuestrado. Como ciudadanos de Estados Unidos, creyeron que podían estar viviendo una masacre como las que han sido noticia en su país recientemente.

"Situación delicada"

La operación policial que hubo que desplegar en el interior del hotel fue "muy compleja", insisten fuentes policiales. Para los clientes –más si son extranjeros que no reconocen fácilmente los uniformes policiales– resulta difícil discernir entre policías o posibles asaltantes cuando perciben a un hombre armado, prosiguen. Y, en cambio, para los policías, cualquier cliente "puede ser el secuestrador que está buscando". Lo cual dispara los nervios y el miedo.

"Hemos pasado mucho pánico", decía con la voz quebrada Génesis a la salida del hotel. "Nuestros amigos nos han dicho por whatsapp que teníamos que quedarnos encerrados, que pasarían por nuestra habitación los policías para comprobar si estaba todo bien", recordaba sobre las 23.00 horas, cuando la pesadilla ya había finalizado.

Por más nervios que tuviera el matrimonio Barragán mientras aguardaba a que entraran los policías, también tuvo los arrestos de sacar el teléfono móvil y grabar la irrupción de los agentes. Esta, según se ve en las imágenes que han cedido a EL PERIÓDICO, sucede a punta de pistola porque los policías desconocen si en la habitación de Génesis y Emanuel –o en cualquier otra– pueden encontrarse cara a cara con alguno de los dos secuestradores, posiblemente armados, que están buscando.

Cuando se dan cuenta que tampoco hay ningún secuestrador en esa cámara, los Mossos reconocen a Génesis y Emanuel como clientes y les piden que se queden en un rincón mientras registran la habitación y que esperen encerrados. El permiso para salir a la calle ha llegado una hora después.

La investigación abierta

Los Mossos, tras registrar todo el hotel, desmontaron el operativo y dejaron el caso en manos de la Unitat de Segrestos i Extorsions de la Divisió de Investigació Criminal. Ellos serán quienes a partir de ahora traten de aclarar por qué secuestraron a este hombre –que no ha resultado herido– y dónde han ido los dos que faltan en la ecuación. Si finalmente se confirma que son solo dos los escapados, algo que tampoco está claro.

Este viernes por la mañana, mientras los clientes trataban de recuperar la calma, los Mossos repasaban las grabaciones de las cámaras de seguridad en busca de la confirmación de que solo entraron tres secuestradores en el hotel. Según los tiempos de las imágenes, el secuestro comenzó poco después y duro también un breve periodo de tiempo. En cuanto el hotel supo que uno de sus clientes podía estar siendo retenido en contra de su voluntad, llamaron a los Mossos.

La investigación no solo debe tratar de encontrar a los dos fugados, también debe aclarar por qué amordazaron a la víctima. A lo largo de este viernes, se ha tomado declaración tanto al hombre liberado como al secuestrador capturado por las patrullas, un individuo de 32 años, que pasará a disposición judicial en las próximas horas.

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