Arrestado de nuevo el 'estafador del amor' por arruinar a una mujer discapacitada de Barcelona

Los Mossos d'Esquadra arrestaron el pasado 20 de mayo al estafador Albert Cavallé. Otra vez. Apodado como el 'estafador del amor' había aparecido recientemente por 'El Programa de Ana Rosa' o por medios escritos como 'La Vanguardia' para limpiar su reputación: "Yo no soy así... He reconducido las conductas que tenía con las chicas a nivel emocional", sostuvo. Una estrategia que, además, reforzó con una contradenuncia presentada contra tres de sus víctimas y el abogado que las defendía. Lo que han descubierto los agentes de la Unitat de Investigació del distrito de Nou Barris, a cargo de las pesquisas que lo han situado de nuevo en el punto de mira judicial, dista mucho de lo que contaba ahí públicamente Cavallé. Según estos investigadores, el estafador ha seguido estafando.

Su última víctima es una mujer de Barcelona que padece esclerosis múltiple y tiene un certificado de discapacidad parcial, una fragilidad que Cavallé aprovechó para "manipularla" a su antojo, remarcan fuentes policiales consultadas por EL PERIÓDICO. Estas fuentes aseveran que los investigadores han hecho un esfuerzo por entregar al juzgado de instrucción un atestado que refleje el grado de "vulnerabilidad" de la mujer y la "dependencia emocional" que había logrado imponerle. Un modus operandi que, a juicio de los policías, agrava lo acontecido hasta la fecha. En realidad, aclaran, de no ser por una amiga de la víctima, la denuncia que ha motivado su última detención posiblemente no habría llegado a producirse. Fue ella quien le advirtió de que Cavallé, su novio, era un estafador y que estaba haciendo con ella lo mismo que había hecho con otras antes. "Las noticias pasan y hay muchas personas que todavía no saben quién es", remarcan las mismas fuentes, añadiendo que se trata de un tema, el de los estafadores sentimentales como Cavallé o como Francisco Gómez Manzanares, que no causa la alarma social que debiera con el auge de las aplicaciones de citas, un lugar idóneo para sus propósitos.

70.000 euros

Para seducir a esta víctima, Cavallé usó la misma estrategia que siempre: contactarla a través de una de estas aplicaciones. Entabló una relación que para ella era de verdad pero que para él era solo una manera de espoliarla. Le ha llegado a sacar más de 70.000 euros, "todos sus ahorros", para desbloquear una herencia familiar o para costearse un tratamiento médico. Necesitaba dinero para lo primero porque debía afrontar impuestos y los honorarios de un abogado y, para lo segundo, porque estaba enfermo y la cura no era barata. Ambas cosas eran mentiras. La mujer además llegó a comprarle una motocicleta de gran cilindrada que Cavallé necesitaba para "trabajar" –está sin empleo–. Tal era la dependencia emocional de la víctima que después de ser arrestado por los Mossos y de que esa motocicleta fuera retenida en un depósito judicial, Cavallé logró que la mujer acudiera con él al garaje para convencer al funcionario de que debía liberarla porque estaba a nombre de ella. Esto último no es menor para los investigadores, que añaden que Cavallé supo también por ella que había sido denunciado y la "manipuló" para que accediera a dejarse grabar en un vídeo en el que la 'pareja' se muestra acaramelada. Un vídeo que Cavallé envió a los investigadores para tratar de impedir un arresto que se produjo finalmente el 20 de mayo.

Durante la relación, Cavallé también se llevó del domicilio de la víctima su ordenador portátil del trabajo. Empleada de una empresa que maneja datos confidenciales, aquella sustracción colocó a la mujer en una situación muy difícil con su compañía. A los Mossos, además, les consta que mientras estaba con ella, Cavallé también 'salía' con otras. Una de ellas, de Sant Adrià de Besòs, también ha presentado una denuncia contra él. "Y tiene otros frentes abiertos", remarcan.

Más de veinte víctimas

Cavallé acumula tres sentencias condenatorias firmes, confirmadas por el Tribunal Supremo, dos de Barcelona, que suman un año y medio de prisión, y una tercera, de Pamplona, que añade tres meses de cárcel para Cavallé. Según el letrado que lleva a 14 de sus víctimas –el mismo que también ha sido denunciado por Cavallé–, siguen abiertos 9 procesos contra él. Hay otras denuncias. La policía catalana, en el caso de esta última víctima, a quien Cavallé se había referido públicamente como su novia en las apariciones recientes en medios de comunicación para limpiar su reputación, le imputa los delitos de estafa, falsedad documental, usurpación de estado civil, hurto y hurto de uso de vehículo. La pelota judicial se ha reactivado contra Cavallé, que quedó en libertad tras pasar a disposicion del juez.

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