Destinado a usos presidenciales

Demolido el helipuerto del club de Donald Trump en Florida

Palm Beach no permite el vuelo de helicópteros pero el expresidente obtuvo un permiso por su cargo

El Casino Trump Plaza de Atlantic City también ha sido reducido a escombros este miércoles

Outgoing US President Donald Trump waves as he boards Marine One at the White House in Washington  DC  on January 20  2021  - President Trump travels his Mar-a-Lago golf club residence in Palm Beach  Florida  and will not attend the inauguration for President-elect Joe Biden  (Photo by MANDEL NGAN   AFP)

Outgoing US President Donald Trump waves as he boards Marine One at the White House in Washington DC on January 20 2021 - President Trump travels his Mar-a-Lago golf club residence in Palm Beach Florida and will not attend the inauguration for President-elect Joe Biden (Photo by MANDEL NGAN AFP) / Mandel Ngan / Afp

Agencias

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El helipuerto construido en 2017 en Mar-a-lago, el club privado del sur de Florida donde reside el expresidente Donald Trump desde que dejó la Casa Blanca, ha sido demolido cumpliendo con una orden municipal, según informan medios locales.

A pesar de que el municipio de Palm Beach, donde se encontraba este helipuerto, no permite el vuelo de helicópteros en la zona, Trump obtuvo un permiso temporal en 2017 que hacía un excepción con el fin de facilitar los traslados del por aquel entonces presidente y permitía la utilización del helipuerto solo para usos relacionados con su cargo.

La excepción era válida durante el tiempo en que el republicano se mantuviera en la Casa Blanca, que podría haber sido hasta enero de 2025 si hubiera ganado la reelección de noviembre. Sin embargo, fue Joe Biden quien salió vencedor en las urnas y quien asumió el puesto el día 20 del pasado mes de enero. Ahora, una orden judicial ha tirado hacia adelante la demolición del helipuerto, que contaba con un plataforma de cemento reforzado de 15 metros de largo y que distaba a casi 100 metros de las edificaciones de Mar-a-lago, tal y como declaró en 2017 el arquitecto al mando del proyecto, Rick González.

La demolición de esta plataforma ha costado unos 15.000 dólares, según informaciones de medios de la zona como el 'Palm Beach Daily News', que entrevistó a comienzos de febrero a Kirk Blouin, el administrador de la ciudad. Blouin también declaró ante el mismo medio que Trump no solicitó mantener el helipuerto después de haberse instalado en Mar-a-Lago como residencia permanente.

Quejas en el vecindario

La instalación de forma permanente de Trump en el club privado Mar-a-lago, que el expresidente adquirió en los años 80, ha sido objeto de la polémica entre el vecindario. Muchos vecinos admiten que no lo quieren en la ciudad e incluso alegan que no puede residir allí ya que, supuestamente, viola los acuerdos con lo que Trump llegó al municipio para que le permitieran convertir la mansión en su propio club privado.

El Consejo Municipal de Palm Beach trató en una audiencia pública si el exmandatario tiene derecho a residir en su club, pero la decisión sobre este particular no se tomará hasta el próximo abril. 

En esta audiencia, que solo tenía propósitos informativos, expusieron sus opiniones John 'Skip' Randolph, abogado de la ciudad y John Marion, en representación de Donald Trump. Ambos defendieron que el derecho del expresidente a vivir en "la suite del propietario" de su propio club.

En la oposición, Reginal Stambaugh y Philip Johnston, quienes representaban a la comunidad de vecinos de Mar-A-Lago tenían como objetivo "preservar la calidad de vida" de esta ciudad mayormente avisada de gente adinerada y conocida. También declaró en esta audiencia pública un ciudadano de apellido 'Taylor' que habría pidió la palabra en la audiencia y declaró que el municipio se "había convertido en la Oficina del 45 presidente de EEUU" y que eso generaba preocupación en la ciudad.

Trump, que acaba de ser absuelto en su segundo juicio político en el Congreso, esta vez por la toma del Capitolio por sus partidarios, está manteniendo un bajo perfil en el sur de Florida.

El casino de Atlantic City, reducido a escombros

El Casino Trump Plaza, cobijo de famosos durante años y que se erigía en la ciudad de Atlantic City, en Nueva Jersey, ha sido reducido este miércoles a escombros en una explosión controlada que fue seguida por los aplausos de las personas que se concentraron en esta ciudad de juego de la costa este de Estados Unidos.

El casino que Trump levantó en Atlantic City reducido a escombros

El casino que Trump levantó en Atlantic City, reducido a escombros. /

En apenas veinte segundos, se desmoronó la torre que un día el empresario y expresidente Donald Trump erigió como la joya de la corona de su imperio hotelero y por el que durante varias décadas pasaron músicos, actores y famosos.

"Todo el mundo, desde Hulk Hogan hasta Mick Jagger y Keith Richard, toda la gama de personalidades" pasó por este hotel, ha apuntado el director de eventos del casino desde su inauguración en 1984 hasta 1991, Bernie Dillon, citado por varios medios locales.

El jefe de bomberos de la ciudad, Scott Evans, ha explicado que se colocaron cargas explosivas en lugares estratégicos de la estructura que lo sustentaba, para que el peso lo hiciera caer sobre su base de manera vertical, con una pequeña desviación hacia el noreste.

Sin embargo, el deslumbrante casino por el que también pasaron Madonna, Sean Penn, Barbra Streisand, Don Johnson o Muhammad Ali, entre otros muchos, no pertenecía al presidente desde el año 2016, cuando fue adquirido por el millonario Carl Icahn, junto a otro casino que el expresidente todavía mantenía en esta urbe costera.

Ante el éxito del Trump Plaza (cerrado en 2014), el empresario se lanzó a la construcción en 1990 del Trump Taj Mahal y dejó un poco de lado su primer y exitoso proyecto, según ha comentado al canal Abc6 el presidente de la principal sindicato de casinos, Bob McDevitt.

Pero las deudas y la mala gestión de ambos, sumado a la sobresaturación de casinos en la ciudad, obligaron al magnate a venderlos. El Taj Mahal, adquirido también por Icahn, continúa operando pero bajo una nueva marca: Hard Rock.