CRONOGRAMA DEL

INFORME PISA

EN CATALUNYA

Recortes, pandemia, segregación
y baile de leyes en 15 años:
la tormenta perfecta que
arroja unos pésimos resultados

CRONOGRAMA DEL

INFORME
PISA

EN CATALUNYA

Recortes, pandemia,
segregación y baile
de leyes en 15 años:
la tormenta perfecta
que arroja unos
pésimos resultados

Por Alex R. Fischer (infografías)
y Núria Marrón (textos)

Los pésimos resultados que en Catalunya han arrojado las últimas pruebas PISA han encendido las luces de 'warning'. ¿Qué ha pasado exactamente para que los alumnos catalanes hayan perdido más de un curso en matemáticas en una década y dos en lectura y comprensión lectora?

Más allá del debate sobre los métodos de aprendizaje y qué se debe hacer en adelante, los datos apuntan a que la educación catalana ha atravesado una tormenta perfecta que ha arreciado en la última década y que finalmente ha explotado ahora con crudeza y detonador. El baile de leyes -cuatro, más la LEC catalana, en 20 años- que no ha hecho más que crear confusión en las aulas; los recortes en educación a partir de 2012; la crisis económica y las altas tasas de pobreza infantil; los flujos migratorios y el incremento de la segregación escolar, y la estocada final de los confinamientos y la pandemia han puesto en jaque el sistema educativo y han marcado a una promoción de alumnos que algunos expertos ya han empezado a llamar la "generación de las crisis".

La siguiente radiografía consta de dos cronogramas: el primero compara los resultados de PISA con la aprobación de las diferentes leyes educativas, la situación económica y la inversión educativa. En el segundo, las 'notas' de PISA dialogan con la complejidad socioeconómica: el aumento de los flujos migratorios, la alta tasa de riesgo de pobreza infantil y la segregación escolar. Veamos.

PRIMER CRONOGRAMA:

Leyes educativas, recortes y PISA

Es cierto que cada Gobierno ha aprobado su ley educativa. Ninguna de ellas ha encontrado el reposo para desarrollarse y, en cambio, su concatenación sí ha provocado mucha confusión y vaivenes en los currículums académicos. Además, a partir de 2012 los centros catalanes se enfrentaron a los recortes que aplicó el Govern de Artur Mas y que en el sistema público se llevaron por delante la sexta hora lectiva. Un total de 174 horas menos por curso. El equivalente a 35 días.

En 2003, Catalunya se situaba en matemáticas y lengua por encima de la media española (y más de un curso por delante que hoy). La inversión catalana dibujaba una línea en ascenso.

Tras la crisis económica de 2008, la política de austeridad de Artur Mas derivó en fuertes recortes educativos: la inversión llegó a descender casi un 22% y se llevó por delante la sexta hora, el equivalente a 35 días lectivos por curso.

En 2013 se aprueba la ley Wert, muy contestada en la calle, y la inversión sigue en caída libre. Sin embargo, los resultados de PISA de 2015 aún aguantan el chaparrón.

Las consecuencias de los recortes estallan con detonador en las pruebas de 2018, cuando se pierde medio curso en matemáticas y uno entero en lengua.

En 2020, en plena cuesta abajo, se declara la pandemia, que lastra los aprendizajes. En 2020 se aprueba la Lomloe. Finalmente, la media española de PISA 2022 aguanta mejor que la de Catalunya, donde los resultados se desploman, también a rebufo de la segregación y la complejidad social.

En 2003, Catalunya se situaba en matemáticas y lengua por encima de la media española (y más de un curso por delante que hoy). La inversión catalana dibujaba una línea en ascenso.

Tras la crisis de 2008, la política de austeridad de Artur Mas derivó en fuertes recortes educativos: la inversión llegó a descender casi un 22% y se llevó por delante la sexta hora, el equivalente a 35 días lectivos por curso.

Las consecuencias de los recortes estallan con detonador en las pruebas de 2018, cuando se pierde medio curso en matemáticas y uno entero en lengua.

En 2020, en plena cuesta abajo, se declara la pandemia y los confinamientos lastran aún más los aprendizajes. En 2020 se aprueba la Lomloe. La media española de PISA 2022 aguanta mejor que la de Catalunya, donde los resultados se desploman, también a rebufo de la segregación y la complejidad social.

EN ADELANTE, las próximas PISA de 2025 servirán de barómetro para calibrar en qué medida las recetas activadas por el Govern, el aumento de la inversión educativa (también insuflada por los fondos europeos) y el desarrollo de la Lomloe, que prima el aprendizaje por competencias, revierten en una mejora educativa.

EN ADELANTE, las próximas PISA de 2025 servirán de barómetro para calibrar en qué medida las recetas activadas por el Govern, el aumento de la inversión educativa (también insuflada por los fondos europeos) y el desarrollo de la Lomloe, que prima el aprendizaje por competencias, revierten en una mejora educativa.

SEGUNDO CRONOGRAMA:

Pobreza infantil, segregación escolar y pruebas PISA

A principios de los años 2000, la realidad de las aulas era muy diferente a la actual: la tasa migrataoria apenas alcanzaba el 3% y la crisis económica estaba aún lejos.

La diversidad por origen aumenta durante la primera década de los 2000 sin efectos de consideración en las pruebas de la OCDE.

En 2008 se declara la crisis económica, que estalla en las aulas con una curva ascendente del flujo migratorio y un incremento de la pobreza infantil. En este crudo contexto, llegan los recortes.

Sin políticas que reviertan la situación, a lo largo de la década aumenta la segregación del alumnado vulnerable en centros de alta complejidad.

A partir de 2015, la desinversión y la complejidad socioeconómica confluyen en una caída en picado de los resultados de PISA que se acentúa con la pandemia, con mayores efectos sobre el alumnado vulnerable.

TRAS LA TORMENTA POLÍTICA que se desató cuando el Departament d'Educació relacionó los resultados de PISA con la migración, la consellera Anna Simó ha atribuido el fiasco a la década de recortes, la pobreza infantil y la segregación escolar. Habrá que ver el impacto real del programa antisegregación de la conselleria. De momento, el Govern no tiene previsto ningún plan de choque contra la pobreza de los menores.

TRAS LA TORMENTA POLÍTICA que se desató cuando el Departament d'Educació relacionó los resultados de PISA con la migración, la consellera Anna Simó ha atribuido el fiasco a la década de recortes, la pobreza infantil y la segregación escolar. Habrá que ver el impacto real del programa antisegregación de la conselleria. De momento, el Govern no tiene previsto ningún plan de choque contra la pobreza de los menores.

Un reportaje de EL PERIÓDICO

Textos: Núria Marrón
Infografías: Alex R. Fischer
Coordinación: Rafa Julve