Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

Datos de Drets Socials

El 80% de familias con derecho a ayudas de crianza en Catalunya no acceden a ellas: "Pierdes la esperanza"

Las entidades sociales reclaman que las prestaciones sociales se equiparen al modelo de pensiones de los mayores

Más grave, más años y más joven: así ha evolucionado la pobreza en España

¿Quién es vulnerable y quién no?: estos son los criterios que importan con la pobreza

Montse Vilarrasa, Juan Fernández y Leyre Simarro, tres personas que han sufrido las dificultades al pedir prestaciones sociales.

Montse Vilarrasa, Juan Fernández y Leyre Simarro, tres personas que han sufrido las dificultades al pedir prestaciones sociales. / Elisenda Pons / EPC

Elisenda Colell

Elisenda Colell

Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El 80% de familias catalanas con derecho a ayudas de crianza no las están percibiendo. Una realidad que también afecta al 18% de catalanes con derecho a la Renta Garantizada de Ciudadanía (RGC), o al 66% que entraría dentro de los criterios para percibir el Ingreso Mínimo Vital. Los datos los ha facilitado la consellera de Drets Socials, Mónica Martínez Bravo, en un acto de la Taula del Tercer Sector en la vigilia del día internacional contra la pobreza. "No sabes si es que eres idiota o qué pero te quedas en un limbo que llega un momento que pierdes la esperanza, es todo delirante", ha explicado Juan Fernández, un hombre de 67 años atendido por la Cruz Roja que ha estado tres años intentando, sin éxito, percibir la RGC.

Fernández percibía ayudas sociales hasta que en 2017 encontró un trabajo en un bar. Pero todo se volvió a truncar durante la pandemia. "Ya sabéis lo que pasó con la hostelería durante el covid", ha recordado. Allí pidió la RGC. "Entre el lenguaje farragoso, las citas previas, que lo tienes que enviar todo telemáticamente o que no te responden durante meses", recuerda Fernández. Él tuvo el agravante que hasta 2021 estuvo combatiendo un cáncer. "Yo estaba haciendo la quimio sin ningún tipo de ayuda económica", ha explicado. "Al final contraté a un gestor que lo resolvió". Como le faltaban dos días cotizados para acceder a la jubilación, terminó cobrando una pensión no contributiva, igual que su madre, con quien vive. En aquella casa no se superan los 700 euros al mes, entre los dos. "Con este dinero, en Barcelona, ¿cómo quieres que dejemos de ser pobres?", pregunta indignado.

Barcelona 18/10/2025 Personas perceptoras de prestaciones sociales en el dia internaiconal de la pobresa (17O) en la foto Juan Fernández Fuentes, Montse Vilarrasa Montclús ( americana roja), Leire Simarro Arias Foto ELISENDA PONS

Montse Vilarrasa, Juan Fernández y Leyre Simarro, tres personas que han sufrido las dificultades al pedir prestaciones sociales. / Elisenda Pons / EPC

El de Fernández no ha sido el único caso que han expuesto desde las entidades sociales. "Una persona con discapacidad intelectual se puede encontrar muchas trabas para haber trámites: dificultad de entender las instrucciones, trámites en línea poco accesibles, necesidad de certificados digitales, claves de identificación, citas previas que requieren una gestión digital... Falta mucho apoyo, hay demasiado paternalismo, prejuicios y poca empatía", ha descrito Montse Vilarrasa, una mujer de 45 años con síndrome de down y miembro de la asamblea de derechos humanos Montserrat Trueta de la Fundación Catalana Síndrome de Down.

La deuda por trabajar

La consellera, que ha hecho públicos los datos del 'non take up', esta bolsa de gente a quien las ayudas sociales no llegan, se ha comprometido a ponerse manos a la obra. "Es una pérdida de recursos para Catalunya que podremos cambiar cuando asumamos la gestión del Ingreso Mínimo Vital, que es inminente", ha asegurado Martínez Bravo.

Pero la consellera ha ido más allá, y ha expuesto que los problemas de acceso a las prestaciones sociales no están solo en el trámite farragoso para pedirlos. "Hay gente que teme la incompatibilidad del trabajo y de los pagos indebidos, eso genera un agravio a estas personas para tener que devolver ayudas con las que no contaban", ha dicho Martínez Bravo. Es decir, que como los empleos no son compatibles con las ayudas sociales, mucha gente debe retornar grandes cantidades de dinero años después y prefiere no pedir las ayudas.

Esto es precisamente lo que le ocurrió, hace tan solo cuatro meses, a Leyre Simarro, una joven extutelada que percibe la prestación mensual de 700 euros una vez cumplió los 18 años. Ella se encontró con una carta del Govern que le obligaba a devolver mucho dinero, y aportar información y documentación para evitarlo en menos de 10 días. "Nos pusimos todos muy nerviosos, hubo mucha angustia. No entendíamos nada, se lo pedimos al chatGPT, fuimos a ver a nuestros educadores que tampoco sabían nada", ha recordado. Ellos se organizaron y lograron que la 'consellera' aceptara condonarles esta deuda. "Nosotros necesitamos apoyo, acompañamiento, más ratios de profesionales quien podamos acudir", ha pedido la joven.

Y es que en caso de las ayudas a los jóvenes extutelados, un 80% de los que tienen derecho a ella no la percibe, segun los datos de la Síndica de Greuges. "Mucha gente no sabe ya no cómo hacerlo, sino que no sabe ni que existe. Yo tuve apoyo de mis referentes pero hay mucha gente que no lo tiene. Y luego hay gente que prefiere trabajar porque no quiere tener problemas cuando se encuentra que tiene que devolver este dinero", ha comentado Simarro. Hay que tener en cuenta que esta ayuda puede tardar un año en tramitarse, y mientras, hay jóvenes que trabajan, y que luego deben devolver el dinero de la prestación.

Ayudas universales

"Los datos son elevadísimos, debemos caminar hacia la universalidad, especialmente en el caso de la pobreza infantil", ha señalado el presidente de la Taula del Tercer Sector, Xavier Trabado. En Catalunya, el 35% de los menores de 18 años vive bajo el umbral de la pobreza, uno de los peores indicadores en toda Europa. Trabado ha comparado estas ayudas con las pensiones de jubilación. "Son un caso de éxito en toda Europa contra la pobreza en los mayores. Debemos dotarnos de mecanismos parecidos que nos permitan que las prestaciones lleguen a las personas que lo necesitan porque los datos están disparadísimos", ha añadido el presidente de la Taula.

Suscríbete para seguir leyendo