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Salud

La microbiota juega un papel clave en la capacidad de atención de las personas con obesidad

Un estudio médico vincula un nivel elevado de determinadas bacterias con una peor capacidad de concentración en pacientes con exceso de peso

Dolores de la Puerta, especialista en microbiota: "La salud mental está íntimamente relacionada con nuestro intestino"

La microbiota está formada por las bacterias, hongos y otros microorganismos que pueblan nuestro intestino.

La microbiota está formada por las bacterias, hongos y otros microorganismos que pueblan nuestro intestino. / Getty Images

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Girona
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Un estudio liderado por el Instituto de Investigación Biomédica de Girona Josep Trueta (IDIBGI) y publicado en la revista científica 'Gut' ha descubierto la relación entre la microbiota intestinal y la capacidad de atención en personas con obesidad.

Las bacterias, hongos o virus que viven en el cuerpo humano han pasado de ser considerados los malos de la película a convertirse en una de las grandes esperanzas de la medicina, porque podrían estar relacionados con el 95% de las patologías. De hecho, los gastroenterólogos denominan a la microbiota el ‘nuevo órgano’. Nunca hasta ahora se había investigado su conexión con la capacidad de atención de las personas con obesidad.

El doctor Jordi Mayneris-Perxachs, jefe del grupo de investigación en Medicina y Biología Integrativa de Sistemas del IDIBGI y uno de los investigadores que ha liderado el estudio, considera que "más allá de mirar qué microorganismos hay, es muy importante analizar qué hacen: su material genético y las sustancias que producen o modulan en el organismo”. La actividad microbiana, afirma, tiene una enorme capacidad de influir en la salud y los procesos del cuerpo humano.

La obesidad empeora la atención

En esta investigación, el equipo se ha centrado en identificar qué componentes específicos de la microbiota intestinal se asocian con una mayor o menor capacidad de atención. Para ello, se analizaron muestras de heces y de sangre de más de mil personas. Los resultados reflejaron que los pacientes con obesidad y menor capacidad de atención presentaban una microbiota con más proteobacterias (un determinado tipo de bacterias) y alteraciones en el metabolismo del triptófano, un aminoácido esencial para la salud que se obtiene a través de la dieta.

El hallazgo llevó a profundizar en el papel del metabolismo del triptófano. Los investigadores comprobaron que niveles más altos de un compuesto derivado, llamado 3-HAA, se asociaban a una mejor atención mientras que otros mostraban el efecto contrario.

El equipo investigador, en colaboración con la Universitat Pompeu Fabra, realizó pruebas con animales. Al trasplantar microbiota de personas a ratones se observó que los recibían microbiota de donantes con mejor atención mostraban señales compatibles con una mejor flexibilidad cognitiva y capacidad de atención. Además, se vio que tanto una dieta rica en grasas como la eliminación de la microbiota con antibióticos reducían los niveles de 3-HAA en los ratones. En cambio, cuando se transfería la microbiota de personas con alta atención, estos niveles aumentaban notablemente. De hecho, al analizar más de 600 compuestos diferentes en el cerebro de los ratones, el 3-HAA fue uno de los que aumentó más claramente en respuesta a este trasplante.

Papel clave de la microbiota

En otro modelo, la mosca de la fruta, que consume una dieta rica en azúcar que induce a obesidad y la presencia de una especie concreta de proteobacteria perjudicaron comportamientos relacionados con la atención, mientras que la suplementación con 3-HAA los mejoró. “Las moscas de la fruta son un modelo muy valioso porque tienen un sistema nervioso sencillo pero lo bastante complejo para estudiar funciones cognitivas que tienen paralelismos con las de los seres humanos”, explica Anna Castells, investigadora del IDIBGI. "Por eso, los resultados obtenidos en moscas pueden ofrecer pistas sobre lo que ocurre en nuestro cerebro y ayudar a validar hipótesis", añade. Estas pruebas constatan el papel clave que juega la microbiota a la hora de producir el 3-HAA, el cual protege la capacidad de atención, especialmente en personas con obesidad.