SOCORRISMO

Cada año fallecen entre 400 y 600 personas por ahogamiento en España: "Es una amenaza de salud pública"

La falta de supervisión durante las horas de sobremesa es una de las principales causas de ahogamiento en niños pequeños, advierte la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias

Dos personas mueren con una hora de diferencia en las playas del área de Barcelona

Socorrista en una playa en Baleares

Socorrista en una playa en Baleares / Germán Lama/Europa Press (archivo)

Nieves Salinas

Nieves Salinas

Madrid
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En España, el ahogamiento representa "una amenaza de salud pública" que se traduce anualmente en entre 400 y 600 fallecimientos. Por cada víctima mortal, se estima que entre 3 y 5 personas más necesitan atención sanitaria urgente por incidentes relacionados con el medio acuático, "lo que eleva el impacto asistencial a entre 1.200 y 3.000 personas cada año. Además, las 3.551 playas, 75.000 km de cauces fluviales y 1,2 millones de piscinas registradas en el país, aumentan la exposición "al riesgo, latente e invisibilizado durante casi todo el año". Un riesgo que "explota con la llegada del verano, durante el cual se concentran casi el 75% de los ahogamientos".

Así se expone en un artículo de divulgación científica, titulado 'Ahogamiento a gritos y otras atrocidades', que ha publicado el Grupo de Trabajo SEMES-Socorrismo, perteneciente a la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES), en la Revista Española de Urgencias y Emergencias (REUE). El objetivo de este trabajo, explica la sociedad, es concienciar a la población y a las administraciones públicas sobre "la existencia de mitos peligrosos que pueden agravar ciertas situaciones, y la urgencia de implementar medidas de prevención eficaces".

En menos de dos minutos

Pese a la imagen que se tiene, el ahogamiento "no es un suceso ruidoso ni visible", apunta SEMES. "Seguimos esperando que alguien grite socorro cuando se ahoga. Pero es un proceso rápido, silencioso y difícil de detectar, que en la mayoría de los casos transcurre en menos de dos minutos. Lo mismo que tardas en contestar una llamada, cepillarte los dientes o ver un par de 'post' en redes sociales", señala Roberto Barcala, coordinador del grupo.

"Si ignoramos esto, contribuimos a retrasos críticos en el rescate y la activación de los servicios de emergencia", añade Barcala. En 2021, la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 25 de julio como Día Mundial de la Prevención del Ahogamiento, con el respaldo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), bajo el lema 'Cualquiera puede ahogarse, a nadie debería sucederle'. Esta resolución reconoce al ahogamiento como "una epidemia silenciosa con un importante coste humano, social y sanitario", subraya la sociedad científica.

Factores de riesgo

Los expertos en socorrismo citan una serie de factores de riesgo para esos sucesos que tantas vidas cuestan: el primero, la falta de supervisión directa en menores, especialmente durante las horas de sobremesa (15:00 a 18:00). Es una de las principales causas de ahogamiento en niños pequeños, indican. Exponen conductas como el uso de móviles mientras se vigila a los niños, baños con bandera roja, consumo de alcohol, saltos desde alturas, y alquiler de embarcaciones sin formación adecuada. También, la falsa sensación de seguridad proporcionada por flotadores, manguitos o la creencia errónea de que 'todo el mundo sabe nadar'".

Los expertos aconsejan barreras físicas en piscinas para limitar el acceso no supervisado y aprendizaje de habilidades básicas de natación desde niños

En ese punto, recomiendan vigilancia directa de los menores de 6 años; barreras físicas en piscinas para limitar el acceso no supervisado y aprendizaje de habilidades básicas de natación desde una edad temprana. También, formación y entrenamiento en seguridad acuática desde la etapa escolar.

Emergencia silenciosa

Asimismo, aconsejan un protocolo de rescate seguro por parte de personas sin experiencia: lanzar algo que flote sobre lo que puedan agarrarse quienes están en apuros; alcanzar a la víctima con alguna extensión (por ejemplo, un palo, pértiga o rama) y no entrar en el agua si no se tiene esa experiencia. La regulación del uso de embarcaciones recreativas; los planes de gestión de riesgo en inundaciones y la enseñanza universal de maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP), son otros de los consejos que ofrece el grupo SEMES.

Archivo - Piscina de Las Fuentezuelas/Archivo

Piscina de Las Fuentezuelas / AYUNTAMIENTO DE JAÉN/Archivo

Ante una emergencia "tan rápida y silenciosa" como el ahogamiento, la especialidad de Enfermería en Urgencias y Emergencias es fundamental. "Las enfermeras no solo actuamos en primera línea durante la atención extrahospitalaria o en servicios de urgencias", añade Roberto Barcala, "también somos claves en formación, prevención y educación sanitaria. Nuestra preparación específica permite reducir tiempos de respuesta, mejorar la atención inicial y, en muchos casos, marcar la diferencia entre la vida y la muerte".

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