Medio ambiente

Los ecologistas convocan una nueva manifestación contra la ampliación del aeropuerto en Barcelona

La plataforma Zeroport ve las compensaciones anunciadas como una "distracción" y reclama a la Comisión Europea que no acepte la afectación a las lagunas protegidas

El anillo verde de la ampliación del aeropuerto esquivará un plan de 5.000 viviendas en el Baix Llobregat

Una manifestación contra la ampliación del aeropuerto, en marzo de 2023.

Una manifestación contra la ampliación del aeropuerto, en marzo de 2023. / JORDI OTIX

Guillem Costa

Guillem Costa

Barcelona
Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La plataforma Zeroport, que engloba a varias entidades y que nació como oposición a los planes para ampliar el aeropuerto de Barcelona, ha anunciado una nueva concentración contra la propuesta del Govern para alargar la tercera pista del aeródromo. Después de que el colectivo Ni Un Pam de Terra convocara una marcha para el próximo sábado, día 14 de junio, en El Prat de Llobregat, Zeroport organizará una protesta el día 28 en la plaza Sant Jaume de Barcelona.

"Confiamos en ser mucha gente para exponer un primer rechazo al proyecto de Salvador Illa", afirma Clàudia Custodio, portavoz de la asociación. En Zeroport, consideran que alargar la pista del mar no tiene sentido y califican las compensaciones ambientales planteadas por el Govern como "una distracción". Custodio admite que no tienen confianza en que Europa bloquee el proyecto, pero reclama a la comisión impedir la afectación a los espacios naturales de la Ricarda y el Remolar, hábitats de interés comunitario.

Los ecologistas advierten del mal estado del delta del Llobregat y alertan de que si se ponen en peligro sus ecosistemas puede desaparecer todo el espacio natural: "La Ricarda es de las pocas lagunas naturales que quedan y, por sus características, son irreproducibles e incomponibles".

La plataforma critica que la propuesta se presente como "inevitable" y la ve "más dañina" que la que se dibujó en 2019, pese a que el president, Salvador Illa, ha repetido que el actual plan es mucho más sostenible en materia ambiental, por la creación de un fondo verde y por las compensaciones anunciadas, que consistirán en la creación de nuevas áreas inundables.

Los activistas de Zeroport, durante la rueda de prensa de este jueves.

Los activistas de Zeroport, durante la rueda de prensa de este jueves. / ALBERT HERNÁNDEZ

Custodio reprocha que el proyecto, aunque se ha presentado como un documento más dialogado y técnico, no resuelve ninguno de los "problemas de fondo" y denuncia que la Comisión Técnica estuviese formada por cargos políticos "sin la pluralidad de voces necesaria".

Crisis climática

Zeroport, a la hora de enumerar los argumentos para oponerse a la ampliación, no solo pone el foco en los espacios naturales del delta. Destacan que el aeropuerto es una de las infraestructuras que más gases de efecto invernadero emite en Catalunya. "Las emisiones de la aviación se han multiplicado por 2,5 desde 198 y los objetivos climáticos serán inalcanzables si la actividad aeronáutica continúa como hasta la fecha", alertan.

Sobre esta cuestión, el Ejecutivo catalán ha esgrimido que en un futuro los combustibles utilizados serán más sostenibles. Pero los colectivos ambientales opinan que la afirmación es engañosa, porque se trata de una tecnología "muy limitada" que depende de "recursos escasos" y que no permitirá compensar el aumento de vuelos.

Una larga batalla

Zeroport utilizará también como motivo en contra de la ampliación el impacto causado por el sector turístico: "La industria turística tiene efectos como el encarecimiento de la vivienda, la precarización laboral o el sobreconsumo de recursos básicos como el agua y la energía". En un contexto de calentamiento global y emergencia climática, entienden el alargamiento de la pista de El Prat como una amenaza a la salud, la agricultura y la naturaleza en general.

Además, confirman que la movilización en la plaza de Sant Jaume será tan solo una de las acciones que se llevará a cabo. En un comunicado los ecologistas aseguran que será "una batalla larga" pero que lucharán para ganarla. Tienen previsto utilizar otras vías de presión y movilización social para detener un proyecto que catalogan como "nefasto".