Aviso del sector

Detectadas recetas falsas de fármacos psicotrópicos en farmacias de Manresa

Los establecimientos dicen que cada vez es más fácil falsificarlas pero también descubrirlas

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Una farmacéutica comprueba una receta médica.

Una farmacéutica comprueba una receta médica. / Regió 7

Laura Serrat

Manresa
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Farmacéuticos de Manresa alertan de que en los últimos meses ha habido varios intentos de adquirir medicamentos con recetas falsificadas. Aunque señalan que es un problema que siempre ha existido, aseguran que últimamente los episodios han sido más frecuentes para obtener psicotrópicos con fines de consumo propio, reventa o manipulación. De hecho, recientemente los Mossos d'Esquadra alertaron al Colegio de Farmacéuticos tras dos intentos ocurridos en Manresa a principios de abril, que fueron frustrados después de que el personal de la farmacia detectara que se trataba de recetas falsas.

"No es algo nuevo, llevamos años detectando esta situación, pero al estar ubicados en una zona céntrica estamos mucho más expuestos", explica Cristina Singla, farmacéutica de turno en la farmacia Ros de Manresa, situada en el Passeig Pere III. La profesional dice que los intentos de obtener medicación con recetas falsificadas suelen producirse por oleadas y que en la mayoría de los casos se trata de la misma persona que recorre distintas farmacias de la zona solicitando medicamentos que requieren prescripción médica.

"A menudo llevan en el encabezado nombre de clínicas que no son del territorio, que son de comunidades o que directamente no existen"

Cristina Singla, farmacéutica

Normalmente, sin embargo, señala que una receta falsificada es fácilmente detectable. "A menudo llevan en el encabezado el nombre de clínicas que no son del territorio, que pertenecen a otras comunidades o que directamente no existen", destaca la farmacéutica, quien añade que también les alerta la actitud de la persona. "Si es alguien que ha venido muchas veces seguidas a pedir el mismo fármaco, es probable que la receta sea falsa", indica.

En la misma línea, Salvador Buxó, de la farmacia Buxó de Manresa, comenta que suelen ser recetas elaboradas con plantillas prediseñadas y con la firma del médico falsificada. "Hace unos años conocíamos la firma de los médicos de la zona y era fácil identificar si era una copia", comenta Buxó, quien afirma que hoy en día también se pueden detectar con facilidad. "A veces solo hace falta una comprobación básica, porque nos hemos encontrado algún caso en que el nombre del médico no coincidía con su especialidad".

Medicamentos con componente adictivo

Los medicamentos más solicitados con este método suelen ser psicotrópicos, y los farmacéuticos mencionan casos concretos como Trankimazin, Rivotril o Lyrica. "Tienen un efecto potente y un alto riesgo adictivo", alerta Singla, quien explica que a menudo se buscan para autoconsumo, para mezclarlos con otras sustancias o para revenderlos. En este sentido, Buxó añade que, aunque tienen un precio asequible en la farmacia, en el mercado negro pueden alcanzar precios mucho más altos. También destaca que en los últimos meses ha aumentado la falsificación de recetas para obtener Tropicamida, unas gotas para los ojos que son manipuladas para uso intravenoso.

Los farmacéuticos consultados coinciden en destacar que detrás de las recetas falsificadas, a menudo no solo hay un delito, sino también un problema de salud y de adicciones.

Los Mossos recomiendan que ante la sospecha de una receta falsa se realicen las comprobaciones pertinentes y, en caso de duda, se llame al 112.

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