Qué es una oscilación del flujo de potencia de redes, causa del apagón según Red Eléctrica

Red Eléctrica Española ha explicado que el apagón que ha afectado al sistema eléctrico de España y Portugal se ha debido a una oscilación muy fuerte del flujo de potencia de redes, de origen desconocido, que ha provocado la desconexión española del resto del sistema eléctrico europeo.

Una oscilación muy fuerte del flujo de potencia en las redes eléctricas se refiere a variaciones rápidas y significativas en la transmisión de electricidad, lo que puede desestabilizar el sistema.

Las redes eléctricas funcionan bajo un equilibrio delicado entre la oferta (generación) y la demanda (consumo) de energía. Cualquier alteración de este equilibrio puede causar fluctuaciones impredecibles en el flujo de electricidad.

¿Cuales pueden ser las principales causas de estas oscilaciones?

-Fallas en la red: Un apagón o la desconexión de una central eléctrica puede interrumpir repentinamente el flujo de energía.

-Desajustes entre generación y demanda: Cuando la oferta de electricidad no se ajusta adecuadamente a la demanda, ya sea por exceso de generación o escasez, el flujo de electricidad se vuelve inestable.

-Desconexión o mala sincronización de generadores: Si los generadores no están correctamente sincronizados, pueden producirse oscilaciones en la red.

-Condiciones externas: Factores como tormentas eléctricas, fallos en el sistema de transmisión o desconexiones de líneas clave también pueden generar estas oscilaciones.

¿Qué es el cero energético, la principal hipótesis del apagón generalizado?

Cuando se producen estas oscilaciones, pueden provocar fluctuaciones de voltaje o incluso caídas de frecuencia, lo que compromete la estabilidad de la red. Si no se controlan adecuadamente, estas oscilaciones pueden desencadenar apagones generalizados o fallos en equipos esenciales, afectando a amplias zonas.

Para mitigar estos riesgos, las redes eléctricas modernas están equipadas con sistemas de control y protección, como dispositivos de estabilización y controles automáticos de frecuencia, que ayudan a gestionar y reducir el impacto de las oscilaciones.

En resumen, una oscilación muy fuerte en el flujo de potencia es una alteración significativa e incontrolada en la transmisión de electricidad, que puede desestabilizar la red y ser una de las principales causas de apagones si no se resuelve rápidamente.