Iglesia católica

El Papa se mantiene "estable" por tres días consecutivos, tras la crisis respiratoria del lunes

La estabilidad del pontífice, que no presentó fiebre, ha llevado a los médicos a retrasar hasta el próximo sábado el siguiente boletín sobre sus condiciones de salud

Velas y mensajes están expuestos bajo la estatua de Juan Pablo II en la entrada del Hospital Gemelli.

Velas y mensajes están expuestos bajo la estatua de Juan Pablo II en la entrada del Hospital Gemelli. / EFE

EFE

Roma
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Las condiciones del Papa se han mantenido "estables" este jueves, según han informado sus médicos. Francisco, de 88 años y aquejado por una neumonía en los dos pulmones, no ha tenido fiebre ni ha tenido nuevos episodios de insuficiencia respiratoria durante el día, tras las dos crisis que sufrió el pasado lunes. 

Con ello, el Papa "ha continuado con beneficio la fisioterapia respiratoria y motriz". Y también sus "parámetros hemodinámicos y los análisis de sangre se han mantenido estables", han escrito, en el parte del día 21 de la hospitalización del pontífice argentino, difundido —como siempre— por El Vaticano. Se mantiene aún así el pronóstico reservado, han subrayado, al añadir que, dada la situación de estabilidad, no está previsto que el viernes se difunda un boletín sobre las condiciones clínicas de Francisco.  

Evolución normal

Ya en la mañana fuentes vaticanas habían explicado que el Papa argentino, tras pasar una noche "tranquila", había retomado sus terapias, tanto la farmacológica como la motriz. Además de ello, también habían precisado que, como se había sido adelantado el día anterior, el pontífice había usado la mascarilla que cubre boca y nariz (un nivel más alto de asistencia) por la noche, y posteriormente había retomado la oxigenación de altos flujos con el uso de gafas nasales por la mañana. Otra información en línea con una posible evolución positiva de su hospitalización.

En este sentido, las mismas fuentes también habían intentado matizar el actual estado de Francisco, al subrayar que la evolución de su neumonía sería "la común". Aun así, "es prematuro decir que está funcionando la terapia y por eso los médicos insisten en que el pronóstico es reservado", habían agregado. "Hace falta tiempo y hay variaciones de paciente a paciente".  

En este contexto, otras voces —en particular, especialistas consultados por los diarios italianos— han señalado que una de las claves de la hospitalización de Francisco sería ahora su duración. De hecho, cuando más su ingreso se prolongue, más es el riesgo de que el Papa contraiga nuevas infecciones o se debilite por otras enfermedades que le podrían surgir.

Todo ello mientras en la oficina de prensa de la Santa Sede una de las preguntas que se están volviendo más insistentes entre los periodistas, especialmente los anglófonos y francófonos, es si El Vaticano tiene contemplado difundir próximamente una fotografía de Francisco desde el hospital. Es desde mediados de febrero, de hecho, que el Papa no aparece en público.