El Gobierno revisará este año el mapa de zonas inundables: hay 1.464 colegios y 128 hospitales en lugares de riesgo

¿Estamos preparados ante las inundaciones? Esta pregunta que la dana de Valencia puso en el centro del foco mediático es aún difícil de responder. Sin embargo, tras el dramático suceso del pasado octubre, tanto el Gobierno como las autonomías aceleraron sus planes para revisar las políticas de prevención ante la amenaza de posibles riadas. "No sé si estamos preparados o no, pero estamos invirtiendo y trabajando mucho para estarlo", afirma Javier Sánchez, subdirector general de Protección de las Aguas y Gestión de Riesgos del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

Sánchez, que ha participado en una jornada sobre el riesgo de inundación organizada por el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, cuenta que el ministerio revisará este 2025 el mapa de zonas inundables para adaptarlo al nuevo escenario. "Año a año vamos ajustando y mejorando los modelos junto con las diferentes confederaciones hidrográficas y la ACA", asegura el subdirector especializado en la gestión del peligro de inundación. "Disponemos de la cartografía de zonas de alto riesgo, que aún podemos mejorar, pero aspiramos a tener los mapas de peligro de todos los ríos de España", añade.

Según los datos que maneja el ministerio, 600.000 personas viven en zonas de riesgo elevado

A día de hoy, ya hay contratos firmados con una consultoría para elaborar la nueva cartografía de áreas anegables. Además, se estudia incluir nuevos tramos. De cara a 2026, detallan a este diario fuentes del ministerio, se van a reexaminar los Planes de Gestión de Riesgo de Inundación que Europa exige a todas las cuencas. Todas estas acciones están pensadas con el objetivo de que España esté más preparada ante futuros episodios de inundaciones.

Escuelas, residencias y hospitales

Según los datos que maneja el ministerio, actualmente 600.000 personas viven en zonas de riesgo elevado, y 3 millones, en lugares en los que el periodo de retorno de una inundación es de 500 años. El periodo de retorno de una inundación es el tiempo promedio en el que un evento de una determinada magnitud puede ocurrir de nuevo. Se expresa en años y se basa en datos históricos. No significa que sucederá exactamente cada 500 años, sino que alude al periodo en el que podría repetirse. Algunos de los terrenos anegados en Valencia tras la dana no aparecían ni en los mapas de 500 años.

El Gobierno, a través de la Dirección General de Agua, también trabaja para analizar la situación de 1.464 escuelas, 425 residencias, 128 hospitales y 411 depuradoras que se encuentran en perímetros de peligro. "Les avisamos de que tienen un riesgo y buscamos fórmulas para reducir los posibles impactos", precisa Sánchez.

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Sánchez sostiene que las zonas más vulnerables están en el norte, en el País Vasco, sobre todo, y también en el litoral mediterráneo. "La cuenca del Segura ha sido uno de los puntos negros de los últimos años", concreta. Sobre las consecuencias de la dana en Valencia, el Consorcio de Compensación de Seguros (CCS), la entidad pública que actúa como aseguradora en casos especiales como desastres naturales, ya ha pagado más de 1.500 millones de euros en bienes asegurados y se prevé se superarán los 3.000 millones en total. "Este suceso casi acaba con el consorcio, que gestiona un fondo de unos 8.000 millones –una parte de esta cantidad es en propiedades–. En caso de tener dos episodios como este, se quedaría sin dinero", comenta Sánchez.daría sin dinero", comenta Sánchez.

Inversiones catalanas

En los últimos meses, Catalunya también anunció que revisaría las actividades que se realizan en zonas inundables. Además, la ACA (Agència Catalana de l'Aigua) ya ha adjudicado un contrato para ampliar la cartografía de áreas anegables. "También trabajamos en un inventario de cauces públicos y en consolidar el inventario de puntos estructurales singulares como carreteras en puntos de riesgo", dice Sandra Ruiz, jefa del departamento de gestión de riesgos de inundación de la ACA.

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"Se ha avanzado mucho en la gestión del riesgo, pero aún queda mucho camino por recorrer y algunos de los retos pendientes no son solo cómo mitigar los efectos de una riada, sino también tener mapas actualizados e invertir en medidas de protección", constata Ruiz. En paralelo, la Generalitat está pendiente de actualizar también el mapa de cámpings en lugares inundables para tomar decisiones al respecto.

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