Gestión de residuos

La tasa de basura sube más de un 20% y llega a los 170 euros de media en los principales municipios catalanes

La mayoría de localidades aprovechan los cambios de la normativa Europea para "actualizar" este impuesto

NOTICIA | Barcelona y 26 ciudades de su área vuelven a 'suspender' en reciclaje: se sitúan por debajo del objetivo europeo

Contenedores de reciclaje.

Contenedores de reciclaje. / EFE

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La tasa de recogida y tratamiento de la basura subirá más de un 20% en 2025 en más de 100 municipios catalanes si lo comparamos con 2024. De media, las tasas subirán unos 170 euros, según datos de todas las capitales de comarca y las ciudades de más de 20.000 habitantes, obtenidos por la Agència Catalana de Notícies (ACN). Una normativa europea llevó a España a obligar a todos los contribuyentes a cubrir el coste de la gestión de la basura a partir de abril de 2025 y los ayuntamientos están aprovechando los cambios fiscales para andar hacia una "tasa justa", es decir, un impuesto variable en función del nivel de reciclaje de cada uno.

Las casuísticas de cada municipio son muy dispares, puesto que algunos han introducido la tasa por primera vez, como las ciudades metropolitanas de Sant Cugat del Vallès, L'Hospitalet de Llobregat, Sant Boi de Llobregat, Viladecans o Cornellà de Llobregat. Otros lo incorporaron el año pasado y este año lo han congelado, como Badalona.

A la vez, algunos consistorios han hecho subidas moderadas, pero partiendo de recibos ya elevados. Es el caso de Mollet del Vallès, una de las ciudades que lidera el ranking con 261 euros al año (un 4,4% más que en 2024), o de Calafell, donde el coste es de 230 euros (+4,8%), ambas localidades por encima de la media. En algunos ayuntamientos, los crecimientos son más significativos. En Sant Quirze del Vallès, los precios incrementan un 74%, hasta los 182 euros por recibo, mientras que en Puigcerdá el salto es del 72%, hasta los 210 euros.

En varias ciudades, el pago de la tasa no es el mismo para toda la ciudadanía, sino que depende de múltiples factores. Por ejemplo, en Girona, un piso paga de media 237 euros, mientras que una casa llega a los 334, y los precios se deciden, entre otros, en función del valor del catastro. Otros ayuntamientos, como por ejemplo Ripoll, usan otros criterios, como el número de empadronados, así que el precio de la tasa oscila entre los 190 y los 250 euros.

Premiar a los que más reciclan

En Manlleu se premia a los que más reciclan, que pagan unos 200 euros, mientras que quienes no lo hacen tienen que afrontar 363 euros el año. El municipio de Osona está entre los que más tasan el servicio, aproximadamente al mismo nivel que Mollet del Vallès, donde la media es de 261 euros pero también con variaciones por el mismo motivo.

En la Seu d'Urgell hay un tramo fijo de 139 euros, más uno variable según el volumen de reciclaje. El nivel de cumplimiento con la clasificación de la basura por tipo se puede hacer con nuevos sistemas de recogida, como los contenedores inteligentes o el puerta a puerta. Se trata de una modalidad todavía en proceso de implementación en muchos municipios, como por ejemplo en Sant Pere de Ribes, donde solo un 10% de los contribuyentes pueden ver variar la tasa en función de cómo reciclan.

La mayoría de las ciudades consultadas pagan la totalidad de la gestión de los residuos –recogida y tratamiento– en un solo recibo, pero otros, sobre todo las que forman parte del Área Metropolitana de Barcelona (CON), pagan la recogida al consistorio y el tratamiento posterior de manera separada en el recibo del agua. La tarifa tampoco es lineal, sino que tiene en cuenta varios factores, como por ejemplo los ayuntamientos que tienen un nivel más alto de recogida selectiva –que pagan menos–, el consumo de agua de cada hogar, o la cantidad de toneladas de residuos generadas en cada población.

Fuentes del ente metropolitano explican que este "complejo" cálculo provoca que un municipio que recicla mucho pero que genera mucho per cápita pague más que un municipio que recicla menos pero genera menos, como es el caso de Santa Coloma de Gramenet.

Barcelona, una media baja

Barcelona, pagará una tasa municipal de tratamiento y recogida similar a la media del conjunto de poblaciones que forman parte del ente: la mayoría de vecinos tendrán que abonar entre 33 y 62 euros. Esto, sumado a la recogida, deja la capital fuerza por debajo de la media del país, con unos 95 euros de media sumando los dos recibos. Las otras ciudades más pobladas, L'Hospitalet de Llobregat (169 euros), Terrassa (125 euros) o Badalona (154 euros) se sitúan por debajo de la media del centenar de consistorios consultados. Otras capitales no metropolitanas como Lleida (105 euros), Tarragona (168 euros) o Tortosa (150 euros) también marcan valores medios de los tenedores también por debajo.