Amadeo, el protagonista del anuncio de la Lotería de Navidad, se convierte en "el ángel de la guarda de Logroño": "El Gordo es la 'rematadera'"

"Pues que dicen que ha tocado ahí", dice Javi, el taxista. En la administración de Muro del Carmen, 4. "¿En la de siempre otra vez?", duda. Sí, está oficina familiar del centro de la capital riojana ya ha sido agraciada en otras ocasiones.

72.480. El Gordo cae de nuevo en Logroño. Esta vez íntegro, salvo unos décimos que la administración envió dirección Madrid. "Ahí va, Dios, qué cerca otra vez", añade Javi, que recuerda que la de El Niño ya tocó allí. "Al menos nos ha tocado salud, siempre tendremos el consuelo", señala este riojano de pura cepa al que se distinguiría en Siberia por su acento. El número fue cantado a las 11.27 horas en el sexto alambre de la quinta tabla. A las 12.07 horas, Muro del Carmen ya es una fiesta.

Ignacio y Elena, copa de vino en mano, ya con la camiseta que certifica que el primer premio lo han dado ellos, están abrumados. Emocionados, pero también acostumbrados, porque en 2014 ya repartieron una serie del Gordo y hace dos años el mayor premio de El Niño. Pero esta vez es para ellos ha sido especial, porque lo han dado "íntegro, 772 millones", recalca Ignacio con una enorme sonrisa. "Parte se ha repartido en Madrid, al club deportivo Distrito Olímpico y parte en la administración, en ventanilla", señala Ignacio.

El protagonista del anuncio de la Lotería de Navidad, se ha acercado a la administración de Muro del Carmen. Julián, un hombre que ronda los 60 años, se resiste a abandonar su pueblo, podría ser cualquiera de los cientos que hay en el país en peligro de ‘extinción’, lo que conocemos como la España vaciada. Él, que en realidad se llama Amadeo, se ha acercado a la capital de una región azotada por lo que su anuncio denuncia, la desaparición de los territorios olvidados. "Es de Logroño y nos ha traído la suerte. Es nuestro ángel de la guarda", indica una logroñesa que se ha acercado para ver el ambiente.

Que el gran premio haya caído en su ciudad "es la puntilla, es un golazo". "Si ya para mí era importante participar en el anuncio, [que caiga en Logroño] el Gordo de la Lotería es increíble", sostiene con una permanente sonrisa. No le ha tocado a nadie que conozca. A él tampoco, aunque será mañana, como hace cada año, cuando comprobará si tiene algún décimo premiado. "No me toca nunca, y si me tocase ya me llamarían", bromea. El riojano de Villamediana de Iregua cierra una Navidad perfecta para él con esta sorpresa. "Ha sido la rematadera".

A la sombra

No aparecen premiados. Los afortunados están siendo comedidos. "Yo si me tocaría no vendría", avisa una mujer en un perfecto doble condicional riojano. Una hora después de que saliese el Gordo, nadie ha descorchado champán en Muro del Carmen, pero sí se ha abierto alguna botella de Rioja.