El Meteocat emite un aviso por lluvias intensas que "no acabarán" con la sequía estructural

Esta ha sido una semana más bien seca en las cuencas internas de Catalunya, pero se han registrado episodios puntuales y abundantes en la Segarra, el Urgell, el Pla d'Urgell y Les Garrigues, donde cayeron hasta 50 litros por metro cuadrado en menos de media hora. De cara a este fin de semana, tarde de este viernes incluida, el Servei Meteorològic de Catalunya ha emitido un aviso por situación de tiempo peligroso.

En concreto, desde la tarde del viernes hasta la del sábado, se pueden acumular más de 30 litros por metro cuadrado en menos de 20 minutos. Se trata de episodios de lluvia concentrada y muy localizada que pueden afectar a un pueblo y no a los de los alrededores.

Durante la tarde de este viernes, las precipitaciones caerán principalmente en la mitad oeste y sur de Catalunya, pero a lo largo del sábado se extenderán y serán generalizadas: alcanzarán el litoral y los Pirineos orientales. El grado de peligro previsto es de dos sobre seis. En paralelo a estos fenómenos concretos y abundantes, se ha activado otro aviso por acumulaciones de lluvias durante 24 horas. En un día, se podrán registrar cantidades superiores a los 100 litros por metro cuadrado, lo que supone un riesgo de uno en una escala de seis. Durante las próximas horas, el Meteocat tratará de precisar aún más los pronósticos y anunciará, en caso de que no cambien, la activación del plan Inuncat.

Sarai Sarroca, directora del Servei Català de Meteorologia, ha advertido de que estas lluvias, "tampoco las de la próxima semana", servirán para poner el fin definitivo a una sequía que es "estructural". Sin embargo, estas acumulaciones de agua pueden ser útiles para evitar restricciones durante noviembre. El Govern ha venido asegurando que no se declaraba la fase de excepcionalidad en los municipios abastecidos por los ríos Ter y Llobregat a la espera de las posibles precipitaciones de otoño.

En estos momentos, los embalses de estos dos ríos acumulan 178,52 hectómetros cúbicos, una cantidad mucho más elevada que la de hace un año. La fase de excepcionalidad, que conlleva más medidas, se activa oficialmente (según el Plan Especial de Sequía) a partir de los 145 hectómetros cúbicos. El pantano de Sau se sitúa ahora en el 21% de su capacidad, y el embalse de la Baells, al 42%. De momento, se prevé que este otoño sea más lluvioso que el de 2023 y 2022. La ventana ideal para recibir agua suele durar hasta mediados de diciembre. Sin embargo, después, viene una época seca que amenaza con recrudecer la situación de nuevo.

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