Audiencia de Girona
Un tribunal ordena investigar por qué una niña murió atrapada en una piscina en Platja d'Aro
Un juzgado de Sant Feliu de Guíxols archivó el caso sin practicar ninguna prueba, a pesar de que un informe apunta la existencia de una "infracción" de la normativa sobre estas instalaciones
Un matrimonio inglés lucha en los tribunales para aclarar por qué su hija falleció en una piscina

Sofía Draper


J. G. Albalat
J. G. AlbalatRedactor
Ha trabajado en el Diario de Barcelona, El País y AVUI. Desde hace años en El Periódico cubriendo los acontecimientos judiciales. Premios Ortega y Gasset, Save the Children, Ramon Barnils y Josep Maria Planes por la investigación del 'caso Maristas' sobre abusos sexuales en los colegios. En el 2016, mención honorífica de la Generalitat en el Día de la Justicia. Colaborador de publicaciones jurídicas. Profesor asociado Master de Criminología de la Universitat de Barcelona.
Sofía tenía nueve años el 31 de marzo de 2023 cuando murió en la piscina privada de un chalet en Platja D'Aro (Baix Empordà) al quedar atrapada por el pecho debido a la potencia de la succión de la rejilla de filtro. Un juzgado de Sant Feliu de Guíxols archivó el caso al cabo de cuatro días con el argumento de que había sido un accidente y sin practicar ninguna prueba. Ahora el tribunal de la Sección Tercera de la Audiencia de Girona ha rectificado esa decisión y ha ordenado que se investigue y se pueda aclarar si el constructor de la piscina o el técnico de mantenimiento cometieron una imprudencia y no cumplieron con la normativa a la hora de colocar la rendija.
La Audiencia de Girona corrige al juzgado de Sant Feliu de Guíxols, que cerró el caso sin practicar pruebas
Los magistrados han admitido el recurso presentado por los padres de la pequeña, Julian Geraint Draper y Olga Draper, representados por los letrados Albert Carles y Álex Serra, del despacho Martell Abogados. El matrimonio de nacionalidad británica lucha desde el día en que falleció su hija para que la justicia investigue qué pasó. "Era un equipamiento muy peligroso que teníamos en casa y nadie nos avisó", asegura Olga. El propósito del matrimonio se ha cumplido y el juzgado de Sant Feliu de Guíxols deberá iniciar las pesquisas.

La pequeña Sofia jugando con un delfín. / El Periódico
El auto de la Audiencia de Girona, al que ha tenido acceso EL PERIÓDICO, sostiene que "resulta difícilmente comprensible" la apertura de unas diligencias judiciales y el cierre en una misma resolución, sin la práctica de las diligencias indispensables para el esclarecimiento de los hechos". E incide en que para decretar el archivo, como así lo hizo el juzgado, "sería necesario, tras la admisión a trámite”, la práctica de las pruebas pertinentes.
La acusación quiere que se cite como investigados al constructor de la piscina y al técnico de mantenimiento
Los abogados que ejercen la acusación requieren que sean citados como investigados el responsable de la construcción de la piscina y el técnico de mantenimiento. A su entender, de las diligencias policiales, de los médicos forenses y de una empresa experta se puede concluir que hay indicios de "relevancia penal". Opinan que los dictámenes "evidencian" datos que apuntan a "defectos, errores y negligencias imputables" a esas dos personas.
Sistema deficiente
La resolución de la Audiencia precisa que el sobreseimiento del caso se basa en conclusiones policiales, "soslayando" que el informe del Instituto de Certificación Sisswa apunta a la existencia de una infracción de la normativa sobre piscinas de uso doméstico, "al no haberse previsto, a pesar de todo, ningún sistema de eliminación del vacío de aspiración en el caso de accidente". Los magistrados subrayan que en el juzgado de Sant Feliu de Guíxols no se tomó declaración al encargado de mantenimiento o propietario de la piscina (la familia inglesa de la menor pasaba allí unos días) sobre las "indicaciones recibidas en torno a su uso" y las acciones que se debían realizar ante "una situación tan funesta como la acaecida".

La piscina donde falleció la pequeña Sofia Draper, en Platja d'Aro / El Periódico
Los informes que hay en la causa, según los abogados de los padres de Sofía, coinciden en la infracción de la normativa, pues la velocidad de succión de la tubería de aspiración de la piscina era de 1,5 metros por segundo (aproximadamente), cuando la norma fija el límite de 0,5 metros por segundo. Además, esta regulación establece que si hay solo un sistema de aspiración con una sola rejilla, como es el caso, este debe estar diseñado de tal manera que un usuario no pueda tapar más del 50% de la apertura, que las rejillas deben estar elevadas en forma de cúpula contrariamente a la dirección el flujo y con succión periférica. En la piscina donde falleció la niña no se cumplía ninguno de estos requisitos.
La menor pesaba unos 30 kilos y presentaba un hematoma muy marcado a nivel pectoral en forma circular de unos 25 y 30 centímetros de diámetro, según el informe de los Mossos d’Esquadra. Es la lesión que le dejó en el cuerpo la rejilla cuando quedó atrapada por la fuerte potencia de la succión del agua. Los padres de la pequeña lo tienen claro: "Lo que intentamos es que otra familia no se encuentre en la misma situación que nosotros".
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