Tercer aniversario de la erupción en La Palma
Tres años después del volcán, La Palma sigue en modo de espera: 120 familias aún viven en casas prefabricadas
La burocracia y los plazos administrativos retrasan una solución habitacional definitiva para los afectados

Una excavadora trabaja en la zona del volcán. / I love the world
Tres años después de la erupción volcánica, La Palma sigue instalada en el modo de espera. Es cierto que se han hecho avances –ya no hay ningún afectado viviendo en hoteles y hace unos meses la instalación de un sistema de medición y alerta contra los gases volcánicos permitió la vuelta a casa de 800 familias– pero otros afectados continúan aguardando por una solución habitacional definitiva, cuando se cumple el tercer aniversario del momento en que el Tajogaite revolvió la vida de los palmeros. La burocracia y los plazos administrativos alargan demasiado los tiempos y continúan manteniendo la vida de muchos damnificados en suspenso. El propio presidente del Cabildo palmero, Sergio Rodríguez, reconoce no estar contento con los tiempos de respuesta, sobre todo en lo que respecta a atender la situación de aquellos que continúan residiendo en las viviendas contenedor y de madera. "Hay que sacarles de allí porque la situación que viven no es una situación de dignidad", valoró.
El volcán cambió la vida de muchos palmeros para siempre el 19 de septiembre de 2021, cuando a las 15:13 horas comenzó una erupción que durante 85 días provocó 7.000 evacuaciones, destruyó 4.000 viviendas y sepultó 70 kilómetros de carreteras y 350 hectáreas de plataneras. ¿Cuál es la situación actual de los afectados? La casuística es muy diversa aunque todos tengan en común haber perdido una parte de su vida. A diferencia de lo que ocurría hace un año, ya no existe ninguna persona alojada en hoteles, pero 85 familias continúan viviendo en las casas modulares de Los Llanos de Aridane y otras 36 en las de madera de El Paso. Una situación que no ha cambiado en los últimos doce meses. Además, una treintena de familias todavía necesitan la ayuda de Cáritas. Hay afectados que continúan recibiendo ayudas al alquiler y otros, una minoría, han comenzado ya a construir sus propias viviendas.
85 familias siguen viviendo en las casas contenedor y 36 en viviendas de madera
"El volcán ha agrietado el Valle socialmente", determina Francisco Rodríguez, presidente de la Asociación Tierra Bonita, una de las once que representan a afectados por la erupción. Bajo su punto de vista, las ayudas no han sido suficiente para quienes lo han perdido todo. Tres años después no se ha levantado ni una vivienda definitiva para los afectados y continúan a la espera de cobrar las ayudas que compensarán el valor real de lo que han perdido. Un fondo que cuenta con 150 millones para un primer plan de pagos, que entregará cada propietario una cuantía tras tasar el valor de sus propiedades y descontar las ayudas que ya han recibido por este mismo concepto.
De esta manera, tal y como explica el viceconsejero para la Recuperación Económica y Social de La Palma, Pedro Afonso, el objetivo es que las personas afectadas puedan decidir qué alternativa habitacional definitiva quieren. "No vamos a construir un edificio para los del volcán, quedaría estigmatizado y no sería lo correcto", apunta. Por eso, con las ayudas de compensación –que en estos momentos están en fase de notificación para quienes hayan perdido su primera vivienda– se espera que los beneficiarios decidan qué quieren hacer: reconstruir su casa aquellos que quieran y puedan hacerlo, optar por construir una nueva vivienda donde deseen, adquirirla o optar a alguna de protección oficial, siempre que cumplan los requisitos necesarios. Para esto, el Gobierno de Canarias ha aprobado dos decretos, el de reconstrucción urbanística y el decreto especial de la vivienda. El primero trata de agilizar la construcción de promociones públicas en toda la isla y reserva un cupo especial para los afectados.
Por otro lado, el decreto urbanístico facilita que los afectados puedan construir sobre la colada y en parcelas de terreno rústico. Algunos ya lo están haciendo, sobre todo aquellos que habían percibido indemnizaciones por parte de aseguradoras y contaban con un terreno. Pero se prevé que sean muchas más a partir de que comiencen a abonarse las compensaciones, lo que puede empezar a provocar colapsos a la hora de conceder las licencias y permisos necesarios. Algo a lo que se refirió el presidente palmero, quien espera que en el plazo de un mes se haya podido reforzar el personal de los ayuntamientos para agilizar la concesión de los permisos pendientes. "Entiendo la desesperación de la gent, peroo los tiempos administrativos son los que son", lamentó.
Otro de los avances que se ha producido a lo largo de los últimos doce meses es la apertura de Puerto Naos y la posibilidad de que 801 viviendas puedan ser de nuevo habitadas tras la instalación de un sistema de medición y alarma contra los gases que todavía emite el volcán. Sin embargo, para otras esta ansiada reapertura no llega. Alexis Hernández es propietario del restaurante La Estaca, que ahora se ubica a escasos metros de la grieta a través de la que se emiten los gases. "Llevamos tres años cerrados, nunca pensé que fuese a demorarse tanto", reconoce. Su negocio daba de comer a ocho familias que ahora reciben ayudas. "Entiendo que el Gobierno sea precavido por motivos de segurid, peroro se ha tardado mucho en hacer lo que se ha hecho", lamenta. Unas ayudas que se van renovand, peroo que le generan una gran incertidumbre por si llega un momento en el que ya no lo hagan.
Cáritas todavía presta asistencia a 70 personas damnificadas por la crisis del Tajogaite
Antonio Olivera, coordinador del Comisionado Especial para la Reconstrucción de la isla de La Palma, ratifica que la voluntad del Estado "es que estas personas no se queden sin apoyo mientras haya una causa objetiva para que no puedan abrir" y recordó que hasta ahora se han ido prorrogando medidas como los ERTE o la compensación para los autónomos. Hernández no confía en poder abrir pronto por lo que ya ha comenzado a buscar alternativas para abrir un nuevo negocio en otra parte. "Es difícil y más cuando el restaurante llevaba funcionando 25 años, pero no podemos esperar eternamente", sentencia.
Sin embargo, la larga espera agota la paciencia de muchos afectados como Amanda Melián, la propietaria de la conocida como la Casa de la grieta, que harta de que se haya convertido en un polo de atracción para turistas sin que a ella se le de una alternativa, ya que continúa residiendo en una de las viviendas modulares, decidió taparla con una lona de plástico el pasado agosto.
Los afectados reconocen que la bonificación del 60% del IRPF es un alivio para sus bolsillo, pero no supone una solución a sus problemas. Otros ven esta medida como un aliciente para fomentar el consumo y la actividad económica en La Palma. "Es justa y beneficiosa para el conjunto de la economía palmera", destaca Pedro Afonso, quien explica que el dinero que los palmeros se ahorran lo pueden destinar "al pago de la hipoteca, la compra o los estudios de sus hijos". Pero insiste en que la medida debería de ser estructural y no coyuntural.
Otras medidas que se han tomado a lo largo del último año para tratar de recuperar la actividad económica es la aprobación del decreto agrario que tiene el objetivo de recuperar la máxima superficie de cultivo afectada por el volcán. Pero, el paso del tiempo será el encargado de determinar si la erupción supuso un cambio en el modelo productivo de la isla. "Por ahora, la actividad se ha conseguido mantener, no se ha venido abajo la isla y el gran reto es si se va a conseguir producir una transformación de la economía y se puedan generar oportunidades", resaltó Olivera. Para esto, La Palma también continúa a la espera.
Manifestaciones contra el impás en La Palma
Dos manifestaciones concentran hoy el malestar de los afectados por el volcán. La primera tendrá lugar entre las 12:00 y las 15:00 horas en la plaza de España de Los Llanos de Aridane. Su convocante, la Plataforma de Afectados por la Erupción del Volcán de Cumbre Vieja 2021, reclama al Estado el pago de 100 millones este año para que se puedan abonar las compensaciones de todas las viviendas habituales perdidas por el volcán y que se pueda continuar con las fincas rústicas y segundas viviendas en 2025 y 2026. La segunda concentración será a las 19:00 horas en la plaza del barrio de La Laguna. Marcelino Rodríguez, presidente de la asociación de vecinos, asegura que el objetivo es reavivar la lucha, que tres años después ha perdido un poco el impulso. "Queremos reunirnos, contarnos cómo estamos y qué echamos de menos", señala.
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