Para propulsar el conocimiento

Un año desplegando la Llei de la ciència para consolidar Catalunya como polo europeo de investigación

Se cumple un año de la entrada en vigor de la norma que fortalece el modelo propio del sistema de I+D+i y apuesta por una ciencia en favor del bienestar de las personas y la competitividad del país

El Vall d'Hebron Institut d'Oncologia (VHIO), situado en Barcelona

El Vall d'Hebron Institut d'Oncologia (VHIO), situado en Barcelona / Departament de Recerca i Universitats

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Hace justo un año, el 13 de enero de 2023, entraba en vigor la Llei de la ciència de Catalunya, aprobada poco antes por una amplia mayoría del Parlament de Catalunya. La nueva norma concibe el modelo catalán de investigación, desarrollo e innovación (I+D+i) como una herramienta para contribuir al bienestar de las personas, la competitividad de las empresas, la eficacia de las instituciones públicas y la sostenibilidad. Una ley que pone especial énfasis en el servicio a la ciudadanía, dando respuesta a los grandes desafíos sociales, fomentando la transferencia de conocimiento y la divulgación científica y la investigación transparente y colaborativa.

La ley ha ido cumpliendo sus etapas y desplegándose a fin de reafirmar la apuesta del país por una sociedad y economía basadas en el conocimiento generado en Catalunya y para consolidar el país como polo de investigación referente en el sur de Europa. Un gran reto que también busca mejorar la financiación pública y privada de la investigación y favorecer el mecenazgo científico. "Con la Llei de la ciència de Catalunya posicionamos la investigación, el desarrollo y la innovación como prioridades políticas, sociales y económicas del país", remarcó el conseller de Recerca i Universitats, Joaquim Nadal i Farreras, cuando la cámara catalana dio su visto bueno a la nueva norma.

Actualmente, el sistema catalán de I+D+i ya se caracteriza por su excelencia, liderando, por ejemplo, la captación de fondos competitivos de investigación: los centros catalanes representan la cuarta institución europea en obtención de fondo Horizon Europe de la CE y Catalunya, con el 1,8% de la población de la UE, ha obtenido el 3,3% de ayudas a la ciencia del Consejo Europeo de Investigación. También desde nuestro sistema de conocimiento se despliegan programas de éxito de atracción de talento científico como ICREA o los Doctorados Industriales, con un gran efecto multiplicador en términos de ocupación e impacto científico.

El sincrotró Alba, ubicado en Cerdanyola del Vallès

El sincrotró Alba, ubicado en Cerdanyola del Vallès / Departament de Recerca i Universitats

Gobernanza

En materia de gobernanza, en su primer año de vida la ley ha avanzado con la constitución de dos de sus entes claves. Por una parte, en mayo de 2023 se constituyó la Comissió Interdepartamental d'Investigació e Innovació (CIRIO), que promueve la coordinación interna de la Generalitat en el fomento de la investigación y define las líneas estratégicas de financiación pública. Más recientemente, el pasado 22 de diciembre, se constituyó el Consell per a la Recerca i la Innovació a Catalunya (CORICAT), formado por 14 personalidades relevantes de la investigación y la innovación y presidido por el Dr. Joan Massagué, que asesorará al Govern en el diseño de sus estrategias.

Además, el Govern ya ha designado sus representantes al Consell del Mecenatge en Recerca, Desenvolupament i Innovació, que entrarà en funcionamiento próximamente.

Estrategias

Siguiendo la hoja de ruta que traza la Llei de la ciència, el Govern ya ha presentado y aprobado dos de los cuatro planes y estrategias previstos a la normativa. En verano, se aprobó el Pla estratègic d'innovació i transferència del coneixement, que tiene como objetivo situar Catalunya entre las regiones europeas más dinámicas en transferencia e innovación. El plan busca favorecer la transformación de la investigación en acciones en favor del progreso, la competitividad y el bienestar.

El pasado 5 de diciembre, se aprobó el Pla estratègic universitari en recerca i transferència d'excel·lència, una iniciativa para fortalecer la investigación en las universidades y fomentar la creación de conocimiento de impacto y la transferencia.  

A esto hay que añadir que ya están elaboradas y pendientes de implementación las dos estrategias restantes. Por un lado, la Estratègia catalana de ciència oberta, que facilitará la disposición de producción científica y datos de la actividad de investigación en repositorios con acceso abierto y de manera comprensible. Y, por otra parte, la Estratègia d'igualtat de gènere en la ciència, que tiene por objetivo promover la paridad de mujeres y hombres e incorporar la perspectiva de género en la producción de conocimiento.

Imágen del Parc de Recerca Biomèdica de Barcelona (PRBB)

Imágen del Parc de Recerca Biomèdica de Barcelona (PRBB) / Departament de Recerca i Universitats

Infraestructuras

Los avances que implica la Llei de la ciència también deben notarse sobre el terreno, asentando el llamado arc científic de recerca, un conjunto de centros, infraestructuras y grandes proyectos de conocimiento que buscan optimizar las capacidades de la ciencia hecha en Catalunya.

Entre estos proyectos destacan la puesta en marcha del supercomputador Mare Nostrum 5 en el Barcelona Supercomputing Center, el impulso a la construcción del sincrotró de cuarta generación ALBA 2 de Cerdanyola del Vallès, la planta de preproducción de semiconductores Innofab, también en Cerdanyola del Vallès, o la fusión y el redimensionamiento de centros de investigación. También hay que resaltar el adelanto en otros proyectos estratégicos, como la Ciutadella del Conocimiento (Barcelona) y, dentro de ella, el edificio BiomedBIST (conocido como Mercado del Pescado), el Centre de Teràpies Avançades i Emergents de Catalunya (CTAEC) o la Vall de la Quántica.