Manada en Caivano

La policía detiene a nueve jóvenes, siete de ellos menores, por violar a dos niñas en el sur de Italia

La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, durante su visita a Caivano (Nápoles).

La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, durante su visita a Caivano (Nápoles). / Efe

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Irene Savio
Irene Savio

Periodista

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Las violaban y, mientras lo hacían, retransmitían la agresión por videollamada. Este uno de los detalles más turbadores de la investigación policial que en las últimas horas ha llevado al arresto de nueve jóvenes, siete de ellos menores de edad, de Caivano, una zona deprimida cerca de Nápoles. El delito del que fueron acusados: la agresión sexual reiterada de dos niñas de 10 y 12 años.

Las órdenes de detención fueron emitidas por el juez de instrucción del Tribunal de Menores de Nápoles y por el juez del tribunal de Nápoles Norte, después de la reconstrucción realizada por las fuerzas del orden italianas. "Oía voces (de personas) que se reían”, habría contado una de las niñas, según los investigadores.

Los medios de comunicación locales también han explicado que precisamente las pruebas audiovisuales habrían sido claves para probar los hechos. A este hecho se ha sumado, con toda probabilidad, a la presión política: desde que se conoció la brutal agresión, una más de las ocurridas en los últimos meses, la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, ha asegurado que los culpables serían apresados por la justicia. 

Redadas y decretos

En paralelo, la policía ha llevado a cabo dos redadas en esta pequeña ciudad, conocida por ser una zona depauperada y azotada por la criminalidad y las mafias. Tanto es así que, días atrás, Meloni incluso se desplazó hasta Caivano. "Pronto se verán los frutos de esta visita", aseguró entonces la primera ministra itialia, tras reconocer que "en Caivano se ha consumado el fracaso del Estado".

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Dicho y hecho, posteriormente la líder conservadora también aprobó el llamado ‘decreto Caivano’, que pone en marcha una serie de medidas contra la criminalidad juvenil que ya han entrado en vigor (aunque deberá ser convertida en ley por el Parlamento en 60 días). 

El nuevo texto tiene un marcado carácter punitivista: en adelante será más fácil que menores responsables de delitos acaben en prisión, a la vez que castiga con penas de cárcel a los padres que no escolaricen a sus hijos