Proyecto Rorcual

Primer avistamiento en 6 años de una cría de ballena en la costa catalana

La asociación Edmaktub ya ha identificado a 237 rorcuales comunes, el segundo animal más grande del mundo, a su paso por el Mediterráneo catalán

Ana Sánchez

Ana Sánchez

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Parece una alucinación Disney: una ballena y su cría se pasean por la costa catalana con parsimonia de documental de La 2. Hace apenas unos días que el equipo de la asociación Edmaktub las grabó con un dron entre Comarruga y Calafell. Hacía seis años que no avistaban una escena parecida. Desde el 2017. Una buena noticia con trasfondo de preocupación. “No hay ninguna población de otras especies de cetáceos en la que haya tan bajo índice de reproducción”, se encoge de hombros Eduard Degollada. “¿Qué está pasando?”.  

Degollada es el presidente de Edmaktub. Hace una década que esta organización sin ánimo de lucro estudia a estos mastodontes acuáticos con puerto base en Vilanova y la Geltrú. Proyecto Rorcual: es su buque insignia. La primera investigación que estudia en profundidad el periplo de estas ballenas en peligro de extinción por la costa catalana: desde Palamós hasta Ametlla de Mar.  

Autopista de ballenas

Mirarían por encima de la aleta hasta a Moby Dick. El rorcual común es el segundo animal más grande del mundo, solo por detrás de la ballena azul. 24 metros pueden alcanzar estos rascacielos marinos. Ahora es la temporada: de marzo a junio, la costa catalana, especialmente la del Garraf, se llena de ballenas que ni en las películas de Nemo. Quizá al público de secano eso les suene a expedición de Calleja, pero hace 10 años que se investiga esta autopista mediterránea de rorcuales.  

Edmaktub ya acumula 237 en su catálogo de avistamientos, según detalla en su memoria del año 2022 que han presentado esta mañana. 166 fueron identificados el año pasado. Parece que estas ballenas son tan insistentes como los alemanes de visita en Mallorca: “Más de un 22% de los individuos identificados –concluye el estudio- han sido avistados en distintos años”.

“De esta temporada hay dos detalles importantes –apunta Eduard Degollada-: la falta de lluvias y el excesivo calor. Eso significa que no se aporta suficiente nutriente al agua a través de las lluvias y es posible que no sea un buen año de alimentación. Y el exceso de calor normalmente adelanta el final de la temporada”. Las dos juntas: “Mal asunto”, vaticina el capitán. 

De momento, han visto “pocas ballenas”. Apenas seis este principio de temporada. (Ocho en realidad, pero solo cuentan las que identifican). La buena noticia es que una es una cría. “Importante –recalcan Eduard-, porque desde 2017 no veíamos ninguna”. Lo que también es “muy preocupante”, lamenta. 

Durante los tres meses de campaña, el equipo de Edmaktub hace salidas diarias (siempre que el mar lo permite) a bordo del 'Maktub', así se llama su catamarán. Apenas son una decena de tripulantes: Eduard, Beatriu Tort, la otra mitad de la asociación, y 8 voluntarios. Son jornadas de investigación de 6 a 10 horas en el mar. A estas alturas, ya han captado a vista de dron a ballenas amamantando a sus crías, alimentándose en superficie y hasta defecando, un detalle que no es para tirar por el retrete: eso demuestra que las ballenas se alimentan por la zona, llena de cañones submarinos cargados de nutrientes. Un Mercadona del plancton.  

Esa es la primera conclusión del proyecto: los rorcuales no están de paso por el Mediterráneo. Vienen a alimentarse al Garraf. “No hemos parado de insistir desde hace 5 años –insiste Eduard-. Estamos viendo ballenas que vienen en marzo y las volvemos a ver a principios de junio. La misma ballena. Y hemos marcado animales con marcas satelitales que no han salido de la costa catalana en un mes. Eso quiere decir que muy de paso no están”.  

inicio de Proyecto Rorcual 2023

inicio de Proyecto Rorcual 2023

Técnica pionera

Aparte de tener callo de navegar, Eduard tiene cientos y cientos de horas de vuelo de dron. La suya es una técnica pionera de identificación y catalogación del rorcual común. La utilizan desde el 2014 y la acaban de publicar en la revista científica ‘Drones’. “Va a ser una herramienta fundamental –apuntan- para el reconocimiento de ballenas en diferentes océanos”. De hecho, ya han empezado a trabajar con investigadores del sur de Francia para comparar catálogos. 

Edmaktub también está elaborando un proyecto con cámaras térmicas para detectar a las ballenas. “Y plantear –detalla Eduard- que estas cámaras sean utilizadas en los buques para evitar las colisiones,  principal amenaza de las ballenas en todo el mundo".