Club de Educación y Crianza de EL PERIÓDICO

Dientes, percentiles y cólicos: dudas y respuestas para el primer año de crianza de tu bebé

Los collares de ámbar no amortiguan el dolor, la homoeopatía no funciona para los cólicos y los cereales no alargan el sueño

La pediatra Mar López Sureda publica una guía sobre salud infantil en la que destierra mitos y ofrece información científica

Dos madres dan de mamar a sus bebés

Dos madres dan de mamar a sus bebés / Guillermo Moliner

Olga Pereda

Olga Pereda

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Si alguien te ha recomendado o te ha regalado un collar de ámbar con 'propiedades naturales' para que a tu bebé no le duelan los dientes lo mejor que puedes hacer es tirarlo a la basura. O ponértelo tú, si te parece bonito. Jamás se lo coloques a tu hijo.

Los primeros dientes suelen aparecer entre los 6 y los 10 meses, aunque pueden tardar hasta los 15 meses. Por más que te diga algún iluso, el collar de ámbar no sirve para combatir las presuntas molestias que provocan los dientes. Es más, la comunidad médica lo desaconseja por riesgo de asfixia y atragantamiento. Aplicar paracetamol en la encía o utilizar un gel para el dolor tampoco sirve para nada. Así lo explica la doctora Mar López Sureda, pediatra de atención primaria que acaba de publicar 'Las respuestas de mi pediatra' (Grijalbo), una didáctica guía sobre salud infantil que resuelve muchas de las dudas que suelen tener padres y madres los primeros años de vida de sus hijos.

Los dientes

La salida de los dientes es un clásico. La mayoría de las veces, produce salivación excesiva e inflamación de las encías. Y, por supuesto, irritabilidad. ¿Hay que dar ibuprofeno si está molesto? “No se ha demostrado que los analgésicos mejoren la irritabilidad de la erupción dental”, responde la doctora.

Es recomendable acudir al dentista pediátrico nada más salir los primeros dientes. “Hay que revisar la calidad del esmalte y el médico te puede dar consejos sobre la mejor forma de lavárselos”, explica. Los dientes salen de dos en dos, así que también hay que ir al odontopediatra si a tu bebé solo le sale un diente y pasan las semanas y el otro sigue sin salir.

Si algún iluminado te dice que tu bebé tiene caries por culpa de la lactancia, que sepas que es otro mito. “De hecho, la leche materna previene el desarrollo de caries”, añade López Sureda.

Percentil

Cuando te conviertes en madre, hay una palabra que comienza a obsesionarte: percentil (la talla del bebé comparada con el resto). “Todos los pesos entre el percentil 3 y 97 son normales”, recuerda la pediatra, que insiste en que no es recomendable que el bebé gane peso de forma brusca. "Si tu hijo está en el percentil 3 lo mejor sería que los primeros años siguiera en esa misma franja", añade. ¿Y el consabido estirón? Llegará, llegará. Pero depende de la pubertad. Si tu hijo está fuera de los percentiles, López Sureda invita a consultar al especialista para calcular la velocidad de crecimiento y comprobar si todo está bien o existe alguna alteración en la hormona del crecimiento.

Sueño, despertares y llanto

Hay quien utiliza la expresión dormir como un bebé para hablar de un buen descanso. Nada más lejos de la realidad. Los bebés, explica la doctora, tienen una media de 9 despertares cuando tienen un mes de vida. Al cumplir el año, disminuye a 4,5. 'Las respuesta de mi pediatra' recomienda a las mamás que pidan ayuda para poder aprovechar y dormir siestas de día. A los despertares y la falta de sueño hay que añadirle otra tortura que traen debajo del brazo los bebés: el llanto. “Describiría los seis primeros meses de vida de mi hija con una sola palabra: llanto. Qué interminable puede ser una hora con un bebé que llora”, admite la pediatra.

En los tres primeros meses de vida es cuando más lloran. La media del llanto de un bebé es de 117 a 133 minutos al día las primeras seis semanas (hay críos que alcanzan los 250 minutos al día). Y aquí viene el mensaje tranquilizador: “Un bebé llora para comunicarse y es totalmente normal que lo haga”.

El truco de darle cereales en un biberón para que esté más lleno y duerma más es otro mito. “Se despierta igual y, además, cuidado con el azúcar que llevan muchos cereales”, advierte la divulgadora. Otro leyenda absurda es la de impedir la siesta para que tu hijo llegue con más sueño a la noche. Error. “Un bebé descansado duerme mejor. Si no se echa siesta estará más canso y más tenso y no conciliará el sueño”, añade.

Cólicos

Si hablamos de llanto tenemos que hablar de cólicos. O de presuntos cólicos porque no hay una definición única ni la ciencia todavía ha dictaminado por qué ocurre. Son episodios de llanto urgente de al menos 3 horas al día y al menos 3 días por semana en un menor de 3 meses. Entre un 8% y un 40% de los bebés los padecen. Suele empezar a los 15 o 45 días de vida y desaparecer a los 4 meses. López Sureda recuerda que ni la acupuntura ni los remedios homeopáticos ni las infusiones y los productos de parafarmacia no funcionan. Es más, pueden conllevar riesgos potenciales. Calma y paciencia. Hay un día en el que los cólicos desaparecen.