Así es Ozempic: el medicamento contra la diabetes que se usa como adelgazante

Los pacientes con diabetes tipo 2 que están tratándose con medicamentos análogos del GLP-1, que se administran con una pluma precargada, están sufriendo un peregrinaje por las farmacias para intentar hacerse con su tratamiento. Estos fármacos tienen problemas de abastecimiento en algunas farmacias españolas debido a la gran demanda que se ha registrado en los últimos años, ya que se ha comprobado que, además de para tratar la diabetes, estos medicamentos están siendo usados para perder peso.

Esta situación ha llevado a una falta de estoc que está comprometiendo el tratamiento de miles de usuarios. El grupo de los medicamentos análogos del GLP-1 incluye fármacos autorizados para mejorar el control glucémico en el tratamiento de adultos con diabetes tipo 2 no suficientemente controlada con dieta y ejercicio.

La propia Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) ya reconoció hace un año tener conocimiento de un aumento de la demanda de los medicamentos incluidos en este grupo. Entonces, emitió una serie de recomendaciones para intentar paliar los problemas de suministro si no se ajustaban las prescripciones a los casos para los que están indicados, en este caso la diabetes tipo 2.

Estos fármacos se encuentran en tres presentaciones: Trulicity, de la farmacéutica Lilly, que a finales del año pasado comunicó la imposibilidad de hacer frente al aumento continuado de la demanda; Ozempic, de Novo Nordisk, quien llegó a indicar que el aumento en la demanda de estos medicamentos provocaba una disponibilidad intermitente que podría llegar a mantenerse durante el resto del año; y Bydureon, de AstraZeneca, en vías de dejar de comercializarse.

Desde la farmacéutica Lilly especificaron, no obstante, que han adecuado un plan para tener controlada la demanda y el estoc, pidiendo a los profesionales sanitarios que no prescriban Trulicity "a nuevos pacientes con diabetes tipo 2. De esta manera, podemos decir que todos los pacientes con diabetes de España que estaban en tratamiento con Trulicity han podido acceder a su fármaco".

Sobre Ozempic

Ozempic se presenta en solución inyectable en plumas precargadas y solo se puede dispensar con receta médica. En Estados Unidos, el precio asciende a más de 900 euros. Pero en España el precio es de 128,15 euros si la receta es privada y, si es pública, solo está financiado en el caso de que te lo recete tu médico y pase por la inspección debida, es decir, si la receta es para combatir la diabetes.

Ozempic, según reza el propio laboratorio que lo produce y también el Centro de Información de Medicamentos (CIMA) de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), también está indicado para reducir el riesgo de eventos cardiovasculares serios en el segmento de enfermos detallado que padece además del corazón.

No se usa en personas con diabetes tipo 1, y no es una insulina, por lo que no debe usarse como sustitutivo de la misma; además, usarlo inadecuadamente puede producir hipoglucemias o bajones severos de azúcar en sangre. Tampoco debe emplearse en pacientes con retinopatía diabética, ya que este medicamento puede empeorarla. Igualmente, está contraindicado en embarazadas.

"Llevo casi un mes sin ponérmelo"

José Riquelme, un vecino de 72 años del municipio de Alcantarilla (Murcia), es uno de los pacientes murcianos con diabetes tipo 2 que estuvo afectado por el desabastecimiento del fármaco con el que se estaba tratando a finales del año pasado.

"Estoy usando Ozempic desde hace años, pero llevo varias semanas en las que es imposible encontrarlo en la farmacia. Así que lo que he hecho ha sido ir alargando las agujas que me quedaban en casa", explicaba en noviembre pasado este ingeniero jubilado a 'La Opinión de Murcia', diario del grupo Prensa Ibérica.

Riquelme recuerda que comenzó el tratamiento administrándose hasta una inyección diaria, pero le redujeron la dosis y últimamente se ponía una a la semana. "Este producto es mucho más eficaz que otros tratamientos que he tenido antes, ya que me permite controlar los picos de azúcar que tengo después de las comidas, cuando antes era imposible".

Este paciente dijo entonces que había trabajado muchos años como ingeniero en la industria farmacéutica, en empresas de la Región de Murcia, por lo que "me produce mucha tristeza que se den estos problemas de desabastecimiento de medicamentos, ya que sabemos cómo funciona el mercado", aseguró.

Tras recorrer varias farmacias y ver que conseguir Ozempic se ha convertido en misión imposible, José Riquelme ha desistido de seguir intentándolo. "Llevo un mes sin ponérmelo porque no lo encuentro", se quejaba este paciente.