Violencia machista

Los Mossos vigilan a 12.000 víctimas de violencia machista: 25 en riesgo alto de feminicidio

Entre un 70 y 80% de casos de malos tratos no se denuncian

Catalunya registró en 2022 12 feminicidios: un tercio había denunciado

La portavoz de los Mossos, Montserrat Escudé, en uno de los pasillos de las dependencias de los Mossos en Travessera.

La portavoz de los Mossos, Montserrat Escudé, en uno de los pasillos de las dependencias de los Mossos en Travessera. / JORDI COTRINA

Agencias

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En plena ola de feminicidios en el Estado, el Ministerio del Interior y las policías han pactado aumentar la vigilancia sobre los agresores y encontrar nuevas estrategias de mejora en la detección y gestión del riesgo para mejorar los modelos e instrumentos de la valoración para evitar feminicidios. En este contexto, unas 12.000 mujeres víctimas de violencia machista son objeto de seguimiento por parte de la Unitat d'Atenció de la Víctima dels Mossos, según ha avanzado en 'El Matí de Catalunya Ràdio' la portavoz del cuerpo policial, Montserrat Escudé.

Las parejas y exparejas de 38 de estas mujeres tienen asignada una pulsera electrónica para garantizar que cumplen la orden de alejamiento decretada por un juez. Nueve de estas mujeres están en el nivel más alto de sufrir una agresión mortal, 16 en nivel alto y 74 en riesgo medio. En algunos casos extremos, estas mujeres cuentan con vigilancia policial durante las 24 horas.

La inspectora Montserrat Escudé ha explicado que los antecedentes policiales violentos o las condenas son cuestiones que ya se tienen en cuenta, aunque admite que "tal vez se debería revisar la importancia que hasta ahora se le daba". Es por este motivo que pedirán a jueces que autoricen más pulseras para seguir telemáticamente y que se dictaminen más órdenes de alejamiento.

Fracaso del sistema

La mitad de las mujeres asesinadas en 2022 había denunciado a su agresor. En Catalunya, el año se cerró con 12 feminicidios. Un tercio de las mujeres muertas había denunciado su asesino. Ninguna de ellas tenía medidas de protección vigentes. El año anterior, 2021, se denegaron más de la mitad de las más de 5.000 que pidieron órdenes de protección en Catalunya.

Para Escudé, esta autocrítica es importante "porque cualquier feminicidio es la máxima frustración, la expresión más grave del fracaso absoluto del sistema".

A pesar de que en Catalunya ha aumentado el número de denuncias, la portavoz ha reconocido que los niveles de infradenuncia siguen siendo muy elevados. Concretamente, entre el 70 y el 80% de casos no llegan a aflorar. Es por ello que apela a la responsabilidad del entorno de la víctima, para que denuncie si es testigo de violencia. "El entorno es importante aunque a veces, o no conoce la situación, o está desestructurado" comenta Escudé.