Tribunales

Fiscalía pide seis años para un profesor de los Maristas por abusar de una alumna

El centro, ubicado en el Poble-sec, podría ser declarado responsable civil subsidiario

Escuela Anna Ravell, de los Maristas

Escuela Anna Ravell, de los Maristas / Ricard Fadrique

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La fiscalía ha pedido 6 años de cárcel y 5 de libertad vigilada para un profesor del colegio Maristas Anna Ravell, del barrio del Poble-sec de Barcelona, por haber abusado de manera continuada de una de sus alumnas, hechos por los que el centro educativo podría ser declarado responsable civil subsidiario.

Según detalla la fiscalía en su escrito provisional, entre los años 2017 y 2018 el acusado aprovechó durante una de sus clases para tocar por debajo de los pantalones a la menor, que tenía entre 8 y 9 años, y en otras ocasiones en el pecho y la barriga, al acudir esta a su mesa para consultar dudas.

La fiscalía pide que el profesor, que fue apartado por el centro educativo al denunciarse los supuestos abusos, indemnice a la niña con 5.000 euros de los que solicita que responda como responsable civil subsidiario la Fundación Maristas.

Tocamientos

El hecho puntual que desencadenó la investigación fue que el profesor supuestamente acudió a la mesa de la alumna para realizar una explicación, sentándose en la silla de la misma, ambos frente a un ordenador, y aprovechó para meter su mano por debajo de los pantalones de la niña.

Los hechos tuvieron lugar en un día no especificado entre septiembre del 2017 y marzo del 2018, y los padres se enteraron por una conversación con su hija tiempo después.

DGAIA y protocolo

Una vez conocida esta situación, los padres contactaron con la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia (DGAIA) y la escuela, que activó un protocolo para apartar al profesor.

A pesar de que el acusado está siendo juzgado solo por abusar de esta niña, la menor declaró que había visto cómo el mismo profesor también había tocado por debajo de la camiseta a otras dos alumnas. Sin embargo, una de esas menores, que declaró como testigo, no reconoció los tocamientos.

Miedo e incomodidad

Tal como declararon los padres de la niña, la situación, que se hizo de dominio público tras un comunicado de la escuela, tuvo un efecto en la menor, que temía volver a tener a este hombre como profesor y se sentía incómoda por las preguntas y comentarios de sus compañeros.

El acusado declarará mañana miércoles, en la segunda sesión del juicio, en la Audiencia Provincial de Barcelona.