Derechos LGTBI

'Ley trans': el PSOE "no tocará" la autodeterminación de género pero busca dar "más seguridad jurídica"

El PSOE no cede a las peticiones del feminismo más ortodoxo y solo muestra "dudas" sobre las violencias reconocidas en la ley LGTBI

Manifestación en el Congreso a favor de la ley trans el pasado mes de marzo. /

Manifestación en el Congreso a favor de la ley trans el pasado mes de marzo. /

Patricia Martín

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Después de unos días de alta tensión en el seno del Gobierno de coalición y más aún en las propias filas del PSOE -así como de honda preocupación en el colectivo LGTBI-, los socialistas han anunciado que “no tocarán” el núcleo de la ley trans: la autodeterminación de género, concepto que alude a que una persona pueda cambiarse de sexo en el DNI y en el Registro Civil con su mera voluntad, sin dos años de hormonación y un aval médico, como se exige en la actualidad. 

Los socialistas no se harán eco, por tanto, de las demandas del feminismo más ortodoxo, en el que militan algunas socialistas como Carmen Calvo, que exige modificar el aspecto primordial de la 'ley trans' porque la llamada autodeterminación de género supone, a su juicio, "borrar" a las mujeres y dar preponderancia al "género" -al que consideran una construcción social del machismo- sobre el "sexo biológico".

La ley permite el cambio de sexo registral libremente a partir de los 16 años; entre los 14 y los 16 años si los menores presentan la solicitud “asistidos por sus representantes legales”, y entre los 12 y los 14 con el aval de un juez. Fuentes socialistas han garantizado que “no tocarán la parte de la autodeterminación del género”, por lo que todo indica que tampoco harán cambios sobre la edad a partir de la cual se puede ejercer el derecho. Más allá de eso, la nueva norma no especifica edades ni requisitos para los procesos de hormonación o intervenciones médicas, ya que esas competencias recaen en las autonomías.

Las violencias

Las mismas fuentes han advertido, no obstante, de que "tienen dudas" sobre "la equiparación de algunas violencias" que se recogen en la norma con los ataques machistas, por lo que el PSOE sí podría presentar enmiendas para modificar este aspecto. La 'ley trans' define como "violencia intragénero la que se produce en el seno de las relaciones afectivas y sexuales entre personas del mismo sexo y/o género y que constituye una manifestación de poder cuya finalidad es dominar y controlar a la víctima". La norma señala que cuando las personas LGTBI sufran violencia intragénero se dictará una orden de protección igual a la que estipula la ley de violencia de género y estas víctimas tendrán los mismos derechos laborales que las afectadas por el maltrato machista.

Este asunto, no obstante, no es parte nuclear de la norma, por lo que los posibles retoques, a priori, no tendrían por qué afectar a la aprobación de la ley como sí podría haber sucedido si los socialistas hubieran pedido recortar la autodeterminación de género, que es la principal reivindicación del colectivo LGTBI, y, a su vez, el principal reproche del sector del feminismo contrario a la norma, junto con que los menores puedan cambiar de sexo en el Registro Civil sin aval médico ni jurídico. "Queremos dar seguridad jurídica a la ley, que sabemos acabará recurrida por el PP y sus socios de la ultraderecha ante el Tribunal Constitucional", han afirmado fuentes socialistas. "Podemos mejorar la ley y hacerla más robusta ante esos ataques de los que son verdaderos enemigos de los derechos de los colectivos", han añadido.

La petición de Podemos

De hecho, antes de conocerse las intenciones socialistas, la ministra de Igualdad, Irene Montero, había mostrado su "preocupación” por la posibilidad de que el PSOE volviera a “cuestionar aspectos centrales de la ley como el reconocimiento a la autodeterminación de la identidad de género”, vía enmiendas. La ministra ha garantizado a la comunidad LGTBI que no apoyará ningún tipo de “retroceso” sobre el texto pactado en el seno del Gobierno y que "se dejará la piel" para que la norma sea aprobada definitivamente antes de fin de año.

"Saben que tuvimos debates muy intensos [...] pero llegamos a un acuerdo para garantizar la libre autodeterminación de género y para reconocer el derecho de las infancias trans [...] y el compromiso es que se apruebe la ley antes de final de año y sin retroceso en derechos", ha remachado.