Polo de investigación

Barcelona impulsa un nuevo pacto para potenciar el sector biomédico

La ministra de ciencia adelanta el despegue de esta nueva iniciativa en un evento organizado por EL PERIÓDICO

Morant también anuncia la creación de una sociedad mercantil entre el Gobierno y las farmacéuticas para impulsar el desarrollo de terapias avanzadas

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Ministra / Joan Cortadellas

Valentina Raffio

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El Ministerio de Ciencia, la Generalitat de Catalunya, el Ayuntamiento de Barcelona y la Universidad Pompeu Fabra ultiman un nuevo pacto para potenciar el papel de Barcelona como un polo de investigación biomédica de referencia. La iniciativa, anunciada este jueves por la ministra Diana Morant, nace para potenciar la colaboración entre los centros de investigación y las empresas biomédicas de la ciudad.

"Necesitamos potenciar la colaboración entre los diferentes sectores implicados en el diseño de herramientas innovadoras como el diseño de terapias avanzadas o la medicina de precisión", ha explicado Morant durante un evento organizado por EL PERIÓDICO sobre salud de vanguardia, al que también ha asistido el primer teniente de alcalde, Jaume Collboni.

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De izquierda a derecha, el director de El Periódico, Albert Sáez; Aitor Moll, consejero delegado de Prensa Ibérica; la ministra Diana Morant; la delegada del Gobierno, Maria Eugènia Gay, y el teniente de alcalde Jaume Collboni. / Joan Cortadellas

Morant también ha anunciado la creación de un nuevo procedimiento de colaboración público-privada para impulsar el desarrollo de terapias avanzadas mediante la creación de una sociedad mercantil. Asimismo, la ministra de Ciencia ha adelantado el lanzamiento de una nueva convocatoria conjunta entre el Instituto de Salud Carlos III y el Centro para el Desarrollo Tecnológico y de Innovación (CDTI). Esta convocatoria, que se publicará oficialmente en los próximos días, será la primera convocatoria conjunta entre estas dos instituciones y estará dotada con 55 millones de euros. 

"Estamos trabajando para cerrar el círculo virtuoso entre la ciencia y la industria y así lograr que los avances científicos en el ámbito de salud se puedan trasladar de manera más eficiente a la sociedad", ha recalcado la ministra de Ciencia durante una entrevista con el periodista científico Michele Catanzaro. "Queremos que España sea capaz de descubrir y fabricar tratamientos frente a enfermedades como el cáncer, la diabetes o la esclerosis y que estén a disposición de todos los ciudadanos a través del Sistema Nacional de Salud", ha añadido Morant.

Inversión en salud

Durante su intervención de este jueves, la ministra ha enmarcado el despegue de todos estos proyectos dentro del plan estratégico sobre salud de vanguardia (uno de los once Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica impulsados por el Gobierno de España).

En los próximos tres años, el programa tiene previsto movilizar 900 millones de euros en los centros de investigación públicos y unos 600 millones adicionales en el sector privado. Asimismo, se estima que la aplicación de este plan estratégico generará una contribución adicional en el PIB de más de 4.000 millones y permitirá la creación de más de 12.000 nuevos puestos de trabajo.

Terapias de vanguardia

Según han explicado una decena de ponentes en las jornadas organizadas por EL PERIÓDICO, el programa de salud de vanguardia ya se está utilizando para financiar investigaciones para, por ejemplo, mejorar el diagnóstico y el tratamiento de cánceres infantiles, patologías cardiovasculares y enfermedades raras, entre muchos otros. En una de las primeras convocatorias públicas de este plan, impulsadas por el Instituto de Salud Carlos III, se destinaron cerca de 30 millones de euros a 46 proyectos de investigación en medicina de precisión. Un tercio de estos fondos fueron a parar a centros de investigación catalanes.

Morant, por su parte, también ha destacado la importancia de fortalecer la colaboración entre los centros de investigación y el tejido empresarial español para que todos los avances que se consiguen en los laboratorios puedan trasladarse a la práctica clínica y, en definitiva, puedan estar al alcance de los ciudadanos