Violencia

Sumisión química: ¿qué drogas se usan? ¿cuál es su efecto?

El coordinador del grupo de Toxicología de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias explica algunas incógnitas sobre un fenómeno que muchas veces acaba en agresión sexual

sumisión química

sumisión química / agencia

Agencias

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Los datos del Instituto Nacional de Toxicología de los últimos cinco años indican que aproximadamente en una de cada tres agresiones sexuales se produjo gracias a que la víctima estaba bajo sumisión química, es decir, bajo los efectos del alcohol, las drogas o fármacos sedantes o ansiolíticos que provocan un estado de inconsciencia o semiinconsciencia que genera confusión y dificulta el reconocimiento del hecho. Envuelto siempre en dudas y con una enorme falta de información, el coordinador del grupo de Toxicología de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES), así como médico de Urgencias en el Hospital Universitario de Canarias en Tenerife, Guillermo Burillo, esclarece algunas de las incógnitas sobre este fenómeno en declaraciones a Europa Press.

¿Cuál es el perfil de la víctima?

El experto asegura que, además de en mujeres con el fin último de la agresión sexual, la sumisión química también se emplea para modificar el comportamiento de niños que no duermen o de ancianos para robarles, por ejemplo. "El perfil habitual de la víctima es el de una mujer joven, española, o latinoamericana, que admite haber consumido alcohol antes del episodio, y que sufre amnesia parcial o total de los hechos. No obstante, debemos considerar la sospecha también en otros perfiles de víctimas, en relación con la obtención de dinero o bienes bajo el efecto de sustancias. Si bien el alcohol es la más comúnmente empleada, las sustancias implicadas pueden ser múltiples", coinciden desde la Comunidad de Madrid, según recoge Europa Press.

¿Qué tipo de drogas se usan?

"Con mucho, la sustancia más involucrada en la sumisión química es el alcohol", remarca Guillermo Burillo, aunque también reconoce que hay un porcentaje donde se usan las benzodiacepinas (medicamentos psicotrópicos con efectos sedantes, hipnóticos, ansiolíticos, anticonvulsivos, amnésicos y miorrelajantes), que se usan para dormir, y pone el ejemplo de la película 'Resacón en las Vegas', donde se escenifica perfectamente, "aunque de forma exagerada", el caso de una sumisión química, en el que unos amigos celebran la preboda de uno de ellos y al día siguiente se despiertan sin saber qué ha pasado.

Asimismo, también se emplean los productos que tienen un anestésico como el éxtasis líquido, "aunque se ve muy poco", y productos con burundanga, preparados con escopolamina que se consiguen de fármacos, raíces, o semillas de plantas que se administran por la vía oral pasando desapercibidos para la víctima por no tener olor, color, ni sabor.

¿Cuál es su efecto?

Los efectos de estas sustancias incluyen sedación y amnesia anterógrada. La víctima no recuerda nada de lo ocurrido y se muestra desinhibida, de forma que no solo no se opone sino que incluso puede colaborar. Y el principal problema, según el experto, es que estas drogas, sobre todo la burundanga, tienen una vida media muy corta, de forma que cuando uno llega al hospital porque es consciente de que algo ha pasado, no recuerda nada y ya es tarde para detectar la sustancia en sangre o en orina.

"Alguien se toma una copa, generalmente una mujer, y se despierta en su casa o en casa de alguien o en un sitio que desconoce y con síntomas de haber sido violada. Entre que se hace la composición de lugar, que no se acuerda de lo que ha pasado, que no sabe si ha sido ella, o que realmente ha sido una agresión pasan muchas horas y cuando llega al hospital ya no se detecta en sangre o en la orina la sustancia que ha producido la sumisión", agrega Burillo.

¿Hay datos de agresiones por sumisión química?

El doctor celebra los avances logrados en la materia y que actualmente sean capaz de detectarse más casos. Así, apunta por ejemplo el caso de la Comunidad de Madrid o de Catalunya, con protocolos y centros especializados en detección de drogas para este tipo de situaciones. En el caso de la región catalana, desde el 1 de enero de 2021 y hasta el 12 de junio de 2022, un total de 288 mujeres han denunciado en Catalunya haber sufrido abusos sexuales mientras se encontraban bajo la influencia del alcohol o de otras drogas. De estas 288, 167 afirman que alguien les puso algo en la bebida para adormecerlas y 121 manifiestan que lo que hizo el agresor fue aprovecharse del estado de vulnerabilidad en el que se encontraban, según datos de los Mossos d’Esquadra.

¿Se puede evitar?

El coordinador del grupo de Toxicología de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias aconseja para evitar la sumisión química salir en grupo con gente que se conozca, no dejar la copa perdida, sino tenerla siempre a la vista y en caso de encontrarse raro o mal ir a casa, pero con alguien de plena confianza, no con alguien que acaba de conocer en el bar. "Nadie tiene derecho a abusar de alguien en el caso de sumisión química oportunista. Pero tampoco nadie debe sentirse culpable ni que ha propiciado la sumisión si esto sucede", aclara el especialista.