Salud femenina

Así es cómo las 'apps' que controlan la regla usan tus datos

Un estudio de la firma Eticas analiza la privacidad de las aplicaciones que calendarizan el ciclo de la regla y la ovulación y denuncia que parte de la información clínica de las usuarias se comparte con fines comerciales

Una mujer consulta su ciclo menstrual en una aplicación móvil.

Una mujer consulta su ciclo menstrual en una aplicación móvil. / Isabel Infantes (Reuters)

Carles Planas Bou

Carles Planas Bou

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Cientos de millones de mujeres de todo el mundo recurren diariamente a aplicaciones móviles para calendarizar sus ciclos menstruales y sus períodos de ovulación. Sin embargo, no todas gestionan la delicada información clínica de sus usuarias de forma responsable e incluso algunas han sido denunciadas por exponer la privacidad.

Es por ello que la firma española Eticas Research & Consulting, fundada por la investigadora Gemma Galdón, ha elaborado un informe en el que se analiza y detalla qué uso hacen de los datos sobre la regla las apps más populares del país. Y el estudio arroja una conclusión preocupante: "muchas de estas aplicaciones comparten datos con terceros (...) a menudo con fines comerciales".

Entre las 12 aplicaciones diseccionadas se encuentran Mi Calendario Menstrual, Flo, Clue, Cycles, WomanLog, Period Tracker o My Fitness, entre otras. Las tres primeras tienen más de 100, 50 y 10 millones de descargas respectivamente, lo que da una imagen de su popularidad. El mercado de la tecnología sanitaria femenina no ha dejado de crecer y se espera que en 2025 tenga un volumen de unos 50.000 millones de dólares.

Compartir tus datos

El estudio de Eticas concluye que la mayoría de estas 'apps' recopilan y comparten con terceras partes datos personales de las usuarias como el número de tampones o compresas usadas. Compañías como Clue han indicado que esos datos se comparten para la investigación científica, un supuesto que cuenta con unos permisos especiales en la legislación. Sin embargo, el informe señala que también se incluyen fines comerciales.

En la Unión Europea (UE), el Reglamento Europeo de Protección de Datos (GDPR, por sus siglas en inglés) obliga a las aplicaciones que quieran ceder esos datos a requerir del consentimiento de las usuarias, algo que, según denuncia Galdón, es insuficiente. "La ley habla de consentimiento libre e informado y hemos visto como muchas de esas políticas son incomprensibles para las usuarias", apunta. De todas estas aplicaciones, solamente WomanLog no vende ni comparte datos de sus usuarias bajo ningún concepto. Las otras dejan la puerta abierta a esa posibilidad.

Cinco de las 'apps' analizadas por Eticas tienen unas políticas de privacidad confusas. Una, Calendario Menstrual, directamente ni tiene un espacio dedicado a informar a las usuarias sobre qué datos se comparten. Esconder esas cláusulas en textos kilométricos plagados de argot técnico es una táctica habitual en la industria tecnológica para facilitar que los usuarios accedan a aceptar unos términos y condiciones que desconocen.

Información sensible

Otra de las justificaciones que esgrimen las compañías detrás de estas aplicaciones es que los datos se ceden de forma anonimizada. A priori, eso dificultaría la identificación de las usuarias. "Es algo totalmente falso, aunque eliminen el nombre de la persona es evidente que tienen la capacidad conocer toda la información personal que hay asociada a esa cuenta y a ese número de teléfono", advierte la directora ejecutiva de Eticas.

El informe de Eticas alerta que a través de esos datos "se puede averiguar (...) cuándo está menstruando, si se está buscando un bebé o si, por el contrario, quiere evitarlo". Ya en 2019 un estudio de Privacy International señaló que esas aplicaciones podían conocer nuestra vida sexual, hábitos de masturbación o el uso de anticonceptivos, una información "accesible para otros" y "vulnerable a los ataques". Aunque la ley protege los datos médicos con mayores regulaciones, estas 'apps' la incumplen al no considerarlos como tales.

Este tipo de datos sobre la fertilidad son cada vez más lucrativos para una industria de la publicidad digital que se nutre de la privacidad. En 2020 otra investigación de Privacy International destapó que 'apps' como Clue o Flo habían mandado datos menstruales de las usuarias a Facebook. La app Mi Salud, preinstalada por defecto en todos los dispositivos de Apple, no ha entrado en el estudio de Eticas porque va mucho más allá de la información menstrual. "El nivel de invasión es tal que pueden saber antes que tu si estás embarazada", alerta Galdón.

Nunca sabes cómo esta información puede perjudicarte de acabar en las manos equivocadas. En Estados Unidos, por ejemplo, la inminente derogación del derecho federal al aborto ha disparado las alertas por el uso de aplicaciones que permitirían localizar e identificar a las mujeres que decidan acudir a una clínica de interrupción del embarazo para acosarlas y criminalizarlas.