Médica de profesión

La Fiscalía investiga si la monja Teresa Forcades recetó sustancias ilegales

El colegio de médicos de Barcelona alertó de "hechos delictivos" en el ejercicio profesional de la religiosa

Teresa Forcades

Teresa Forcades / ACN

Valentina Raffio

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La fiscalía investiga a la monja y médica Teresa Forcades por un presunto delito contra la salud pública. Las autoridades investigan si la religiosa recetó sustancias ilegales y falsos remedios (como el controvertido clorito sódico, un compuesto tóxico utilizado en la fabricación de papel, desinfección de aguas y aconsejado por algunos gurús como alternativa terapéutica) a pacientes con enfermedades graves y si, a su vez, incitó a estas personas a abandonar los tratamientos médicos (y científicamente probados) indicados para sus patologías.

La investigación parte de una denuncia interpuesta a finales de enero por el Col·legi de Metges de Barcelona (CoMB), que alertó a las autoridades judiciales de que estas prácticas "podían ser constitutivas de delito", según ha publicado 'El País' y ha podido confirmar este diario. "La persona investigada ya había sido advertida por el CoMB con anterioridad sobre el hecho de que no se podía indicar, recomendar o divulgar teorías o tratamientos prohibidos para el uso humano sin evidencia científica", recalca la entidad en un comunicado emitido este viernes.

Forcades, por su parte, niega categóricamente las acusaciones, asegura no haber recibido "ninguna denuncia ni comunicación" de la fiscalía y rehúsa haber "infringido cualquier norma deontológica". "Desde 2018, el Colegio Oficial de Médicos de Barcelona está intentando de manera activa y constante coartar mi libertad de expresión sin ninguna base ni evidencia científica", critica la monja en respuesta a la información publicada este viernes por 'El País'.

Batalla contra las pseudociencias

No es la primera vez que los profesionales sanitarios denuncian ante las autoridades el peligro de las prácticas pseudocientíficas. En 2018, el Ministerio de Sanidad (entonces encabezado por María Luisa Carcedo) también interpuso una denuncia ante la fiscalía por la promoción de una sustancia similar a la lejía (conocida como 'suplemento mineral milagroso'), prohibida por la Agencia Española de Medicamentos desde el año 2010 y que, según defienden los defensores de estas pseudoterapias, serviría para tratar desde el autismo al cáncer.

Según ha podido comprobar este diario en varias ocasiones, tanto Forcades como el controvertido horticultor Josep Pàmies llevan años promocionando esta 'terapia de la lejía' como cura contra enfermedades como la malaria, el ébola y el cáncer, así como un "remedio para curar el autismo". Con la irrupción de la pandemia de covid-19, también empezaron a promocionar la ingesta de esta sustancia prohibida (cuya ingesta puede provocar síntomas clínicos graves, como la intoxicación) como remedio contra las infecciones por coronavirus.

En abril del 2020, los colegios de médicos catalanes también denunciaron estos hechos ante el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya como "un delito contra la salud pública y publicidad engañosa". La promoción de este falso remedio también ha sido objeto de sanciones por parte de la 'conselleria' de Salut, que ha interpuesto multas por un valor total de 600.000 euros por la promoción de este compuesto tóxico a través de 'congresos', talleres y charlas.