Colectivos vulnerables

Catalunya, a la cola con el Ingreso Mínimo Vital

La ayuda estatal creada en 2020 sólo llega al 5% de catalanes que viven bajo el umbral de la pobreza, la comunidad con menos perceptores

La semana pasada el Govern firmó un preacuerdo para traspasar la gestión de esta prestación estatal

El ingreso mínimo vital se podrá solicitar desde este lunes

El ingreso mínimo vital se podrá solicitar desde este lunes

Elisenda Colell

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"Poder acceder al Ingreso Mínimo Vital en Catalunya es una lotería, pero en cuanto te toca es como si ganaras la 'pedrea'", afirma José Manuel Ramírez, presidente de la Asociación Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales (AEDGSS). Un informe de esta entidad reporta que Catalunya es la comunidad donde menos personas en situación de pobreza acceden a esta ayuda social, creada precisamente durante la pandemia para ayudar a los más vulnerables. Solo llega a un 5% de personas que viven bajo el umbral de la pobreza. El pasado viernes la Generalitat firmó un preacuerdo con el Gobierno para poder gestionar esta ayuda social, como ya hace Navarra, la comunidad con más beneficiarios.

Cuando el Ministerio de Seguridad Social anunció la puesta en marcha del Ingreso Mínimo Vital, contó que la intención era garantizar una ayuda económica a los 2,3 millones de personas que, en España, viven en la pobreza más severa. A fecha de 31 de diciembre de 2020, según datos de la AEDGSS, tan solo ha llegado a 824.441 personas, el 35% de que debían beneficiarse de estas ayudas sociales antes que nadie. Si ampliamos el foco, y nos fijamos en los 8,8 millones de personas que en España viven bajo el umbral de la pobreza, esta ayuda tan solo la perciben el 9,35% de estos hogares. De entre los que la cobran, cada familia ingresa de media 437 euros al mes, menos de 200 euros por persona.

En Catalunya, la situación es especialmente dramática. Es la comunidad con menos beneficiarios de toda España, a nivel porcentual. Solo el 5% de personas que viven en la pobreza percibe esta ayuda gestionado por el ministerio de la seguridad social. La cobran 65.383 personas, aunque hay 1,2 millones de pobres. Es decir que el 95% de catalanes en situación de pobreza están excluidos de ella. Mientras tanto, la Renta Garantizada de Ciudadanía, que es la ayuda social que paga la Generalitat, llega al 12% de personas vulnerables, según el informe de la AEDGSS. Es la cuarta renta autonómica que llega más hogares después de Navarra y País Vasco, con porcentajes superiores al 50%.

Traspaso de la gestión

De hecho, la comunidad donde el ingreso mínimo vital tiene más beneficiarios es Navarra. El 24% de las personas en situación de pobreza perciben el IMV. Esta comunidad, junto con el País Vasco, son las únicas en las que el gobierno central ha traspasado la gestión del IMV. Un traspaso que lleva meses reclamando la Generalitat, y que la semana pasada se logró un preacuerdo en la mesa bilateral con el Gobierno Central para que así fuera. Las entidades sociales aplaudieron el preacuerdo, pero reclamaron celeridad. "Esperamos que el acuerdo sea inminente porque hay que mejorar con urgencia esta prestación", pidió en un comunicado la Taula d'Entitats del Tercer Sector, que definió el IMV como "una herramienta indispensable para reducir la pobreza, exclusión y las desigualdades".

Otra de las causas de la mala, o nefasta, implementación del Ingreso Mínimo Vital en Catalunya son las barreras burocráticas. "Los requisitos que tiene la norma, la falta de personal para tramitarlo y la dificultad de hacer el trámite de forma telemática, además de a brecha digital, están impidiendo a muchas personas acceder a esta ayuda", resume Ramírez. La gestión del IMV no es la única ayuda social en la que Catalunya está a la cola de todas las comunidades. Hace casi una década que es líder en desahucios y en listas de espera para las ayudas a la dependencia.