La lucha contra la pandemia

Las vacunas han evitado más de 300.000 contagios y 10.000 muertes en Catalunya

Los 13,2 millones de dosis administradas en un año han evitado 80.000 hospitalizaciones y 13.000 ingresos en ucis

Intervención de Carmen Cabezas y tres sanitarias en el acto de conmemoración de la administración de la primera vacuna del covid

Intervención de Carmen Cabezas y las sanitarias Lourdes Carrés, Sandra Paixà y Leyre Martínez, en el acto de conmemoración de la administración de la primera vacuna del covid. /

Montse Baraza

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El 27 de diciembre de hace un año Catalunya iniciaba la campaña de vacunación contra el covid-19. Doce meses después, hay un 85% de población vacunada con pauta completa y ha empezado la inmunización de terceras dosis. Figuras clave de ese esfuerzo por que la vacunación haya sido un éxito son los profesionales sanitarios, a quienes Salut, con el 'conseller' Josep Maria Argimon a la cabeza, ha querido este lunes agradecer su trabajo a lo largo de este último año. Ha sido en un acto en la Fira de Barcelona, uno de los puntos de vacunación por los que han pasado, y siguen pasando, miles de personas. De hecho, en unos días, en Fira se llegará a la cifra de un millón de vacunas suministradas.

La secretaria de Salut Pública, Carmen Cabezas, ha recordado que en un año en Catalunya se han administrado 13,2 millones de dosis de vacunas contra el coronavirus. Dosis que han "evitado más de 300.000 contagios, 10.000 muertes, entre 60.000 y 80.000 hospitalizaciones y entre 10.000 y 13.000 ingresos en ucis".

"Ha sido un año clave en la pandemia. La vacunación ha supuesto uno de los retos más importantes de nuestra historia reciente. Un proceso complejo y de éxito, que se ha ido modulando en función de las dosis. Ha sido una carrera de fondo", ha subrayado Cabezas, que ha puesto en valor el esfuerzo del personal sanitario, que se presentó voluntariamente, que hizo horas extras, que trabajó en festivos. "Gracias a todos por vuestra paciencia, por vuestro esfuerzo, por vuestra sonrisa, por ser parte de la solución", ha dicho Cabezas, que ha admitido que la irrupción de la variante ómicron ha "dificultado" el escenario de estos días.

A continuación ha sido hora de los protagonistas, los profesionales de la salud. Lourdes Carrés, enfermera y coordinadora del punto de vacunación de Fira, ha tomado la palabra en nombre de todos para poner en valor su trabajo y el "orgullo" que ha sido para ellos tomar parte en este proceso de vacunación. "Nunca pensé que vería en mi carrera profesional un equipo tan amplio y tan diverso, todos comprometidos con el objetivo común de la vacunación", ha señalado.

Un millón de dosis en Fira

"Me llamaron para participar en un equipo móvil de vacunación. Me fui de cabeza. Al principio nos costó situarnos. Empezamos en las residencias, uno de los colectivos más afectados. Recuerdo cuando la doctora Cabezas nos envió un estudio que demostraba un descenso de la mortalidad en residencias tras la vacunación. Fue clave y dio respuesta a nuestro esfuerzo y a nuestras expectativas. En abril, empezamos en Fira. Fuimos un poco ilusos. Pensamos que sería algo pequeño pero enseguida vimos que era un punto muy grande. Empezamos con mil vacunas y en un par de días pondremos la dosis un millón. Nunca lo hubiéramos imaginado", ha apuntado Carrés, valorando, además, la colaboración organizativa de Fira de Barcelona, de los equipos de limpieza, "imprescindibles", de seguridad, y otros servicios.

En un año, ha explicado, la rutina es la misma pero detrás de cada vacuna "hay uno, dos o tres profesionales que lo hacen posible. Vienen antes o después de sus compromisos laborales. Parte de la solución somos nosotros. Mil gracias a todos".

Sandra Paixà, enfermera de vacunación pediátrica en Reus, ha sido la siguiente en contar su experiencia. "Mi primer día fue la tarde del 5 de enero. Nos recibieron como si fuéramos los Reyes Magos. A partir de entonces, la vacunación entró a formar parte de nuestra rutina", ha explicado.  Ha recordado los recorridos por el territorio que hicieron los equipos los primeros meses de este año para vacunar lo más rápido posible a las personas mayores que viven en las residencias y el cuidado con el que se transportaban las vacunas.

Tensión con el pasaporte covid

Ha explicado que "ha habido momentos muy buenos", en los que los ciudadanos se felicitaban y se hacían fotos cuando se les inyectaba la vacuna y también otros que no lo han sido tanto, como cuando una parte de la población no vacunada se apresuró a vacunarse cuando entró en vigor la exigencia del pasaporte covid, y las enfermeras de algunos espacios de vacunación en los que había menos personal recibieron gritos e insultos. Paixà ha señalado que esa tensión se produjo porque en ese momento había muchos puntos de vacunación que habían cerrado y ha valorado positivamente que "cuando se vio el repunte de la demanda, se reabrieron puntos de vacunación en tiempo récord, en apenas 48 horas".

"Si Florence Nightingale viviera ahora, en lugar de un farolillo llevaría una vacuna en la mano", ha comentado Paixà, en referencia a la que se considera la madre de la enfermería moderna, que aparece en imágenes con un farolito con una vela dentro mientras atiende a los enfermos en su época, en el siglo XIX y principios del XX. Paixà ha destacado el cambio de vida que ha supuesto para todos la pandemia. "Este acto es un reconocimiento a todos los que están dando el mil por ciento por la vacunación".

Por su parte, la técnica administrativa y de planificación de puntos de vacunación de la Región Metropolitana Norte, Leyre Martínez, ha expresado el sentimiento de "agotamiento y cansancio" tanto de los profesionales como de la población, pero ha advertido de que pese a ese cansancio, "todos seguiremos adelante, trabajando para que esta pandemia acabe. Eso es lo importante". "Estamos cansados, pero contentos del éxito de la vacunación, y seguiremos al pie del cañón hasta el final", ha remachado Carrés. Las tres enfermeras han reclamado a la población que sigan las recomendaciones sanitarias para poder acabar con el virus.

En un mensaje en Twitter, el 'president' Pere Aragonès ha agradecido al personal sanitario el "éxito" de la vacunación. "Se han administrado 13 millones de dosis y hemos avanzado mucho, especialmente en la reducción de la mortalidad, pero hay que seguir protegiéndonos contra una pandemia que todavía no ha acabado", ha escrito.

Según los datos del Departamento de Salut, este lunes, el 89,7 % de las personas mayores y discapacitados que viven en residencias ya tienen la tercera dosis de la vacuna, un porcentaje que desciende al 54,2% entre el personal que les atiende. Solo el 60,8% de los catalanes de entre 30 a 34 años tiene las dos dosis de la vacuna contra el covid-19 y el 59,2 % de los de entre 20 y 29 años.

Los niños de 5 a 11 años, cuya vacunación se inició este mes de diciembre, ya tienen en un 15,3% la primera dosis de la vacuna, mientras que los que tienen de 12 a 15 años son un 80,9% los que la tienen y un 66,1 % ya tienen la segunda.