proceso judicial

El profesor de La Salle acusado de agresión sexual declina declarar ante el juez

El magistrado le comunica en persona el auto de procesamiento del docente y exentrenador de fútbol, al considerar que existen indicios racionales contra él

Entrada del colegio La Salle Bonanova

Entrada del colegio La Salle Bonanova / Joan Cortadellas

Guillem Sánchez
J. G. Albalat
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A pesar de que en su dietario personal relata supuestas agresiones sexuales a alumnos suyos, tal y como reveló EL PERIÓDICO, el profesor y exentrenador de fútbol de La Salle Bonanova, Víctor P. G., declinó declarar este martes ante el juez que investiga uno de estos casos, el de G. C. G, que también era su hijastro. El titular del Juzgado de Instrucción número 6 de Barcelona, Miguel Ángel Tabares Cabezón, le comunicó oficialmente en persona el auto de procesamiento, al haber encontrado indicios delictivos contra él. El docente podía haber rebatido las imputaciones y declarar, pero no lo hizo, según fuentes jurídicas.

En el auto de procesamiento, el juez expone que, entre 2010 y 2012, Víctor P. agredió sexualmente a G. C. G., cuando este tenía entre 12 y 14 años. Y no solo eso, sino que supuestamente también le golpeó, le amenazó con un arma blanca, le castigó “gratuitamente” y le humilló de palabra. El magistrado considera que presuntamente cometió un delito de agresión sexual.

G. C. G., que ahora es mayor de edad, denunció que Víctor P. G. le había obligado "en muy repetidas ocasiones" a masturbarse en su presencia, mientras él hacía lo mismo. Pero otras veces, era el propio imputado el que le hacía una felación, le realizaba tocamientos por todo el cuerpo, en especial en los glúteos, y "le habría solicitado mantener relaciones sexuales completas”, subraya en auto de procesamiento. En su denuncia, la víctima precisó los golpes, amenazas y humillaciones que le profería el docente. “Los hechos se producían tanto en el colegio como en diversos domicilios familiares y en viajes”, recalca el togado.

Castigos y humillaciones

Los informes médico forenses precisa que el imputado “castigaba o humillaba” al menor, según sus palabras, si sus peticiones eran o no complacidas. El juez subraya que el relato de G. C. G "resulta creíble" por "su claridad, espontaneidad, lógica y coherencia" y, por lo tanto, es "suficiente indicio" para continuar la causa contra Víctor P. G. El docente siempre ha negado las agresiones sexuales.

El profesor dejó redactado en varias libretas manuscritas el "tormento interior" que padece y la distorsión cognitiva que le hace percibir graves conductas pederastas con menores como si fueran relaciones de amor sanas. Todos los pasajes parecen haber sido redactados durante viajes que Víctor P. hizo en los años 2007 y 2008 a ciudades como Kiev (Ucrania), Rennes o París (Francia) y Innsbruch (Austria). Habla de jugadores de fútbol–niños entre 10 y 13 años a los que entrena o ha entrenado en el Club Esportiu Bonanova– de quienes ha abusado sexualmente o desea hacerlo. Mezcla sueños con recuerdos. Cita hasta siete menores distintos: siete posibles víctimas.

El otro proceso

Uno de ellos de esas víctima fue un exalumno del colegio Viaró Global School, que también lo ha denunciado. Este proceso está siendo instruido por otro juzgado, en concreto el de Instrucción 4 de Barcelona. Fuentes conocedoras de estas pesquisas aseguraron a este diario que Víctor P. G. ya ha testificado ante el magistrado, aunque todavía no ha procedido a su procesamiento. A pesar de que la denuncia se remonta a hechos de entre el 2003 y el 2006, tanto el juez instructor como la Audiencia de Barcelona han determinado que no han prescrito por el paso del tiempo y, por lo tanto, debe investigarse hasta el final que ocurrió.

En su diario personal el diario Víctor P. cita a menudo a esta segunda víctima y describe la relación entre ambos como si fuera algo entre dos adultos. En uno de los pasajes, incluso sueña que vuelven a ser pareja: "Estamos en la cama, besándonos, haciendo el amor, como en nuestra buena época", escribe.