Salud sexual

Anticonceptivos femeninos y masculinos: efectos secundarios, frecuencia de uso y otras claves

El preservativo sigue siendo el método estrella, tanto en hombres como mujeres

Persiste el desconocimiento y las dudas en torno a la píldora, pese a que los beneficios son superiores a los riesgos

Expendedor de preservativos instalado en los lavabos del IES Priorat de Falset.

Expendedor de preservativos instalado en los lavabos del IES Priorat de Falset.

Patricia Martín

Patricia Martín

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La anticoncepción ha avanzado mucho en los últimos años en España. Aunque persiste un porcentaje de españolas (el 21%) que reconoce que mantiene relaciones sexuales sin protección con bastante frecuencia, un 61% declara que siempre usa algún método. Entre ellos, el preservativo sigue siendo el hábito estrella, seguido de la píldora, que se utiliza menos en España que en los países del entorno porque aún persiste cierto miedo a las hormonas, desconocimiento o falsas creencias. Estas son las claves de la anticoncepción en España: 

Los métodos de las mujeres

La Encuesta Nacional de Anticoncepción, en su edición de 2020, indica que el 31% de las mujeres que usan protección en sus relaciones optan por el preservativo masculino. En segundo lugar se sitúa la píldora, elegida por el 18% de las féminas en edad fértil. El DIU de cobre es usado por un 4% y otro 4% usa el DIU hormonal.

La ligadura de trompas o el método Essure (oclusión tubarica) es usado por el 2%, el anillo vaginal por otro 2% y un implante subcutáneo por el 1,4%. A partir de ahí se usan de forma más minoritaria los parches, las minipíldoras, los inyectables e incluso en el 0,1% de los casos métodos sin eficacia completa en la prevención del embarazo como el ogino o la marcha atrás.

Los métodos de los hombres

Dicha encuesta, realizada por la Sociedad Española de Contracepción desde 2014 y referente en España en este tema, solo se efectúa entre mujeres. Para encontrar datos oficiales sobre la protección usada por los hombres hay que remontarse a la <strong>Encuesta Nacional de Salud Sexual</strong>, que el Ministerio de Sanidad no realiza desde 2009. Aquel sondeo indicaba que el 61% prefiere el preservativo masculino, seguido muy de lejos por los hombres que se realizan una vasectomía (el 9%). El 22% confía en la píldora tomada por sus parejas –dado que la píldora masculina aún está en fase de estudio- y las cremas espermicidas solo son usadas por el 2,8%. 

Uso del doble método

Para prevenir embarazos y enfermedades de transmisión sexual, el 16% de las mujeres siempre usa preservativo junto con algún otro método anticonceptivo, según la citada Encuesta de Anticoncepción. Otro 8,8% lo hace de forma ocasional y un 73% nunca. No obstante, el uso combinado es más frecuente entre las mujeres jóvenes, de 15 a 19 años. 

La píldora del día después

El 38% de las mujeres en edad fértil declara haber recurrido en alguna ocasión a la píldora del día después. Este porcentaje supera el 40% entre las de 20 a 39 años. Y es que se calcula que un 6% del total de las mujeres españolas no usa ningún tipo protección en sus relaciones sexuales y no desea tener hijos, de ahí que algunas de ellas recurran a la píldora del día después y otras tengan que abortar. En el 2021 se produjeron 88.269 interrupciones voluntarias del embarazo, un 10,97% menos que en el año anterior después de tres años consecutivos de pequeños repuntes. 

Las dudas y miedos

Entre las mujeres españolas persiste cierto miedo a los efectos secundarios de los anticonceptivos hormonales, así como un desconocimiento sobre los mismos. Un reciente estudio del Centro de Salud Sexual Alicante III y Exeltis señala que la mitad de las españolas no conocen que existen dos tipos de píldoras (combinada y de sólo gestágeno). Sólo un tercio saben lo que son los estrógenos y aún menos los progestágenos, de ahí que los ginecólogos apoyen una campaña audiovisual, puesta en marcha recientemente, destinada a que las mujeres dejen atrás los complejos y estereotipos y acudan con más frecuencia a un especialista que les asesorar sobre cuál método es más eficaz y seguro en su situación. 

Los efectos secundarios sobre el aparato genital

Los anticonceptivos orales disminuyen la incidencia de <strong>cáncer</strong> de ovario o endometrio y se ha detectado un posible aumento de los tumores de cérvix, aunque es una enfermedad muy infrecuente. Respecto al cáncer de mama, la mayoría de estudios indican que no aumenta su incidencia o lo hace muy discretamente. Por el contrario, la píldora suele ayudar a disminuir la dismenorrea (los calambres menstruales o el dolor), la hipermenorrea (reglas muy abundantes y de duración excesiva) y las anemias. Asimismo, ayudan a mejorar los quistes ováricos funcionales, los trastornos menstruales, la incidencia de embarazos ectópicos o la enfermedad inflamatorio pélvica.

Otros efectos secundarios

Entre los efectos secundarios más importantes se ha descrito un aumento de la hipertensión, de los coágulos o de las enfermedades cardiovasculares, especialmente entre las mujeres fumadoras y mayores de 35 años.

Asimismo, la píldora puede provocar retención de líquidos, cefaleas, disminución de la libido, depresión, irritabilidad, náuseas, colitis o aumento de peso.

Si bien, la Agencia Española del Medicamento asegura que sus beneficios para evitar embarazos no deseados superan los posibles riesgos y que no existe ninguna razón para dejar de tomar un anticonceptivo hormonal combinado si no se experimenta ningún problema. En cuanto al riesgo de sufrir tromboembolismo venoso, según la AEMPS, es “bajo” y su aparición es más frecuente en el primer año.  

Suscríbete para seguir leyendo