Los incidentes de La Mercè

Mossos y Guardia Urbana refuerzan su presencia en Barcelona para evitar más botellones

Los cuerpos de seguridad no aclaran en cuántos agentes repercute este refuerzo, pero afirman que se trata de un dispositivo "flexible"

35 de los detenidos por los altercados del fin de semana pasado acumulan un centenar de antecedentes policiales, según los Mossos

Botellón en la playa del Bogatell.

Botellón en la playa del Bogatell. / JORDI OTIX

Elisenda Colell

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Las restricciones de la pandemia del coronavirus y las ordenanzas municipales impiden que puedan celebrarse botellones, o macrobotellones, en las calles de Barcelona. Los Mossos y la Guardia Urbana quieren evitar los altercados que de vivieron el fin de semana de las fiestas de La Mercè de Barcelona, con fiestas de hasta 40.000 personas, altercados, saqueos y heridos. Sin embargo, muchos adolescentes siguen haciendo llamamientos para llenar las playas de Barcelona este fin de semana, mientras las 70 personas detenidas el pasado fin de semana han quedado en libertad.

Los mensajes van que vuelan. "Esta noche Barceloneta", indican algunos adolescentes desde la mensajería instantánea en grupos multitudinarios de mensajería móvil. Los Mossos y la Guardia Urbana quieren evitar que se repitan los mismos incidentes que durante las fiestas de La Mercè. Y es por ello que para este fin de semana, van a "reforzar" la presencia policial en los lugares donde crean que se pueden montar fiestas. El objetivo es doble. Por un lado, evitar "alteraciones del orden público y hechos delictivos" y a la vez detener a "las personas que generan altercados". Fuentes oficiales de los Mossos aseguran que, por el momento, no les consta ninguna convocatoria en la Barceloneta, pero afirman que el dispositivo es "flexible" y "dinámico".

Detenciones

En un comunicado, los Mossos también han hecho un balance de las detenciones que hicieron el pasado fin de semana, relacionadas con desórdenes públicos, robos violentos, robos con fuerza, hurtos, daños, lesiones y atentado contra los agentes de la autoridad. La mitad de los arrestados acumulan, en global, 117 antecedentes policiales aunque el resto no tiene ninguno. En total se registraron 70 detenidos, de los que 49 son mayores de edad y 21 menores. La mayoría de ellos, el 65%, tienen nacionalidad española y entre los menores hay dos que se han escapado de un centro tutelado de la Generalitat. La mayoría de los detenidos viven en el área metropolitana y todos ellos están en libertad.

Durante la primera noche, según datos facilitados por el Sistema de Emergencias Médicas (SEM) un total de 14 personas sufrieron lesiones con arma blanca o cortes cometidos a raíz de caídas y de la gran cantidad de cristales que había en la zona. Durante la segunda noche, según las mismas fuentes, el SEM no atendió ningún herido por arma blanca.

La Cadena Ser ha entrevistado a dos de los detenidos, que justifican su comportamiento por el consumo de drogas, entre ellos los efectos del 'gas de la risa' o óxido nitroso. También explican que tienen "rabia" a los cuerpos policiales, a raíz de su actuación en desahucios o manifestaciones como la de Pablo Hasél. Un tercer entrevistado por esta emisora reconocía que optó por robar porque "no hay trabajo ni ayudas sociales, de alguna manera tengo que conseguir dinero y no será pidiendo".

La Policía autonómica considera que los detenidos "no están relacionados entre ellos" y descarta, asimismo, que los altercados y los delitos cometidos formasen parte de "actividades criminales organizadas".