Pobreza energética: el precio de la luz agrava la "angustia" de los más vulnerables

Ni se confirma ni se descarta, de momento, que la pobreza energética fuera la causa por la que falleció la mujer de 71 años en el incendio que se produjo su domicilio, en Olesa de Montserrat (Baix Llobregat), el domingo. Aunque inicialmente el ayuntamiento así lo atribuyó, los Mossos d'Esquadra han abierto una investigación para esclarecer las causas del incendio, en el que además resultaron heridas otras 18 personas, tres de ellas de gravedad. La Aliança contra la Pobreça Energètica lo trata, por ahora, como un posible caso de pobreza energética, a la espera de la investigación.

Se sabe, con todo, que la instalación eléctrica del edificio estaba en mal estado (se investiga si esto fue la causa del incendio). También, que en el barrio de Sant Bernat, donde se produjo el fuego, viven familias vulnerables. Y todo ello pone inevitablemente de nuevo el foco en una lacra social que afecta a un 10% de los catalanes: la imposibilidad de pagar el importe de la electricidad. Un mal que se agravará cuando este mes empiecen a llegar las facturas de la luz tras las subidas de precios desorbitadas. Las entidades piden a las administraciones que actúen. En la memoria de todos permanece el caso de la anciana de 81 años fallecida, en 2016, en Reus (Tarragona) por un incendio causado a causa de una vela tras dos meses sin suministro eléctrico.

La Aliança contra la Pobreza energética, a la espera de la investigación en Olesa de Montserrat, advierte de que el barrio donde se produjo el incendio es "vulnerable"

"Ya hemos visto casos de incendios relacionados con la pobreza energética. Por eso pedimos a la Generalitat que implemente el protocolo de detección de la pobreza energética a través de los Bombers", defiende Maria Campuzano, portavoz de la Aliança contra la Pobreza Energética. Aunque la entidad que evita, por el momento, tratar la tragedia de Olesa de Montserrat como un caso de pobreza energética, Campuzano incide en que el de Sant Bernat "es un barrio vulnerable con gente que sufre pobreza energética". Y precisa que, al quedar todo el piso calcinado, puede ser que nunca se lleguen a determinar las causas del fuego.

"Más medidas"

A las entidades les preocupa la subida de los precios de la electricidad. Según Campuzano, la situación de estos meses "ha agravado más la angustia" de las familias. "La subida de precios afecta, sobre todo, a las familias vulnerables que están en el mercado regulado. Estar en él es la única garantía de acceder al bono social", justifica la portavoz de la Aliança. La misma advierte de que, si no se toman "más medidas" de cara al invierno, habrá "más problemas" y/o "víctimas mortales" (en los casos "más extremos"). Campuzano también exige a Endesa que ponga en marcha el protocolo de las conexiones irregulares, establecido para "evitar tragedias", y que, en casos como el de Olesa de Montserrat, se "investigue siempre" el estado del sistema eléctrico para determinar si la compañía ha "incumplido" sus obligaciones de mantenimiento".

"Cada vez tenemos más familias que sufren pobreza energética", advierte una trabajadora social

"La pobreza energética va acompañada de la pobreza social. Desde la crisis, hay más gente que no puede remontar. Si los salarios son más bajos y hay más miembros familiares en paro, se dejan de pagar facturas", explica Bárbara Vega, miembro del Col.legi Oficial de Treball Social de Catalunya y de la comisión de Serveis Socials Bàsics. Si bien la Administración adopta medidas como los bonos sociales, hay muchas familias vulnerables que no saben cómo solicitarlos. Son los trabajadores sociales quienes les ayudan a hacerlo. "Cada vez tenemos más familias que dejan de pagar suministros. ¿Cuál es el compromiso de las compañías? No se les pide nada a cambio", critica Vega.

La misma advierte de que, a finales de este mes o a principios del siguiente, habrá "colas" en las puertas de los servicios sociales como consecuencia de los precios "desmesurados" de la electricidad. "La pobreza energética es una realidad: la gente no enciende la luz por miedo a pagar", asegura esta trabajadora social. Y también hay otra realidad: los edificios en malas condiciones, cuya reparación "pagan las familias, no las compañías". "Y, si las familias están empobrecidas, ¿cómo van a pagar una derrama para mejorar el sistema eléctrico", concluye Vega.

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