Crisis sanitaria

La Generalitat renuncia a aplicar el toque de queda

Los 19 municipios donde aún hay confinamiento nocturno dejarán de tenerlo el próximo viernes, si el TSJC lo avala

Fuentes del Govern justifican la marcha atrás en que “está visto que no quieren entender”

TSJC limita el toque de queda a 19 municipios y deja fuera a Barcelona

TSJC limita el toque de queda a 19 municipios y deja fuera a Barcelona / Quique Garcia

Xabi Barrena

Xabi Barrena

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La Generalitat ha decidido, a través del Procicat, renunciar a la implantación del toque de queda en Catalunya, después de los dos varapalos recibidos la última semana por parte del Tribunal Superior de Justícia (TSJC). El Govern ha optado este martes por prorrogar las medidas de contención del covid-19 que fueron publicadas el 19 de agosto, es decir la limitación de asistentes a reuniones o encuentros familiares y de carácter social, pero descarta continuar con su restricción más polémica, la de la movilidad nocturna, que el viernes próximo decaerá también en los 19 municipios donde aún estaba vigente. La medida queda aparcada, pues, pese a que el 'president' de la Generalitat, Pere Aragonès, había insistido este lunes en su intención de mantenerla, porque, en su opinión, seguía siendo "necesaria" para frenar no solo el avance del coronavirus, sino también para evitar las aglomeraciones de personas que se han visto en los últimos tiempos bebiendo en la calle en botellones.

Así, si el TSJC lo avala en su próxima reunión, en Catalunya se seguirán limitando las reuniones, tanto en el ámbito público como en el privado, a un máximo de 10 personas, a menos que se trate de convivientes. Se mantiene el 70% del aforo a la asistencia a actos y ceremonias civiles o religiosos, incluidos bodas, culto y ceremonias fúnebres. Estas medidas se prorrogarán y tendrán una vigencia de siete días, es decir hasta el 3 de septiembre.

La renuncia a mantener el pulso por parte del Govern obedece, según fuentes del Ejecutivo catalán, a que “está visto que no quieren entender” la importancia capital, para el curso del control pandémico, que tiene el toque de queda. Además, sostienen estas fuentes, el tira y afloja con el TSJC acaba provocando interferencias, entre las peticiones de toque de queda y los rechazos a esta restricción, en la comunicación al ciudadano. “En el fondo, [los jueces] no solo hacen de epidemiólogos , sino que también hacen la comunicación se haga más compleja”, sentencia esta voz.

Más allá de la parte política, cabe reseñar que la decisión de no recurrir ha venido también aconsejada por los servicios jurídicos que, seguramente, no deben de haber advertido mejores argumentos que los ya rechazados por el TSJC.

En contra del criterio médico

Preocupado por la inminente vuelta al trabajo y el siguiente regreso a las aulas, el médico e investigador de la Universitat Oberta de Cataunya (UOC) y la Universidad de Leicester. Salvador Macip, alertaba este lunes a este diario que "ahora mismo es un error rebajar las medidas. El toque de queda, por incómodo que pueda resultar, ha sido muy efectivo para minimizar las interacciones sociales y bajar los contagios. Eliminarlo ahora podría ser contraproducente, sobre todo porque necesitamos llegar al otoño con las mejores condiciones posibles", argumentaba.

"Necesitamos consolidar y reforzar las medidas de prevención y control que ya tenemos. Si los botellones y las aglomeraciones están prohibidos hay que poner medios para hacer cumplir esta restricción. Las imágenes de las fiestas de barrio abarrotadas de gente muestran que muchos han perdido el miedo al virus", comentaba, por su parte, Antoni Trilla, jefe del Servicio de Medicina Preventiva y Epidemiología del Hospital Clínic de Barcelona.