Querella del fiscal por un 'zoo' ilegal de anfibios protegidos en Barcelona

La Fiscalía de Medio Ambiente de Barcelona ha presentado una querella en los juzgados de Barcelona contra una persona que en unos bajos de un inmueble del barrio barcelonés de Gracia almacenaba casi un centenar de diferentes clases de tritón (un anfibio urodelo de unos 12 centímetros de longitud) y salamandras vivas consideradas especie protegida. El hallazgo se produjo el 22 de abril del 2020, tras producirse a las 5 de la madrugada un incendio en el local de 60 metros cuadrados donde estaban los animales.

El Juzgado de Instrucción número 1 de Barcelona ha abierto unas diligencias previas para investigar el curioso descubrimiento. En la querella, firmada por la fiscala Raquel Carillo, se imputa a R. F. S. un delito contra la fauna protegida, tanto como por la posesión como por la captura de especies amparadas por la legislación catalana, española e internacional.

El 22 de abril del 2020 y tras producirse el incendio en los bajos del edificio, la Guardia Urbana avisó al Área Central de Medio Ambiente de los Mossos d’Esquadra porque en el interior del local habían numerosos reptiles de diferentes especies. El propietario y ahora querellado, según el escrito de la fiscalía, no tenía autorización que le habilitaban para poseerlos. Los ejemplares de salamandras y tritones estaban distribuidos en 165 receptáculos (terrarios, acuarios y otros recipientes).

La intervención de los Mossos, que llegaron a realizar hasta tres inspecciones, permitió decomisar 96 especímenes vivos de anfibios urodelos, todos menos uno pertenecientes a especies protegidas (93 de fauna autóctona y 2 de exótica). En concreto, los agentes encontraron ejemplares de tritones de Montseny, alpino, palmat, pirenaico e ibérico, así como salamandras de norte de áfrica, comunes y hasta una gigante de China. Otros tres tritones (uno de ellos verde americano) se hallaron ya muertos

Capturados en el Montseny

La querella sostiene que los ejemplares de tritón del Montseny fueron capturados por R. F. S. “o por persona a su ruego” durante los años 2016 y 2017 en el parque natural y reserva de la biosfera catalán del mismo nombre. Estas especie solo habita en concretos torrentes de este espacio natural. Incluso, algunos de esos animales que tenía el querellado portaban un chip subcutáneo registrado que los identifica como seres que viven en el citado lugar. La fiscala destaca que el acusado marcaba en algunos de los terrarios que poseía el nombre del torrente del Montseny en el que se habían capturado, como Perramó, Greixer o Acherito. Los ejemplares intervenidos fueron trasladados al Centro de Recuperación d’Afibis y Reptils de Catalunya, lo que supuso unos gastos de recuperación de 13.960 euros.

El Tritón del Montseny (calotriton arnoldi), el Tritón pirineíco (calotriton asper), el Tritón palmat (lissotriton helveticus), el Tritón ibérico (lissotriton boscai), el Tritón alpino (ichtyosaura alpestri) y la salamandra norte-africana (Salamandra algira) figuran en el real decreto del 2011 por el que se aprueba el listado de especies silvestres en régimen de protección especial y el catálogo de especies amenazadas. El Tritón del Monseny, además, está clasificado como en peligro de extinción. Estas especies también están amparadas por el Convenio de Berna, directivas de la Unión Europea, la ley española del patrimonio natural, entre otras normativas, entre ellas de la catalana de protección de los animales. Por ello, está prohibida sin excepción la posesión, tráfico, retención, caza, captura y muerte de las mismas. 

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