LA COMISIÓN DE SALUD PÚBLICA

El cierre de Semana Santa recibe el primer visto bueno de las autonomías

La Comisión de Salud Pública aprueba el documento que incluye el cierre de las autonomías, el toque de queda entre las 22 y las 6 horas y las reuniones de un máximo de 4 personas

La aprobación definitiva se llevará a cabo en el Consejo Interterritorial del próximo día 10 de marzo

Los planes para Semana Santa, en el limbo tras la reunión de comunidades y Gobierno

Los planes para Semana Santa, en el limbo tras la reunión de comunidades y Gobierno

Manuel Vilaseró

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La comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial ha dado el visto bueno este jueves al plan de la Semana Santa propuesto por el Ministerio de Sanidad. Así, la comunidades autónomas deberán mantener su cierre perimetral como mínimo entre entre el 26 de marzo y el 9 de abril, el toque de queda entre las 22 y las 6 horas y limitar las reuniones tanto en interiores como en exteriores a un máximo de 4 personas. También se recomienda la no vuelta al lugar de residencia de los estudiantes universitarios que vivan durante el curso académico en otra comunidad autónoma o país y que "se eviten todos los viajes que no sean necesarios". 

El documento aún debe pasar por el filtro más político. Su aprobación definitiva tendrá lugar el próximo 10 de marzo en el Consejo Interterritorial de Salud en el que participan los consejeros autonómicos. En la comisión de Salud Pública también participan las comunidades, pero a nivel más técnico, a través de los directores de Salud Pública.

Discrepancias

No puede descartarse que alguna comunidad insista en incluir modificaciones. Algunas de los directores de Salut Pública han votado en contra de algunas de la medidas, según ha reconocido la secretaria de Estado de Sanidad, Silvia Calzón. No afectará a buen seguro al cierre perimetral. A éste solo se opone frontalmente Madrid, como ya ocurrió en el Consejo Interterritorial del pasada miércoles. Es, con Extremadura, la única autonomía de la Península que actualmente tiene sus fronteras abiertas.

Los casos de las islas son una cuestión a parte. Ni Baleares ni Canarias tienen cierres perimetrales. Consideran suficientes las pruebas PCR que exigen a los pasajeros, tanto marítimos como aéreos. El plan de las pasadas navidades también les eximió de establecerlos. Ahora Baleares parece inclinarse a aceptarlos pero Canarias es reticente. El portavoz del gobierno canario, Julio Pérez, ha advertido que no prevé el cierre perimetral del archipiélago y que en cualquier caso, si se estableciera incluiría el regreso de familiares, la llegada de turistas y familiares. 

La presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, ha argumentado en el parlamento autonómico "que la situación está yendo bien y, además, no veo improcedente que un ciudadano de otro rincón de España venga a su capital a un museo, a consumir en una tienda o a mover la economía si lo hace respetando las normas sanitarias que hemos puesto entre todos". 

No lo ve así Fernando Simón. "Estamos empezando a tener una cierta complacencia con incidencias que no son todavía buenas", ha lamentado y ha advertido que "estamos con un nivel de ocupación de ucis muy alto que si se produjera un incremento rápido de la transmisión, probablemente no tendríamos capacidad de reacción".

La incidencia media cae cada vez con más lentitud. Este jueves ha caído sólo 6 casos, situándose en 153 por 100.000 habitantes. En Madrid sólo ha bajado cinco y, con 253, sigue siendo la única autonomía que sigue en el nivel de riesgo extremo. Catalunya esta en 193 casos pero solo ha bajado 3. La ocupación media de las ucis en el conjunto de España en el 25,44%, en la zona de riesgo extremo de saturación hospitalaria.

Más restricciones

Si la propuesta sale definitivamente adelante, Ayuso deberá reducir también el número de personas que deja sentarse en las terrazas, actualmente seis. Y no podrá relajar las restricciones que estén vigentes 14 días antes de la Semana Santa. El documento incluye el compromiso de las comunidades autónomas de no bajar el nivel de alerta desde las dos semanas previas al inicio de la Semana Santa "aunque los indicadores sean favorables".

El documento presentado por Sanidad argumenta también que en Semana Santa todavía no se habrá inmunizado con la vacuna a una proporción suficiente de la población para conseguir una reducción significativa del riesgo.  Por ello, dice, las medidas no farmacológicas de control de la transmisión seguirán siendo las principales medidas de salud pública para evitar un nueva ola epidémica.

Eventos y ceremonias

La Comisión de Salud Pública ha aprobado también la no celebración de eventos masivos "de cualquier índole" que impliquen aglomeración o concentración de personas.  Las ceremonias en espacios cerrados seguirán las normas de aforo y otras medidas establecidas en el documento de 'Actuaciones de respuesta coordinada para el control de la transmisión de covid-19' según el nivel de alerta de cada comunidad autónoma. También se desaconseja expresamente la celebración de encuentros sociales en los domicilios o en otros espacios cerrados con no convivientes.